Disclaimer: Fire Emblem Fates y todos sus personajes pertenecen a Nintendo e Intelligent System.
Advertencia: Mal intendo de humor con una idea nacida del ocio, incluye algunos headcanon mios que quisas no sean aprovados por todos y obviamente, incluí algunas de mis parejas favoritas, lamento a quienes no les agraden estos supports.
.: Reglas para la sobrevivencia por Orochi :.
Una de las ventajas de ser un príncipe, es recibir preparación para los problemas que se encontraría en el futuro y poder elegir siempre la mejor solución para el bien del reino. Aunque los mayores problemas sin duda serían dados a Ryoma, él tenía que aprender a resolverlos de todas formas, ya que estaba dispuesto a ayudar a su hermano en todo lo que pudiera.
El punto malo, no solo fue que la guerra interrumpiera sus lecciones y vida cotidiana, sino que también le privo de una parte importante de su aprendizaje: ¿Qué hacer cuando los problemas no son políticos y son más personales?
Por más educación que tuviera, nadie le había enseñado a resolver su problema actual, nada lo había preparado para el cambio inesperado que su vida había tomado, y lo peor del asunto, es que gracias a la guerra, ahora ni siquiera podía acudir con sus padres para que lo guiaran por el camino correcto… Y el simple recuerdo de ello sin duda lo deprimía, era mejor no pensar mucho en eso y enfocarse en como sobrellevar su situación actual, por lo que la falta de sus padres, lo llevaba a solicitar ayuda a la única persona a quien podía seguir viendo como más cercano a una madre.
Orochi siempre había servido a la familia real desde que él podía recordar e incluso desde antes de eso. Según en palabras de Orochi, ella había estado allí el día en que él nació y al menos él siempre le ha recordado como alguien que se encontraba a su lado comportándose como una segunda madre… O más bien tercera, ya que Mikoto había ocupado el lugar de segunda madre sin duda alguna.
No podía negarse a sí mismo que le tenía cierto aprecio a Orochi y aunque no se lo decía con palabras, una que otra acción de su parte lo demostraba, ella sin duda lo entendía y se lo echaba en cara de la manera más vergonzosa que se le ocurriera, pero ya estaba acostumbrado a eso, y sin embargo, esa actitud de ella era el motivo que le creaba la duda sobre si era buena idea consultar su ayuda para la situación por la que pasaba.
En otras circunstancias, estaría muriéndose de vergüenza por explicarle la situación, pero al menos se había ahorrado ya esa fase… No, espera ¡No lo había hecho! Orochi había sido la primera en enterarse de lo que ocurría y se estuvo riendo por varias horas sobre el asunto, y no solo ella se había reído, Ryoma lo había hecho un poco también, incluso Sakura no pudo contenerse, pero como siempre, Orochi, acompañada de Leo, fueron quienes más se divirtieron con el asunto el día anterior.
Si, el día anterior había comenzado normal… Bueno, normal en lo que vivían últimamente durante la guerra: Un enfrentamiento matutino en contra de un montón de Faceless salidos de la nada. Los dichosos monstruos aparecieron por montones delante de ellos mientras se dirigían a su próximo destino, obligando a todos a olvidar el sueño y tomar las armas.
No era una pelea difícil, pero los monstruos eran demasiados y su pequeño ejército cada vez se volvía más pequeño, y no era por tener bajas, ya que todos se cuidaban muy bien entre ellos; la disminución del equipo era más bien a causa del inesperado milagro de la vida que había llegado a algunas de las recién formadas familias del pequeño ejército; dicho en otras palabras: algunos de sus compañeros y compañeras de guerra, tenían que estar fuera de la batalla para prepararse para la llegada de los futuros miembros de su familia.
Debido a ello y al haber menos unidades haciendo frente a un gran número de monstruos, no era raro que ligeras heridas se volvieran imposibles de evitar entre la confusión de cuerpos de ambos bandos, por lo que no podía perder la concentración o podría resultar herido… O peor aún, herir a alguno de sus compañeros por accidente si estos se atravesaban en su camino repentinamente; y gracias a todo eso, fue incapaz de notar que la persona a su lado, no parecía estar en perfecto estado durante la pelea.
