Inuyasha es de Rumiko Takahashi

Aclaración:

- Los textos que se ven diferentes son: descripciones de algún escenario o frases dichas en el anime/manga


La mujer que más amaste en esta vida está muerta, deseas morir para estar junto a ella ¿No es así?

Fue lo que dijo aquel Youkai llamado Kao, él podía ver el sufrimiento de sus víctimas a través de las enredaderas. Él pudo ver los de Inuyasha y… los míos.

Sé que fue egoísta, que debería, más que nunca estar a su lado y apoyarlo, pero no podía permanecer allí. Necesitaba irme.

-Lo siento, Inuyasha.- pronuncié, haciendo que todo el grupo se detuviera.- ¿Podría volver a casa?- Miroku, Sango y Shippo me dirigieron miradas de sorpresa e Inuyasha que estaba a unos pasos más delante de mí, al girarse para verme, pude ver su expresión, que mostraba angustia. Todos nos dimos cuenta de ello, por un momento me arrepentí de lo que dije.

Miroku intentaba convencerme de que me quedara.

-No es momento de marcharse, Kagome. Hay que derrotarlo cuanto antes.

-Tiene razón Miroku, ¿tus obligaciones no pueden esperar?- preguntó Sango, si bien daban a entender que la razón estaba relacionada con Naraku, sabía de antemano que era para no dejar solo al Hanyou.

Pero antes de que puedan decir algo más. Fueron interrumpidos.

-Haz lo que quieras.- Fue lo que finalmente contestó mirando hacia adelante, retomando su caminar.

Y así es como ahora estoy en casa, recostada en mi cama. Me siento mal por mi decisión y las miradas de mis amigos que me habían dirigido me confirmaban una y otra vez que había sido lo peor que hubiera podido hacer. Pero no podía seguir a su lado luego de aquello. Y creo que lo sabía perfectamente.

Cuando me acerqué al pozo para saltar y estar nuevamente en mi época, me detuve. Tan solo me senté en él, con mis piernas colgando dentro.

Sé que es lo mejor para ambos, la muerte de Kikyou provocó grandes heridas en él.Y que yo sea el recuerdo viviente de ella, no debe ser muy bueno. Aunque me moleste, lo cierto es que cada vez que me ve debe recordar que ella ya no está aquí. Mi pecho comenzó a doler.

No quiero ser la causa de su sufrimiento. Por eso debo irme aunque sea unos días.

"Perdón, Inuyasha" pensé, mis ojos se llenaron de lágrimas. Soy realmente egoísta, pero no estarás solo, tendrás a nuestros amigos para hacerte compañía.

Y con ese pensamiento salté o de lo contrario, comenzaría a llorar.

Cuando llegué, recuerdo que me había costado mucho subir para salir del pozo, más de lo normal. Y pasé de mi familia, ellos me saludaban con sorpresa y alegría, y simplemente los ignoré.

Han pasado dos días y todavía no me he disculpado. Pero creo que no me guarden rencor, mamá se dirige a mí de la misma forma de siempre, Souta sigue igual de molesto y el abuelo contando las mismas historias que siempre olvido. Me alegra que no se hayan enojado conmigo. Más no debo olvidar de hacerlo antes de irme.

Miré el techo de mi cuarto y suspiré. ¿Qué fue lo que me hizo querer volver?

¿Fueron las palabras que se dirigieron hacia él? ¿O fueran las mías?

La mujer que más amaste en esta vida está muerta.

Sinceramente, ya sospechaba eso. Cuando tenía que elegir siempre era ella, sin importarle la situación. La defendía aunque lo que hiciera perjudicara al grupo o a él mismo. Lo único que hizo fue confirmarlo.

Hay un lazo muy fuerte que los une.

En cambio, el nuestro es muy frágil.

Hace ya algún tiempo, cuando finalmente volví luego de que me quitara los fragmentos para que no pudiera viajar a través del tiempo y conocimos a Naraku. Me dijo:

Quiero que estés a mi lado, Kagome.

Pero luego de eso, nunca hubo algún tipo de acercamiento, aunque mis amigas pensaran que era mi novio. En eso tengo algo de culpa al no arreglarlo, pero era más fácil de entender que la situación actual. Y como a Inuyasha no le molestaba…

Pensando en ello, nuestra relación es un tanto difícil de aclarar. Había dicho delante de Kikyou que no había dejado de pensar ni un momento en ella. Cuando le preguntaba si aún la amaba, él solo desviaba el tema. Pero también me celaba mucho cuando Kouga se acercaba a mí.

