Notas Principales: Estoy sumamente obsesionada con el AkaKuro! :'D

Esta ves les traigo un Two-shot inspirado en una imagen que vi.

Es mi primera vez escribiendo lemon, creo que me quedo algo soso ;_;

Necesito conseguirme un beta XD

Se aceptan sugerencias(?) XDD

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~Parte 1~

Soy todavía el idiota que te ama.

Que cómo lo conocí…

Bueno, asistimos a la misma Universidad, él estudiaba Fotografía mientras yo estudiaba Pintura.

Recuerdo que me sorprendí por esos hermosos ojos azules, jamás había visto unos ojos tan bonitos.

"Ya tienes una nueva víctima, verdad Aka-chin, vaya a ti ningún tío bueno se te escapa"

Quizá solo era atracción momentánea, pero… aquel rostro pálido poseía unos ojos que no podía leer.

Qué ojos tan enigmáticos se atrevían a desafiar al gran Akashi Seijuuro, ¿era amor? Sí, se sentía como eso.

"Kuroko Tetsuya, estoy interesado en ti, acepta salir conmigo"

"Jamás saldría con alguien tan desagradable como usted, Akashi-sama"

El primer rechazo que recibí, normalmente cualquier persona viva rogaría para que yo le dirigiera la palabra.

Tetsuya era diferente, él me hacía pasar del cielo al infierno en unos instantes, y yo lo adoraba.

Según Midorima, Tetsuya es el único ser viviente en la Tierra capaz de dominarme y mantenerme atado a sus pies.

Y es cierto, las cosas más vergonzosas tuve que pasar para que al fin Tetsuya aceptase salir conmigo, incluso enfrentar a mi patético padre, el ser más despreciable y ansiado de poder que conozco.

Agradezco que esos ojos azules hayan llegado pronto a mi vida, si no… no quiero imaginarme que sería de mí.

"Tetsuya, me he humillado ante ti, te he mostrado facetas que ni yo mismo sabía que tenía. He estado persiguiéndote por todo un año y tú, tú no das señal alguna de que soy correspondido, y ya estoy harto. Tu saldrás conmigo, quieras o no"

Tenía mucha tensión sexual reprimida, y… bueno… me sobrepase con Tetsuya.

"Está bien Akashi-kun, acepto salir contigo"

Esas leves sonrisas que le ponen encanto a mi vida, hoy, después de cinco años aún sigo siendo el propietario, y ya es hora de dar el siguiente paso con Tetsuya.

—Sei-kun, deja de hacerme cosquillas en el pecho—.

Por un minuto olvide que el dueño de los ojos azules más bonitos de la vida estaba durmiendo desnudo a mi lado.

—Perdón por despertarte Tetsuya—. Le dije sin dejar de acariciar su pecho. —Es que tu cuerpo se siente tan familiar que a veces olvido que estas aquí—.

Kuroko frunció el ceño.

—No sé cómo tomar eso, si como un insulto o como un halago—.

—Todo lo que digo sobre ti Tetsuya son halagos, no importa la manera en que lo veas—.

Me sonrió.

—Siempre que dices cosas como esas, tienes sucios planes en la mente Sei-kun, eres muy extraño—.

Nos fundimos en un fogoso beso, mis manos comenzaron a acariciar su espalda. Cada vez que nos tocábamos era capaz de ver corrientes eléctricas saltar de mi pecho.

Sentí una mordida en mi labio inferior y un pellizco de pezones.

Timidez, ¿Qué era eso? Si Tetsuya y yo ya habíamos hecho de todo.

—Joder, Tetsuya cómo haces que me sienta tan atraído hacía ti, aún después de tanto—.

—Magia Sei-kun, magia—.

Su mirada libidinosa hizo mis mejillas enrojecerse y sentí sangre caliente recorrer mi miembro.

Y otro beso más candente se hizo presente, ¡Oh, Dios! Sentí sus caricias bajar por mi torso, no importaba cuantas veces habíamos hecho el amor, siempre era diferente. Mi vida desde que Tetsuya apareció, es diferente.

Mordí su cuello, él odiaba las marcas, no puede hacer nada en contra mío, yo soy su dueño absoluto.

Lo sentí estremecerse entre mis brazos. Una gota de saliva cayó a mi miembro ya despierto, miré abajo por pura lujuria y vi que Tetsuya se encontraba en las mismas condiciones que yo.