Mientras intentaba apuntar con sus flechas de viento a uno de los monstruos, su concentración se vio interrumpida por una voz detrás de él.
- ¡Takumi-sama! - Al distinguir la voz de Orochi, bajo su arco y se dirigió hacia donde le llamaban.
- ¿Estas herida? – Le pregunto al verla sentada en el suelo en medio de la pelea.
- No mi lord, yo no, pero… - Al llegar a ella, pudo observar que la mujer mantenía a alguien inconsciente en brazos y al reaccionar sobre quién era, no pudo evitar el casi aventársele a Orochi para intentar ayudar.
- ¿QUÉ PASO? ¿ESTA HERIDA? ¿Y PORQUE SIGUES AQUÍ? ¡VE A BUSCAR A SAKURA O A ELISE O A QUIEN RAYOS SEA CAPAZ DE USAR UN MALDITO STAFF! ¿OBOASFMDS? - Sus gritos, que iban en aumento con cada palabra que decía, se vieron interrumpidos por una de las manos de Orochi.
- ¡Por los dioses Little Prince! Con ese tono de voz vas a atraer la atención de alguno de los monstruos. – Tras ver que recapacitaba en lo que podía causar si seguía gritando, lo dejo volver a hablar.
- ¿Oboro está bien?
- Eso parece, no veo alguna herida a simple vista, probablemente el problema sea otra cosa.
- ¡Ve a buscar a Sakura o a Elise o a quien sea que pueda ayudar! Alguien que pueda curar debería estar en el campamento.
- ¡Entendido!
Una vez que ayudara a Orochi a levantarse y a escapar de la batalla con Oboro, Takumi regreso su atención a la pelea. Lamentablemente su concentración ya no era la misma del inicio y se vio forzado a tener que aceptar la ayuda de quien estuviera cerca por el resto de la batalla.
- ¿Se puede saber qué rayos te pasó? – Le pregunto Ryoma una vez que hubieran eliminado a los Faceless restantes. – No es común en ti estar distraído durante una pelea.
- ¡Lo siento! ¡Pero tengo prisa! – Intento dirigirse al área médica del campamento, pero Ryoma lo detuvo al instante.
- ¡Espera! ¿Qué ocurrió?
- ¡Eso es lo que quiero saber! – Contesto mientras intentaba soltarse de su hermano.
- ¿Adónde quiere ir tan rápido? – Ambos príncipes dejaron de forcejear al ver que habían atraído la atención de algunas gentes.
- ¡Hey Corrin! ¿Todo bien en la pelea? ¿No te lastimaron? – Saludo Ryoma al instante al ver que su hermana había llegado acompañada de los 2 príncipes de Nohr.
- ¡Sin problemas! Ya extrañaba estar en la acción. – Hizo un ligero estiramiento para remarcar sus palabras. – Aunque al parecer a alguien no le fue muy bien. – Agrego mientras señalaba a Takumi que seguía forcejeando inútilmente con su hermano mayor.
- ¡Seguro Hinoka dirá lo mismo cuando pueda volver al combate! – Ryoma comenzó a reír, olvidando por completo que su hermano menor intentaba huir de la repentina reunión familiar.
- Pero aún falta algo de tiempo para ello. – Comento Xander uniéndose a la conversación. A esas alturas el único que parecía recordar los intentos de Takumi por escapar, era Leo, que se mantenía observándolo por diversión. – Aunque alguien aquí ya parece desesperado con la larga espera. – Termino diciendo mientras ponía su mano en el hombro de su hermano menor.
- ¿Eh? – Leo volteo a ver su hermano desconcertado, hasta que reacciono sobre que estaban hablando. - ¡Ah! Pero no soy solo yo, ella también ya quier-
- ¡LO QUE SEA! ¿PUEDO IRME YA?
- Rayos Takumi, no me grites tan de cerca. – Corrin se había tapado los oídos tras el grito del menor, para ella sería mejor si su hermano recordara que los semi dragones son más sensibles al ruido.
- Bueno ¿Por qué tanta prisa? – Volvió a preguntar Ryoma sin soltarlo.
- ¡QUIERO SABER SI OBORO ESTA BIEN!