¿Eres difícil de entender, no?

Sonreí.

Luego llegó el momento en donde por fin aclaró sus sentimientos. No tuve el valor de quedarme y escucharlo. Si bien nunca me lo dijo, lo sentía desde el fondo de mí ser que sus palabras eran exactamente:

Voy a irme con Kikyou.

La odié mucho por esto. Porque ella seguía en su corazón… Y a mí por tener esa clase de pensamientos.

Pero gracias a eso pude por fin entender mis sentimientos, los de él… y los de ella.

Ambas queremos estar a tu lado, Inuyasha.

Luego de resolverlo, fue muy evidente para todos su preferencia por Kikyou… más que antes. E incluso cuando todos creíamos que había muerto a manos de Naraku, al escuchar rumores fue tras ella. Y todo volvió a como era antes cuando se confirmó que estaba viva.

Toda esta situación me hacía enojar mucho, pero lo entendía, aunque doliera, era esto lo que había elegido. Aunque a veces mi mal humor significara algunos "Siéntate". Pero no quedaba otra. ¡O no tenía tacto o quería hablar cuando estaba en mi límite! ¡Es un idiota!

Giré mi cuerpo hacia la derecha, mirando al escritorio.

Inuyasha… ¿Qué estarás haciendo? ¿Estarás insultándome del otro lado?

La muerte de Kikyou nos afectó a todos, a ti incluso más. Y eso me hirió.

Aún recuerdo la visión que tuve por ese Youkai.

Intentaba desesperadamente que volvieras a mi lado, no iba a dejar que murieras para estar con ella, tenías que seguir con vida.

Pero ninguna de mis flechas lograba romper la barrera y mis gritos llamándote parecían no alcanzarte. Así que en un momento de desesperación tomé el objeto que me dio Miroku y lo enrosqué en la flecha. Al disparar la barrera comenzó a desaparecer y pude sentirlas subiendo poco a poco por mis piernas.

-Inuyasha… ven rápido.

Mis ojos estuvieron cerrados por un momento, cuando los abrí los encontré delante de mí, a tan solo a unos pocos pasos de distancia… sonriendo, al lado de Kikyou que tenía la misma expresión. ¿Kikyou estaba viva?

Me levanté lo más rápido que pude y me dirigí hacia ustedes.

-¡Kikyou, estas viva!- exclamé.

-¡Todo es gracias a ti!- ella sonrió aún más.- Eres más fuerte de lo que esperaba. Gracias, Kagome.- de pronto bajó sus ojos.- Lamento meterme entre ustedes, prometo que de ahora en adelante no seré una molestia.

-Kikyou…- no sabía que contestar. Entonces todo fue una simple pesadilla. Yo la había podido salvar. Toda esta situación parecía tan irreal. Pude sentir una enorme felicidad en mi interior.

-¿La has escuchado, Kagome?- ahora fue el turno de Inuyasha.- Finalmente podemos estar tranquilos. Lamento todo el sufrimiento que pasaste, te amo.

…Te amo. Mi rostro se ensombreció.

Ahí fue donde comprendí, todo esto es obra de ese maldito de Kao.

¡Yo… te odio, Kao!

Y con toda mi ira, intenté librarme de su hechizo. ¡No lo iba a dejar escapar! Cuando recuperé la consciencia me encontré en los brazos del Hanyou y escuché la voz del Youkai.

-"… la causa de su sufrimiento es…"- "¡Voy a acabar contigo Kao!" pensé y el nombrado lo supo. Me liberé de sus brazos y tomé mi arco con firmeza.

-Ya sabes lo que pienso ¿No es así?- Y decididamente comencé a disparar las flechas.

Siento como mis ojos se humedecen cada vez más, así que llevo mis manos a mi rostro, tratando de detener las lágrimas que salían.

¿Tan mala persona era? ¿Cómo podía pensar en algo así cuando Inuyasha y todos lamentaban su muerte?

Kikyou estaba muerta por causa suya, Inuyasha fue atrapado por esa trampa porque no fue lo suficientemente fuerte.

Él no es feliz porque ella no está aquí.

Comencé a ahogar sollozos. No quería preocupar a nadie.

Perdónenme.


¡Mi primer fanfic de Inuyasha! ¡Estoy tan feliz! ¡Siempre quise escribir sobre este anime/manga!

¡Gracias por haber leído! ¡Espero que les haya gustado!

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