Escribo este fic partiendo de la base de que han visto Leonard Betts y Never Again, es mi visión de cómo terminó realmente esa conversación y ese silencio incomodo al final del capítulo.
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EL silencio se hizo incómodo. Ella miraba el piso sintiéndose la persona más torpe del mundo pero a la vez la confusión y la búsqueda que la llevaron a actuar del modo en que lo había hecho aminoraban el sentimiento de vergüenza que empezaba por querer apoderarse de ella. El, en cambió seguía con la vista perdida en un punto invisible de la repisa, tratando de encontrarle sentido a comportamiento de ella, tratando a la vez de ordenar sus propios pensamientos y especialmente sus propios sentimientos, nacidos de la rabia, la incredulidad y sobretodo algo que comprendía eran… Celos.
Giró el rostro hacia ella, sin querer seguir culpándola o criticándola, más bien concentrado en la frase que no pudo terminar porque no sabía realmente qué había querido decirle. Quería disculparse sobre todo por achacarle una pataleta de niñita mimada por algo tan sin valor como un escritorio…es que francamente no sabía a qué más culpar aparte de sí mismo por no ver el vacío al que estaba empujándola cada día y temía culparse, porque eso conllevaría a terminar pidiéndole que se retirara y siendo honesto consigo mismo no podía imaginarse su día sin ella, incluso cuando se obstinaba en contradecirlo o echar por tierra sus brillantes hipótesis.
Scully alzó la mirada y por un momento mantuvo la mirada de él, soportando esa expresión de culpa que bien podía sentir en su propio rostro.
-Realmente sé que no ha sido por un escritorio, Scully…-murmuró casi para sí mismo- pero me asusta descubrir o incluso intentar pensar en qué fue lo que te llevó a hacer…
-Ya lo dije, Mulder- le contestó ella serenamente- No sólo se trata de ti o cuánto crees que puedas influir en mi vida. Se trata de mi, de lo que quiero, de lo que soy…-por un momento titubeó pensando en qué decir, Mulder hasta pudo ver como su barbilla temblaba y sus ojos se llenaban de llanto reprimido-…de lo que quiero ser o hacer…Mulder, no es que lo necesite ni mucho menos pero a veces he llegado a olvidar que aparte de este trabajo también soy una mujer y que debiera tratar de conciliar eso con la vida que estoy llevando.
-Y …él te ofreció algo de eso que "quisieras hacer"-consultó fijando su mirada en las delicadas manos de la mujer, porque no quería ver lo que su expresión pudiera delatar.
-No.- contestó honestamente
-Entonces…?- se acomodó en el asiento y apoyó sus codos en el escritorio acortando la distancia entre ambos.
-Te lo he dicho, no me gusta que me analices de ese modo…es sólo que…- dio una larga mirada al techo para volver a verlo a los ojos-…fue amable, fue lindo, me hizo recordar que era una mujer después de todo.
-Y…?- hizo la pregunta como al azar, deteniéndose aún antes de formularla completamente bajando la vista…ni siquiera podía preguntar si había pasado a mayores. Era una falta de respeto, una intromisión y un impensable…
Scully negó con la cabeza sonriendo pobremente adivinando lo que había querido preguntar por el gesto obvio que había hecho. Qué podría decirle? Que Ed Jerse la había seducido pero que no pudo ir más lejos porque sentía tontamente que lo estaba traicionando a él? Que sentía que su vida se había detenido como mujer en orden de que Fox Mulder diera un paso hacia ella o ella terminara admitiéndose a sí misma que era más que camaradería lo que la mantenía unida a ese maniático insufrible? Ninguna de las dos posibilidades era remotamente probable, pero por otro lado estaban las últimas palabras de Leonard Betts haciendo eco en su cabeza, como una manera de recordarle que la vida era corta, que ella era un ser humano ordinario que en algún momento iba a morir sin realizarse realmente como persona y mejor dicho como mujer…que si seguía llevando esa vida jamás sabría lo que es tener un hogar verdadero y una familia propia. Cosas que no había considerado realmente importantes o necesarias en su vida como hasta hacía poco.- El seguía sin mirarla, había comenzado a juguetear con un lápiz como si aquello fuese lo más importante en el momento
-Mulder…
-Scully?
- Mulder, mírame!- pidió ella al ver que no le había prestado atención suficiente. Mulder alzó la vista y su expresión era la de un niño al que se le ha quitado su juguete favorito, cosa que la descolocó por un instante ya que no supo cómo interpretarlo. Pero hizo lo de siempre, ignoró cualquier gesto
-Disculpa…dime- contestó como siempre, tratando de marginarse de la situación, de evitar ir más allá de lo que estaba estrictamente permitido
-Mulder. Hay algo que no te he contado
-Ah, si?- consultó volviendo a acomodarse en su asiento para mirarla creyendo que terminaría de sincerarse acerca de lo ocurrido con el desquiciado de Jerse
- Se trata de Leonard Betts…El me atacó…- confesó haciendo una pausa como tomando valor para hablar, cosa que lo puso en extremo ansioso ya que comprendió que la conversación habia dado un giro inesperado.- Leonard Betts me dijo que yo tenía algo que él necesitaba…
Mulder quiso hablar pero no pudo, palideció al sentir como si le hubiesen dado un puñetazo en el estómago, sintió que su cuerpo se desparramaba sobre la silla y no supo que decir.
Ella se levantó de su asiento, extendiendo su mano para apretar una de las manos de Mulder que le pareció en extremo fría.
-Te veo mañana…-le dijo alejándose para salir de la oficina.
Mulder fue incapaz de hablar, fue incapaz de alzar la vista, fue incapaz de mirarla alejarse, de pronto el terror le había paralizado.
Se inclinó sobre el escritorio ocultando el rostro entre sus manos…
Esta vez el silencio y la soledad le ofrecieron todo menos el refugio que siempre le habían brindado.
.FIN
