La chica misteriosa y un nuevo enemigo

Un demonio de cabellera plateada se encontraba reposando en un árbol, pensando en por que se sentía un aura maligna tan extraña en los alrededores últimamente mientras su sirviente y su protegida estaban busca de comida, ya que continuaban su viaje en busca del malvado Naraku.

Sesshomaru se encontraba muy concentrado en sus pensamientos cuando un fuerte sonido cerca de él lo desconcentro, decidió aproximarse al lugar del ruido y lo primero que llamo su atención fue el ejercito de monstruos que pertenecían claramente a Naraku acercarse a un cráter donde logro ver a lo que parecía un guerrero con ¿Alas negras? que con dificultad intentaba ponerse de pie ya que se veía completamente mal herida y agotada, pero luego de unos segundos intentado mantenerse callo inconsciente.

El ejercito de monstruos se lanzó al ataque contra él guerrero, por lo general el plateado lo habría dejado pasar pero salto a la batalla y en el aire desenvaino a bakusaiga que con una estocada mato a todos los demonios. Volvió a enfundar la espada y miro al inconsciente a su lado y logro notar que era una chica de pelo negro y largo, atado en una trenza casi completamente desecha por la batalla con una piel muy blanca llena de golpes y una armadura llena de sangre aunque claro costaba verla bien con las enormes alas negras de su espalda cubriéndola casi por completo.

La tarde paso y la chica fue despertando poco a poco, Sesshomaru pudo ver que sus ojos eran rojos aunque parecía adormecida aun, pero en cuanto pareció recobrar el sentido se puso alerta, se incorporó rápidamente mostrando sus alas y colmillos de forma amenazante causando que Jaken y Rin se alejaran asustados de ella. Le tomo unos segundo darse cuenta de que no parecía estar en total peligro como antes y comenzó a hablar.

-¿Dónde estoy y qué paso con los monstruos?- Hizo un gesto de dolor mientras volvía a sentarse necesitaba descansar luego de esa pelea, Rin se acercó hasta cierto límite que ella considero seguro mientras hablaba con una voz casi inaudible.

-No se preocupe mi nombre es Rin, él es el señor Jaken, AH-UN y él es el amo Sesshomaru, mi amo fue quien la salvo hace rato. -Dijo Rin tímidamente mientras señalaba a todos con su pequeño dedo índice.

-…Gracias por haberme ayudado.- Dijo mirando al pelo blanco pero él no respondió solo siguió mirando fijamente el horizonte, Jaken se acercó hasta Rin y sin mostrar ninguna inseguridad dijo.

-Pero no creas que mi amo bonito te salvo no más porque si ahora contesta ¿Quién eres y por qué peleabas tú sola contra el ejército de monstros de Naraku?- La chica miro al pequeño sapo seriamente hasta que este casi parecía empezar a mostrar inquietud.

-…Mi nombre es Saya y estaba peleando con esos monstruos para salvar mí vida estoy en busca de ese tal Naraku pero cuando encontré su rastro esos monstruos me tomaron por sorpresa es todo.-

-Amo bonito.- El pequeño sapo miro fijamente a su amo que se había dado vuelta para mirar a Saya de manera amenazante, había encontrado algo útil, pistas del cobarde.

- ¿Porque lo estás buscando?- Dijo el lord del oeste.

-Para encontrar a un hombre peligroso, mi verdadero objetivo pero por culpa de aquel ejército de basura perdí la pista de ese idiota.- Sesshomaru se acercó de manera amenazante necesitaba más información que eso, esa acción no pasó desapercibida por la chica y se intentó mantener de píe para mostrar un poco de intimidad. -¿Para qué quieres saberlo?- Jaken se puso frente a su amo y grito.

-Nos estas intentando decir ¿que Naraku tiene un nuevo aliado?- Saya miro al sapo de una forma un poco amenazante que causo que retrocediera un paso.

-Podría decirse que sí, necesito encontrar al aliado de ese sujeto y devolverlo a su prisión en lo más profundo del infierno.- dijo mientras bajaba un poco la cabeza, Sesshomaru lanzo una mirada aún más amenazante a su sirviente y este volvió casi corriendo al lado de Rin.

-¿Qué quieres decir con devolverlo al infierno?- Saya no dejo de mirar el suelo mientras apretaba sus puños y contesto.

-Ese sujeto ya estaba muerto y de una forma u otra yo volveré a matarlo para devolver su alma a su prisión- muchas preguntas quedaban sin estar claras pero estar de esa manera tomaría mucho tiempo que el poderoso demonio no iba a desperdiciar de esa manera. Desenfundo su espada y coloco la punta de la espada en el cuello de la chica.

-Explícame todo lo que sabes, de lo contrario te matare ahora mismo.- Saya miro a Sesshomaru con una expresión completamente sería soltó un suspiro cansado y comenzó su explicación.

