Entre estar tanto tiempo trepando paredes, edificios y techos en toda la cuidad. Como un buen vecino héroe amigable que es decidió ir a comprar un churro.
A la vuelta de la calle en donde estaba se fue a comprar en un pequeño puesto en donde vendían los churros normalmente y unos cubiertos de chocolate. Cosa que era nuevo para Peter.
¡En la vida había visto un churro cubierto de chocolate!
Así que por curiosidad se fue a comprar uno y otro normal. Por su propia cuenta agarró los dos churros con su telaraña y aventó el dinero a señor del puesto, cosa que no le impresionó al dueño debido a que sabía de qué se trataba de ese chico araña.
En fin, ya tenía sus benditos churros y estaba disfrutándolo en el techo justo al lado del puesto sin su máscara puesta, era una buena vista de la ciudad de Nueva York.
- ¡Pero que hijos de puta! - escuchó una voz conocida cerca, sabía de quién se trataba. Parecía que él antihéroe también le gustaba esos churros de ese puesto debido a que siempre se topaban en ese techo- ¡Al carajo voy a hacerlo como quede!
Mirando a Deadpool comiendo su churro notó que estaba con un cuaderno y un color rojo dibujando algo como era costumbre, algo que debía ser por qué siempre estaba dibujando algo de él mismo.
Por cierto, la manera en que ambos se conocieron fue algo extraña. Debido a que Deadpool solo porque el vendedor no le daba un churro lo estaba apuntado con un arma, cosa que no llegó a mayores debido a que el hombre araña llegó a salvar el día. Consiguió que el dueño le diera su churro al contario y salvo la vida del cuidadano.
Pero desde esa vez parecía que siempre que consiguió el churro el contrario investigo todo sobre su persona porque a la semana se lo encontró de camino llegando a la escuela. Cosa que le dio miedo de que todo el mundo supiera sobre su identidad y le especifico que no le dijera a nadie, solo Deadpool acepto si la próxima vez se encargaba de que el vendedor le diera más churros.
Al igual que una vez que de regreso de haber salvado el día (cuando solo se encargó de hacer pasar a una viejita del otro lado de la calle y bajar a un gato de un árbol), estaba en su habitación con su pijama de hello kitty. Cosa que fue causa de burla un tiempo y estaba pensando seriamente en tirarlos. A sus 17 años debía tomar decisiones tan difíciles como ellas, pero llego justo la persona correcta para detenerlo que cometer tal locura.
/Flash back*
-La suerte de Parker vuelve a atacar- en la escuela por alguna razón te enteraron de su pijama y todos estuvieron burlándose diciendo cosas como "realmente resalta tus ojos" "bonitos pantalones, perdedor", "me imagino que por tu abuela te los regalo". Risas y más risas durante todo ese día en todas las clases- tal vez debería de una vez tirarlos.
- ¡Hey! ¡Por aquí niño! - en su ventana había un Deadpool de cabeza asomándose. Bien, en primera no sabía cómo rayos supo su dirección y porque estaba espiándolo- ¡tus pantalones son cool!- y mostro su mochila que también es de hello kitty.
-Gracias…- soltó una pequeña risa al momento- bonita mochila.
-Lo sé.
/Fin flashback*
Aunque eran muy pocas veces que se llegaban a ver se sentía a gusto, aunque quisiera matar a todo mundo y tuviera que estar detrás de el para no tener que hacerlo.
Por curiosidad se acercó a ver que estaba dibujando…y se topó con un dibujo bastante peculiar.
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-Hola señor Stark- un mensaje de voz como era su costumbre desde que esa vez que peleo junto a él, aunque no le respondía sabía que los escuchaba- nuevamente hoy estuve ayudando por mi comunidad y…- recordó el dibujo de Deadpool que prácticamente era el mismo antihéroe, pero ahora estaba acompañado de el mismo héroe, el hombre araña... dándose un beso- me compre un churro de chocolate.
Fin