La visión era tan excitante que solo con mirar podía incluso correrme.

Delineé la curva de su cadera para después empezar a jugar con sus pálidos glúteos.

El primer gemido de la noche se hizo presente, el propietario era él por supuesto.

Desde hace algunos meses le propuse algo, quien soltara el primer gemido mientras lo hacíamos, tenía que complacer al otro en lo que quisiera, claro, en el ámbito sexual.

—Amor, has perdido—. Dije con un brillo de excitación en los ojos.

—Cállate—. Reprochó.

Su boca aprisionó a la mía despertando un sinfín de sensaciones en mi cuerpo.

—Deja de molestar y di lo que quieres—. Soltó Tetsuya después de romper el beso.

No le conteste y tome posesión de su hombría, sabía que le volvía loco cuando le hacía eso, y ese era mi mejor castigo contra él.

Sus manos apretaban la suave sabana, él odiaba admitir que yo le hacía sentir bien y trataba de cualquier manera de ocultarlo. Me fascina que sea así.

—Quiero escuchar tus gemidos Tetsuya—. Exigí mientras lamía la base de su hombría.

—No—.

Así siempre eran nuestras batallas en la cama, no era capaz de ganarme, nadie le ganaba a Akashi Seijuuro.

Mis manos traviesas empezaron a abrirse camino entre sus glúteos, quería jugar con su deseosa entrada.

—Estas dilatado, aunque un poco de lubricante no nos hará daño—.

Vacié un poco de lubricante sabor vainilla en mi miembro y en la entrada de Tetsuya, ese es su sabor favorito y yo quería complacerle en todo

Empecé a simular embestidas con mis dedos, vi su cara de súplica, yo quería oír lo que deseaba de su boca.

—Harás que te ruegue, ¿no es así? —. Dijo con la voz ahogada.

Arqueé una ceja.

—Eres genial, lo sabías Seijuuro—.

¡Oh, Dios! Él sabe cómo me pone que me llamé por mi nombre completo, mi discípulo ha aprendido muy bien a torturarme, ha aprendido bien de mí.

No pude esperar más y presioné despacio mi miembro adentro de él.

Una mueca de dolor se hizo presente en su pálido —ahora un poco rojo— rostro.

— ¿Estas bien? —. Pregunté.

Temía haberle hecho daño con mi brusquedad.

—Oh, sí. Más que bien a decir verdad—.

Sonreí y traté de introducirme un poco más dentro de él, la sensación es exquisita, no sé qué es lo que hace Tetsuya, siempre se siente como la primera vez.

Esta vez fue mi turno de gemir, mi cabeza estaba envuelta en un mar de emociones.

Levanté sus piernas a mis hombros y así comenzaron las embestidas. Al principio eran delicadas y tiernas, pero después se tornaron frenéticas, sin misericordia.

Él se aferró a la sabana aún más fuerte, de pronto soltó un gutural gemido. Qué había tocado, no lo sabía, solo quería que Tetsuya experimentara el mayor placer posible. Sentía más sangre llenar mi miembro, ya no aguantaría mucho. Agarré su miembro y comencé a acariciarle.

—Diablos Seijuuro—.

Aumente más mis embestidas, el simple sonido de las pieles chocar era orgásmico.

— ¡Ahh, Ahh! Tetsuya—.

Sus caderas comenzaron a levantarse cuando yo aún empujaba dentro de él, mi peliceleste estaba a punto de explotar.

—Tetsuya…—. Dije apenas pudiendo articular palabras.

—Sei-kun… Seijuuro córrete dentro, hazme tu lienzo—.

Sonreí, jamás creí escucharlo decir eso. Tetsuya es fantástico y lo amo, lo amo más que a cualquier cosa en el mundo—.

Lo sentí agitarse debajo de mí, retorciendo sus caderas mientras se le escapaba un dulce gemido. Sus fluidos cayeron en mi pecho y perdí el control. Lo embestí una vez más, arqueé la espalda y sentí mi orgasmo derramarse entre su cuerpo.

Me desplomé y caí a su pecho, él atrapó mis labios y así estuvimos hasta que nuestras respiraciones se regularon.

—Te amo Tetsuya—. Dije aún sin salir de él

—Y yo a ti Sei-kun—.

Cierro los ojos y sonrío dibujando un corazón con el semen que quedo esparcido.

— Con que mi lienzo, ¿eh? —.