-Entonces empezare de nuevo, mi nombre es Saya podría decirse que soy un demonio que habita en el infierno estoy aquí en busca de Naraku para encontrar a quien sospecho es su nuevo aliado y devolverlo al infierno ya que es mi misión y trabajo.- termino tranquilamente y alejo la punta de la espada de su cuello. –Si tú sabes algo de ese tal Naraku me gustaría que me lo dijeras ya que no dispongo de mucho tiempo.-

Sesshomaru volvió a guardar su espada –Conozco a ese idiota y cobarde pero esperes te diga donde esta porque no tengo idea.- se giró sobre sus talones, -¡Jaken! Prepara a AH-UN partiremos ahora mismo.- El nombrado hizo una leve reverencia, mando a Rin a montar al dragón de dos cabezas y se acercó a la chica.

-¡¿Y tú qué esperas?! Si tienes una pista de a donde se fue el incompetente de Naraku más vale que nos guíes hasta allá.- Dijo el Sapo mientras se daba la vuelta y empezaba a caminar a un lado de su amo.

Saya tomo su espada y camino difícilmente en la misma dirección que ellos "Tal vez me puedan ser de ayuda, si conocen a Naraku entonces podría llegar más rápido hasta él y terminar esta pesadilla." Pensó mientras empezaba a caminar con normalidad ya que las heridas que tente sanaban bastante rápido.

En un bosque no muy lejos de ahí se encontraban Inuyasha y sus amigos esperado encontrar algún rastro de su enemigo.

-Puedo olerlo, es muy débil pero estoy seguro que Naraku estuvo aquí- Decía Inuyasha frustrado, llevaban semanas sin encontrar rastro alguno del demonio.

-No percibo la presencia de fragmentos cerca Inuyasha. –Dijo Kagome intento que hibrido no se empezara a exaltar tanto.

-Bueno ya está oscureciendo y lo mejor será buscar algo que comer además Naraku ahora no parece ser lo importante, esta aura maligna no me parece normal, es demasiado fuerte como para ser de Naraku o de alguna de sus extensiones- dijo Miroku muy pensativo mirando el nublado cielo.

-Tiene razón excelencia, esta presencia es demasiado grande como para ser de algún monstruo ordinario es como si cada día fuera fortaleciéndose- Dijo Sango seriamente.

-¿Creen que sea algún enemigo más poderoso?- Preguntó Shippo, tratando de entender mejor de lo que estaban hablando sus amigos, Kagome se acercó y se puso a la altura del pequeño zorro.

-Tal vez Shippo, debemos que averiguarlo pero por ahora lo mejor será descansar, ya mañana seguiremos buscando alguna pista.-

-¡Feh! los humanos son tan débiles, se cansan muy rápido y no aguatan nada.-dijo Inuyasha muy orgulloso.

-¡Inuyasha!-le dijo Kagome mirándolo desafiante, mientras él mostraba una cara de miedo por lo que seguramente diría la miko- ¡Abajo!-

-¿Kagome por qué hiciste esto?- dijo Inuyasha ya en el suelo

-Abajo- le dijo dándole la espalda al hibrido indignada.


En una cueva muy lejos de ahí se encontraban el malvado Naraku, Hakudoshi, Kagura, Kanna y Kohaku.

-Naraku, ¿Para qué nos llamaste?-preguntó Hakudoshi con un tono de fastidio de solo ver a ese sujeto.

-Los llame para que conozcan a un nuevo aliado. Sal de las sombras Fumito.- Dijo el demonio mirando sobre el hombro la oscuridad de la cueva mientras un hombre alto de cabello corto de color negro, ojos color azul oscuro y piel blanca salía de la oscuridad.

-Entonces, ustedes deben de ser las extensiones de Naraku - Dijo Fumito mientras miraba fijamente a los demonios mientras estos hacían lo mismo hasta que el hibrido de pelo negro volvió a llamar la atención.

-Vamos Fumito tengo una misión para ti, quiero que te presentes primero a uno de mis enemigos, Inuyasha.- Naraku empezó a sonreír tétricamente mientras le advertía de si oponente de su espada y de sus amigos mientras caminaba al interior de la cueva.- Y Fumito, puedes matarlo de la forma que desees.- Estas palabras causaron que el nombrado mostrara una sonrisa enorme y escalofriante.


Bueno hace mucho que había dejado este fic olvidado por falta de tiempo y hace poco lo volví a leer para ver de que trataba y cuando vi lo mal que iba quedando por error y otras cosas, decidí corregir los capítulos del fic cada que tenga tiempo libre así que si eres un lector que ya tiene tiempo espero los cambios no te disgusten, pero si eres nuevo aquí lamento si hago que tus ojos sangren de tantos horror ortográficos pero fue mi primer fic, si te esta gustando la historia espero sigas leyendo y dejes review en esta abandonada historia, sin más que decir me despido para no volver a dejar este tipo de mensajes por aquí y esperando les haya gustado la corrección del primer capítulo y pronto haré la corrección del segundo espero.