Y tras un último forcejeo por fin logro librarse y salir a toda prisa hacía la tienda médica. Ryoma y los demás se quedaron viéndolo esquivar a los demás miembros del ejército, hasta que reaccionaron en sus palabras y comenzaron a seguirlo.
Una vez frente a su destino, Takumi abrió la puerta de la tienda medica de un golpe y entro sin siquiera fijarse si tenía alguien por enfrente.
- ¡OROCH-! – Una vez más había sido callado por una mano frente a él.
- En serio Little Prince ¿No puedes mantener un tono de voz normal ni siquiera en un lugar donde puede haber gente herida? - Le pregunto Orochi con una sonrisa mientras retiraba su mano.
- ¡Hermano, así no es como debes entrar a un lugar de descanso! – Exclamo Sakura que se encontraba del lado derecho de la tienda, aplicando un vendaje a Hana que veía la escena desconcertada. A su lado izquierdo Elise, Camilla y Hinoka habían detenido su conversación tras su llegada.
- ¡LO SIENTO! Ups… - Respiro profundo tras notar que había vuelto a levantar la voz. - ¿Dónde está Oboro? – Pregunto intentando mantener la calma.
- Tal vez si no hubieras corrido como loco por todo el campamento, hubieras encontrado la respuesta a esa pregunta tú solo. – Takumi observo entrar a su hermano acompañado de Corrin, Xander, Leo y en efecto, la persona a quien buscaba.
- ¡Oboro! ¿Cómo estás? ¿Estás herida? – Comenzó a preguntar rápidamente mientras empujaba a Leo de enfrente y se acercaba a la joven. - ¿Qué ocurrió? ¿Qué hacías afuera? ¿Por qué no estás descansando? ¿Por qué no me avisaste que no estabas bien? ¿Fue culpa de esos monstruos?¿Qu-
- Mi lord… Er… ¿Cuál fue la primera pregunta? – Ambos se quedaron viendo confundidos.
- Ah… ¿Estás bien? – Volvió a preguntar desconcertado, Oboro no parecía tener herida alguna pero sin duda había quedado fuera de combate momentos antes.
- Sí, pero…
- ¿Qué ocurrió?
- Eh… Bueno… Yo…
Oboro desvió su mirada hacia el suelo como si este fuera más interesante que cualquier otra cosa a su alrededor, mientras murmuraba palabras que nadie escuchaba y desconcertando a quienes la rodeaban, una acción que podría haber seguido por horas, si no fuera porque Orochi comenzó a reírse tan fuerte que llamo la atención de todos los presentes.
- ¿QUÉ? – Le pregunto Takumi irritado por no obtener respuesta a su larga lista de preguntas.
- Oh mi lord, es que hahahaha... – La risa se volvió a apoderar de ella, causando que Takumi le lanzara una mirada entre irritado y enojado, con lo cual logro hacer que la invocadora se intentara controlar. – Aaah, ella está bien.
- ¿Entonces que paso?
- Ella solo se mareo… Cosas de la vida mi lord – Le contesto con un tono que indicaba que se estaba conteniendo de comenzar a reírse nuevamente.
- ¿Y qué significa eso?
- ¿No lo comprendes?
- ¡NO!
- Bueno, en vista de que cierta persona. – Dijo señalando a Oboro. – Parece incapaz de explicarlo… - Puso su mano en el hombro del joven príncipe. – Vas a ser padre.
- Ah claro, si con ese tono ya pensaba que Ryoma iba a mandar poner un estanque de langostas en los jardines del cast… ¿QUÉ YO, QUÉ?
El lugar se quedó en total silencio, gracias a que todos se quedaron observándolo, posiblemente esperando alguna reacción de su parte, pero en ese momento parecía que su capacidad del habla se había perdido por algún lado de su cerebro, el cual estaba más ocupado en dejarlo allí en medio de todos con una discusión interna de que hacer, decir o razonar.
