Prefacio
Siempre había sido del tipo de persona de la que nadie sospecharía que hiciese cosas malas, quiero decir ¡vamos! Había sido la mejor alumna de mi generación, me metía en problemas sólo para salvar a mis amigos y me la pasaba en la biblioteca. Pero ahora las cosas eran diferentes...
Por cierto soy Hermione Grang... Vulturi y esta es mi nueva vida ahora. Tal vez muchos se pregunten: ¿Cómo es que pasé de ser una bruja nacida de muggles a ser parte del clan más antiguo de vampiros? Fácil de responder: Luego de la batalla de Hogwarts y con el pasar de los meses caí enferma, nada ni nadie sabía el porqué. Hasta que un buen día Draco Malfoy apareció en San Mungo y nos relató la historia de cómo había descubierto que Bellatrix Lestrange había puesto una maldición en cuchillo con el cual me hizo la cicatriz aún llevo orgullosamente en el brazo, aunque claro a ojos humanos no sea visible.
La maldición consistía en drenar toda mi sangre hasta que un día sin más fuerza muriese. Harry y Ron no se dieron por vencidos pero cuando caí en la etapa terminal fue el mismo Malfoy quien nos trajo la solución: Conocía a los Vulturi, la realiza vampírica.
Tras no hallar ninguna solución, Harry y Ron aceptaron y fueron a hablar con él. Aro accedió a cambio que le diesen la joya de la corona que le hacía falta: yo. Según el, yo sería una pieza clave en su guardia y que le haría falta. Así pues luego de llegar a un acuerdo el mismo Aro me transformó y aquí me tienen casi 20 años después.
El tiempo no ha pasado en vano: Harry y Ron están más "viejos", cómo me gusta decirles, casados y con unas vidas tranquilas, tal y como se lo merecen. Ahora debido a que cumplo mi deber como parte de una Vulturi no los puedo visitar tanto pero amo pasar el tiempo con ellos, y ahora también con sus hijos.
Suspiré y mire a mí alrededor. Mi habitación era lo suficientemente grande como para una persona, pero era buena para guardar recuerdos y memorias. En estos instantes antes de empezar a divagar sobre los últimos 20 años de mi vida me encontraba mirando una foto, la única prueba que tenía de que él era real.
Edward Cullen.
Aquel vampiro que conocí hace 22 años, cuando me encontraba de vacaciones de verano, antes de comenzar el quinto curso en Hogwarts. Una sonrisa se formó en mi rostro, pues no solo lo conocí a él sino a todo el clan Cullen; recuerdo perfectamente que me costó trabajo ganarme la confianza de uno de sus miembros: Jasper.
Al principio creí que me odiaba pero luego se convirtió como una especie de hermano para mí. Y como no olvidar a Rosalie que es bella por fuera y por dentro, es una pena que no sea humana porque es tan pura como el agua de los manantiales y en estos tiempos se necesita gente así. También está Alice, mi loca amiga que ve el futuro y que es adicta a las compras, me pregunto si seguirá usando al pobre Jasper como maniquí cuando le dan ataques de compras…
Espero que si algún día vuelvo a encontrarme con ellos, Alice no quiera que la acompañe a comprar ropa ni mucho menos que me use de maniquí. Finalmente están Carlisle y Esme que son la cabeza de la familia, son personas realmente sabias y pacíficas. Puedes sentir una enorme tranquilidad al hablar con ellos. Al que casi me olvido mencionar es a Emmett que es el bromista de la familia. Él me recuerda muchísimo a Fred y George Weasley. Creo que es lo único que puedo decir de ellos pero al que siempre recuerdo es a Edward. Creo que no lo he dicho pero fue mi primer amor e ilusión. Aunque lo sigo queriendo. Sé que nunca me corresponderá pero quisiera verlo a él más que a nada, aunque también a Jasper ya que él me lograba tranquilizar. Estoy volviendo a reconsiderar preguntarle a Aro si me podría permitir hacer un viaje para encontrarlos, sería bueno poder contactar de nuevo.
El sonido de la puerta me sacó de mis divagaciones; me apresuré a esconder la foto de los Cullen y me levanté a abrir la puerta.
-Hey –me dijo Alec Vulturi, uno de los miembros de la guardia que en el poco tiempo de convivencia se había convertido en un hermano protector.
-Alec, que sorpresa. ¿Qué te trae por aquí?
-Es Aro, quiere verte –me informó con una mirada preocupada, el sabía lo que Aro quería pero no me iba a decir, siempre era así.
-Bien, en un momento voy- dije cerrándole la puerta en sus narices. Me fui a mirar en el espejo y arreglé mi ropa, esperaba que Aro me encomendase una misión.
Habían pasado 15 años desde que no iba a una.
¡Hola!
Antes que me maten por no actualizar mis otras historias déjenme contarles que esta historia la había publicado anteriormente en Potterfics, sin embargo la estoy re subiendo aquí porque la historia ha entrado en un modo de re edición puesto que esta historia la escribí en el 2011 cuando era una cría. Así que mientras voy subiendo y corrigiendo esta historia y termino con el cap de Through her soul espero que me dejen unos reviews que siempre me animan a continuar :D
¡Hasta la próxima!