—Idiota—.

Ambos reímos. Lo amo, lo amo como a un loco, con él me siento feliz, feliz y completo, siento que tengo el mundo a mis pies si él está a mi lado.

Eres todo para mi Kuroko Tetsuya.

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La mañana siguiente fui a ver a Midorima, hace tiempo le hice un encargo y espero que ya lo tenga.

Dejé a Tetsuya durmiendo, le preparé el desayuno y deposité un casto beso en la mata de cabello azul.

Hace un año nos mudamos a un pequeño departamento, nada ostentoso, algo sencillo para una pareja de jóvenes enamorados. Yo le sugerí que nos mudáramos a algo mejor, él es tan orgulloso e inmediatamente se negó.

No lo juzgo, en parte se debe al mal trato que le ha dado mi padre. Las veces que nos ha visto justos no se cansa de humillarlo, es un ser detestable.

—Hey Akashi, jamás te había visto tan temprano en las empresas de tu padre—.

Sonreí, la felicidad era algo imposible de ocultar.

—Ya lo sabes Midorima, hoy se abre la galería con mis pinturas y si no vengo a trabajar mi padre podría arruinarlo—.

Suspiré.

—Además, hoy es un día especial—. Lo miré fijamente. —Hiciste lo que te pedí—.

—Fue muy difícil hacerlo, pero sabes que jamás te fallaría Akashi—.

Midorima me entregó una pequeña caja de color negro. La abrí fugazmente para asegurarme que no mentía y lo vi.

—Perfecto, gracias Shintarou—.

—En verdad lo amas, no es así Akashi—. Preguntó mientras se acomodaba los lentes.

— ¿Soy así de transparente? —.

Movió la cabeza y sonrió.

—Jamás te vi así y me asusta. Te conozco desde que usamos pañales, siempre pensé que con el tiempo te volverías un hombre loco y sin sentimientos como tu padre—.

Fruncí el ceño.

—Pero cambiaste, cambiaste gracias a Kuroko y me alegra mucho que hayas decidido dar el siguiente paso con él—.

Un escalofrió recorrió mi espalda, por un momento olvide que hoy le pediría oficialmente a Tetsuya que se casase conmigo.

— ¿Crees que acepte? —. Pregunté con miedo.

—Lo hará, ambos se aman y se necesitan—.

—Gracias—.

La tarde pasó en un respiro, mi exposición comenzaría a las 7:30. La nombre como "Nuestras Sombras", Tetsuya dijo: 'Es un nombre ridículo, tu eres igual de ridículo, así que es perfecto emperador.' Me reí por sus palabras, él… él es mi vida.

La galería tiene un sinfín de pinturas inspiradas en aquellos ojos azules. Cada pintura va acompañada de una frase en el marco, el plan es que Tetsuya las lea de una en una y al final lo esperaré yo con el anillo que me dio Midorima, entonces le preguntaré aquello que atormenta mi corazón.

Suena romántico, ¿no? A veces me pregunto de donde saque la vena sensible, supongo que es de mi madre, hay días en que la extraño tanto, en estos momentos me encantaría oír alguno de sus consejos.

—Madre, deséame suerte con Tetsuya—. Solté al viento.

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Llegué puntual al sitio donde se llevaría a cabo mi exposición, como era de esperarse la inauguración fue un éxito.

Algo me faltaba, Tetsuya por alguna razón no había llegado y mi corazón comenzaba a agitarse.

Entonces… le vi llegar con el cabello algo revuelto y las mejillas rojas, usaba unos jeans oscuros y una camisa a botones.

—Pensé que no llegarías—.

Me sonrió y noté que tenía los ojos sumamente rojos.

Lo tomé de las mejillas y le pregunté:

— ¿Te pasa algo? —.

Él negó con la cabeza y me volvió a sonreír.

—Muy bien, entonces empecemos con el recorrido—.

Sujeté su mano y juntos fuimos a recorrer la galería justo como estaba planeado.

~' En realidad, después de nuestro primer encuentro…

… decir que me gustabas no fue fácil para mi…'~

Así empezó el recorrido, con sus ojos azules llenando de brillo mis pinturas, las palabras se quedan cortas para describir el momento, para describir lo que en verdad siento.

~'Estoy enamorado… me enamoré.

Mientras este contigo… no sentiré miedo nunca más.