Su expresión posiblemente debía ser graciosa, ya que el silencio se vió roto gracias al nuevo ataque de risa que se había apoderado de Orochi, quien no tardó en ser acompañada por Leo. Sin duda era algo digno de ver, ya que Sakura, Elise e incluso hasta Xander parecían estar divertidos con su expresión. Oboro lo observaba fijamente, quizás intentando descifrar si su expresión era una reacción buena o mala, pero parecía incapaz de preguntárselo directamente, ya fuera por temor a la respuesta o por pena.
Su cerebro volvió a la normalidad al sentir una fuerte palmada en la espalda, proveniente de Ryoma que se había acercado a su lado sin notarlo; o su hermano estaba aprendiendo a volverse ninja con la ayuda de Kagero y Saizo, o su cerebro de plano había dejado de funcionar momentáneamente al grado de no notar lo que hacían las personas a su lado.
- ¡Pues ya era hora hermanito! – Exclamo Ryoma sonriendo sin dejar de detener las fuertes palmadas en su espalda.
- Q… Pe… ¡¿PERO COMO PASO?! – Fue lo único que logro decir tras ser sacado de su trance tan bruscamente, y al instante reacciono que esa había sido la pregunta más estúpida que podía haber hecho, ya que solo causo que Orochi y Leo comenzaran a reírse aún más fuerte (incluso podía asegurar que Leo sería capaz de tirarse al piso y revolcarse de la risa si no fuera porque debía mantener su dignidad), Corrin y Hana también habían empezado a reírse de la situación, Xander tenía una expresión curiosa seguramente por estar intentando no reír, Hinoka de igual forma le veía curioso, mientras que Camilla, Sakura y Elise reían de forma más discreta.
- ¡Rayos Takumi no me preguntes eso! ¡Contéstalo tú mismo! No espera… ¡No queremos los detalles por favor! – Termino diciendo Ryoma sonriendo, causando que tanto Takumi como Oboro se sintieran más apenados que nunca.
- ¡Si quieres le pido a Niles que te dé una explicación de cómo pudo haber pasado! – Comento Leo al instante, pero en su intento de ir a buscar al mencionado, fue detenido por Hinoka.
- ¡Leo, no! – Hinoka lo había tomado por el brazo, obligandolo a regresar a su lado.
- ¡Solo lo decía en broma! – Le respondió sonriendo tras ver que ella parecía intentar contener la risa.
El resto del día había sido escuchar más risas por parte de algunos de sus compañeros de guerra y felicitaciones por parte de otros. Hinata y Corrin no tardaron en transformar la noche en una mini celebración por la noticia, pese a que lo único que él quería era encerrarse en su cuarto a digerir su nueva situación junto con Oboro, que parecía no haberse sentido tan mareada en toda su no larga vida. Mareada no en el sentido de sentirse mal a causa de su estado, sino por la cantidad de comentarios e información que las demás chicas le comenzaron a lanzar tan solo se enteraron de la noticia. Al final del día y después de escuchar felicitaciones, comentarios indecentes de Niles y un par de burlas principalmente por parte de Leo, los nuevos futuros padres se sentían más cansados que nunca, decidiendo dejar las conversaciones importantes para la mañana siguiente.
Y allí es donde se encontraba ahora. Había despertado temprano a causa del estrés, pero se había sentido incapaz de despertar a Oboro para intentar platicar con ella, por lo que lo único que se le había ocurrido hacer, era solicitar el consejo de alguien que pudiera guiarlo como hubieran hecho sus padres, motivo por el cual ahora se encontraba afuera de la habitación de Orochi.
Ya llevaba varios minutos allí sin decidirse a tocar la puerta o dar la media vuelta. De entre su ropa saco un objeto redondo atado a una cadena, un regalo de parte de sus compañeros reales de Nohr por motivos de su matrimonio: un reloj de bolsillo, fue como le llamaron. Una creación de algunos artesanos de Nohr, sin duda más práctico que el reloj de sol que era más común en Hoshido y no podía negar que el objeto era bonito. Abrió el reloj y observo sus pequeñas manecillas girar, en efecto ya llevaba un buen rato frente a la puerta. Suspiro profundamente y se dispuso a llamar…
- ¿Qué haces despierto tan temprano Little Prince? – Sobresaltado, se giró solo para ver a Orochi detrás de él con una libreta en sus manos.
- Eh… Ah… ¡Nada!