Y veo lo hermoso que es el mundo'~

— ¿Este soy yo? —. Preguntó. —Tus pinturas son fantásticas, no hay diferencia alguna entre ellas y mis fotografías, eres un genio—.

—Si eres tu Tetsuya, pero el Tetsuya de carne y hueso es mejor que una simple pintura—.

Quise besarlo.

Me rechazó.

Sentí un escozor en el pecho, seguramente lo hizo porque no le gusta darse mimos en público.

~'Pensé que no me iba a enamorar… pero estoy enamorado…

… Me has hecho el hombre más feliz del mundo…

… por favor tienes que creerme…

…si te digo que conseguiré que nunca quieras dejarme'~

Eso decía el último letrero de mi pintura.

Lo llevé afuera para que cuando le pidiera matrimonio pudiera ver las estrellas reflejadas en sus ojos.

—Tal vez es repentino Tetsuya, quizá sea un estúpido y esto sea una locura, pero…—.

Me arrodillé frente a él y le mostré el anillo.

—Quiero que estés conmigo a cada paso que dé, quiero disfrutar de tu compañía por el resto de mis días. Eres tú lo único que necesito Tetsuya, ¿acepta casarte conmigo? —.

Pasaron algunos segundos y no recibí ninguna respuesta o reacción alguna.

— ¿Qué pasa? ¿Qué respondes? —. Pregunté confuso.

—Akashi-kun, levántate por favor—. Respondió fríamente.

¿Qué diablos pasaba, desde cuando Tetsuya me hablaba por mi apellido? ¿Esa barrera no estaba rota ya?

— ¿Te gusta el anillo que elegí? Midorima lo diseño especialmente para ti—.

— ¡Basta Akashi-sama! —. Gritó. —Detente ya, yo… yo he venido a terminar contigo—.

Qué fue lo que escuché, qué fue lo que Tetsuya dijo.

—Yo me fijé en ti, sabiendo que había distancia entre nosotros, pensé que con el tiempo disminuiría—. Una lágrima resbaló por su mejilla. —Pero… cada vez se hace más inmensa y yo lo no puedo soportar, creo que al final de todo confundí el amor con la atracción—.

— ¡¿Qué rayos dices?! Tu no me puedes hacer eso Tetsuya, yo te amo y tú eres mío—.

—Lo siento—. Dijo él sin mirarme a los ojos

Me estaba mintiendo, ¿Por qué me lastima de esa manera? Acaso no he sido demasiado bueno con él.

— ¿Qué pasó con todo lo que decías sentir por mí? Esos 'Te amo' siempre se sintieron tan reales, y las veces que hicimos el amor, tu no fingías, tu piel siempre reaccionó con la mía. ¿Por qué me dices eso? —. Reclamé ya con lágrimas en los ojos.

—Solo era sexo Akashi-sama, no puedo creer que no hayas sido capaz de distinguirlo—.

Sus acidas palabras corroyeron mi corazón.

Apreté fuertemente mis nudillos, lo único bueno de mi vida estaba siendo aniquilado en un instante.

No lo soporté y le solté una bofetada.

Yo le pegué a Tetsuya.

Una hebra fina de sangre bajó de su labio.

Era algo increíble de creer, yo, Akashi Seijuuro había lastimado a la persona que más amo en la vida, a Kuroko Tetsuya.

—Mientes Tetsuya, tu estas mintiendo—. Apreté fuertemente su brazo y lo atraje hacía mi pecho.

—Por favor, suéltame Akashi-sama—. Dijo.

Mi mirada se tornó vacía, mis pesadillas comenzaban a despertar.

—No me busques jamás, si en verdad me amas, no lo hagas por favor—.

Y se fue, dejando sin sentido los latidos de mi corazón, con un amor que anhela ser correspondido y con las lágrimas traicioneras escurriéndose bajo mis ojos.

Quien me liberaría ahora del infierno en el que vivo. Tetsuya era mi única luz, mi razón de vida, ¿ahora que me quedaba?

¿Por qué fingiste amarme Tetsuya, si todo era una mentira?


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Notas finales: Por las pairings y el resumen ya se imaginaran que es lo que pasa en el último capítulo '3

Amé escribir a este Akashi —lo amo con locura(?)—

Espero actualizar la siguiente semana, lamento que sea tan corto..

¡Besos y nos leemos luego!

Disculpen por el feo lemon, apenas estoy aprendiendo(?) XD