- Fufufu, creo que te conozco demasiado como para creerme eso. – Comento con lo que él podría llamar: una sonrisa sin buenas intenciones, sin embargo, ella solo se limitó a pasar su brazo por sus hombros en una especie de abrazo. – De igual forma ya sé porque estás aquí.
- ¿Así?
- Y aquí tengo justamente la solución a tus problemas. – Dijo mientras le entregaba la libreta que llevaba.
- Y esto es para…
- Después de ver lo perdido que estabas ayer, – El puro recuerdo del día anterior le había hecho sonreír más abiertamente. – pensé que lo mejor sería escribirte algunos consejos útiles.
- ¿Algunos? – Observo la libreta en sus manos y la hojeo un poco, en la portada se podía leer "Reglas para la sobrevivencia de la paternidad por Orochi", escrito con alguna especie de tinta brillante.- ¡Pero si esto está lleno!
- Y fue una cansada noche de inspiración, así que más vale que lo aprecies.
Un rato después, Takumi se encontraba en la pequeña sala del castillo que usaban como cuartel, dándole una revisada rápida a lo que Orochi había escrito. Cada página de la libreta comenzaba con una regla, posiblemente inventada por ella, y continuaba con pequeños consejos sobre cómo aplicarla. Seria justamente lo que necesitaba… Si no fuera porque la mayoría de las reglas y comentarios de la invocadora, parecían demasiado fuera de lugar e incluso algunos…
- ¿QUÉ HAGA QUÉ? – Termino gritando al encontrar una regla que le parecía no muy decente a su parecer. Ahora se preguntaba si tenía la edad adecuada para estar leyendo ese tipo de sugerencias que no hacían más que avergonzarlo en vez de ayudarlo.
- ¿Se encuentra bien Takumi-sama? – Pregunto una voz detrás de él, el joven príncipe se giró para ver quien había llegado. – Se ve algo rojo ¿Se siente mal o algo?
- ¡Ah no, no, no… Estoy bien! – Le respondió intentando fingir calma. – Subaki…
- ¿Mi lord? – El joven le veía confundido.
- Hazme el favor de preguntarle a Orochi ¿QUÉ RAYOS ESTABA PENSANDO?
- Eh… ¿Ok? – Subaki se alejó lentamente sin dejar de mirar raro a Takumi, hasta desaparecer por completo... ¡Genial! Ahora el domador de pegasos seguro le creía loco.
- Vaya, has estado gritando mucho últimamente ¿Acaso el bebé te está alterando el humor? – Takumi volvió a girar rápidamente tras escuchar la nueva voz a su lado, preguntándose mentalmente en qué momento Leo había llegado y por qué recientemente todo mundo le hablaba por la espalda.– Debes relajarte o será malo para el bebé.
- ¡Oboro es quien tendrá al bebé!
- Pues con tu humor parece la contrario. – Comento sonriendo, segundos después se vio obligado a esquivar un golpe por parte de Takumi. – Ya en serio ¿Ahora porque estas gritando?
- ¡Orochi me dio esto! – Le dijo mientras le pasaba la libreta.
- Reglas para la sobrevivencia de la paternidad por Orochi… ¿Eh?
- No preguntes… Comienzo a pensar que seguro se tomó algo mientras lo escribía.
- Ah, pero si suena muy útil...
- Eso es porque no lo has leído. – Tomando la libreta momentáneamente, la abrió en una página al azar y se la regreso a Leo.
- Oh… - Fue lo único que dijo mientras repasaba rápidamente el contenido - Bueno… No vas a negar que te sera útil si un día se aburren cuando… Err… ¿Tomen un baño?
- Sí tanto lo encuentras de informativo ¿Por qué no te lo quedas tú? – Le contesto antes de que Leo se le ocurriera algún comentario que lo hiciera sentirse apenado nuevamente.
- No gracias, creo que ya eh tenido suficiente con los consejos de Niles… Que te aseguro no tienen nada que envidiarle a esto…
- ¡AGH! ¡Lo único que quiero es que alguien me diga que hacer! – Exclamo frustrado, ya comenzaba a sentir que si no recibía ayuda al instante, el mismo se arrojaría del siguiente puente que encontraran.
- No entiendo de que te quejas, a mí nadie me ha explicado nada… Bueno, sin contar a Niles obviamente… ¡Y tú al menos tienes una libreta! – Takumi le dirigió una mirada mortal digna de Oboro.- Ok, ve el lado bueno, puedes tomar las reglas que si te sirvan e ignorar todo lo demás. – Termino diciendo mientras le regresaba la libreta.
- Creo que puedo hacer eso…
- Pues sí, entonces, veamos cual es la primera.
Takumi abrió la libreta por el principio, algo que no había hecho realmente. Los dos jóvenes observaron la primera página, leyendo cuidadosamente lo que decía. Al terminar, ambos se quedaron viendo el uno al otro, Leo casi sin poder contener un nuevo ataque de risa, mientras que Takumi tenía una expresión curiosa entre resignación y temor.
- ¡Te deseo buena suerte! – Dijo Leo mientras le daba una palmada en el hombro, sacando a Takumi de su pequeño estado de shock. – Ya quiero ver como harás eso.
- ¡Mejor te dejo eso a ti!
- ¡No, no, yo ya pase por ello!
- ¡Por lo tanto tienes más práctica!
- ¡Es tu chica, tú lo haces! – Comento mientras comenzaba a empujar a Takumi en dirección a donde posiblemente pudiera estar Oboro.
- ¡No sabes lo que me estas pidiendo!
- O claro que si ¿Acaso crees que fue fácil para mí, tomando en cuenta cómo es tu hermana?
- Pero Hinoka es Hinoka y Oboro es… ¡Pues Oboro! – Intento resistirse, pero Leo seguía empujándolo, casi cargándolo, para que siguiera avanzando. - ¡Ella no se lo tomara bien!
- ¿Qué tan malo puede ser? Solo tienes que pedirle que se mantenga fuera del campo de batalla, los entrenamientos y cualquier peligro, nada más.
Takumi volvió a observar a Leo con una mirada que claramente decía que no sería fácil, que Oboro no se lo tomaría bien, y que posiblemente no viviría para conocer a su futura descendencia; pero Leo prefería ignorar sus palabras y llevarlo a donde se encontraban los demás.
Para su mala suerte, Oboro si se encontraba a donde Leo lo había llevado, pero la escena que encontraron al llegar, no hiso más que darle la completa razón a Takumi en que probablemente no sobreviviría a la Regla No.1 .
- Como ya te lo había dicho… ¡Buena suerte!
.: Fin de Capítulo :.
¡Ah! Por fin logre terminar este inicio... Y es solo el inicio de algo que comenzo como una idea sin sentido y random en mis cortos periodos de ocio y mira... Ahora se volvio multi-chapter... Probablemente unos 4 capitulos es lo que tengo pensado...
En fin, es la primera vez intento escribir sobre personajes de Fire Emblem, y ya no digamos sobre personajes de un juego que ni eh jugado! Así que lamento cualquier error sobre ellos! Sin embargo quise aplicar algunos headcanons que me eh formado con toda la información que eh visto sobre ellos, uno de mis headcanons que veran mas aquí, es el de Leo mostrando un lado mas infantil al estar con Takumi, como el hecho de que intente hacerlo enojar cada que pueda solo por diversión... Pero bueno, espero no los haga sonar MUY diferentes a como son.
Tambien me gustaría encontrar ayuda para traducir esto al ingles, ya que de hecho decidi escribir a causa de una persona que no sabe español, y ya que ella fue el motivo de que escribiera esto, al menos me gustaria que pudiera leerlo, por lo que, si alguien es bueno en ingles, le agradeceria me diera una mano!
Y eso es todo, el siguiente cap sera ver, como les va con la Regla No.1
Adieu~
Nota1: No se como este realmente el asunto en el juego, pero me agrada pensar que en Fates, fue en Nohr donde comenzaran a salir los primeros relojes de bolsillo.
Nota2: Si, me agrada la idea de Orochi haciendo de madre adoptiva de Takumi, despues de todo, en sus supports ella da a entender que lo ah cuidado desde que nacio, por lo que uno de mis headcanon es que ella adoptara la costumbre de llamarle "Little prince" de cariño
