Capítulo I: El ángel de un ala regresa

Era un día casi normal en el séptimo cielo. La morena experta en artes marciales Tifa Lockhart estaba todavía dormida, el despertador sonaba pero ella no despertaba. Razón; Una pesadilla.

Tifa gemía en sueños, en su sueño estaba siendo perseguida por algo que no se atrevía a ver. Corría por un pasillo sin fin, aunque el piso y las paredes estaban hecho de un material metálico y resplandeciente el ambiente era muy aterrador.

Una puerta aparece en frente de ella, sin dudarlo entra. Apoya la espalda contra esa puerta fría dejándose caer lentamente hacia el suelo, cerró los ojos y lanzó un fuerte un suspiro aliviado. Puso sus manos en su vientre y se exalto por completo, miro con terror sus manos cubiertas de sangre.

Se paró exaltada y vio unas plumas grises y negras cayendo a su alrededor, se dio la vuelta y el pulso de su corazón se aceleró. Detrás de ella, su peor enemigo; Sephirot.

«Sé que piensas que soy un monstro»la voz de ese asesino resonó en su cabeza, sus piernas se tensaron y trato de ponerse en posición de batalla pero ni siquiera pudo moverse, el miedo la invadió por completo.

Desvió su mirada y vio que Sephirot tenía su ala negra a la vista, este rio y se acercó a ella

« ¿Piensas que por que tengo un ala negra soy un demonio?»cuestiono mientras caminaba hacia ella, Tifa daba un paso hacia atrás «Tú también tienes una»

Tifa se miró por el reflejo de la puerta tenebrosa y como Sephirot dijo; también tenía una, solo que gris.

Se dejó caer al suelo contornada, su cuerpo entero temblaba. Apretó los puños tan fuerte que sangre salió de estos. Sin aviso empezó a sentir sacudidas y una voz gritando su nombre.

Tifa abrió los jos de repente con una expresión asustada y cristalina, vio a su alrededor y allí es cuando comprendió que estaba en su cuarto con Cloud tomándola de los hombros mientras Denzel y Marlene estaban en el marco de la puerta. Miro a Cloud confundida.

— ¿Qué paso?‒ preguntó Tifa llevando una mano a su pecho, para revisar que su corazón aun latía

— Comenzaste a gritar‒ contesto Cloud

— ¿Qué te sucedió Tifa?‒ preguntó la pequeña Marlene con una clara preocupación en sus ojos

Tifa saco una sonrisa forzada, no podía permitir que la vieran llorando o contarles lo de su sueño con Sephirot

—Solo una pesadilla, estoy bien‒ suspiro Tifa, se levantó de la cama y se acercó a los niños‒ ¿No han desayunado aun verdad?

Ambos negaron con la cabeza, Tifa puso su cara más tierna y le dijo que fueran abajo que ella les prepararía el desayuno, después de algunos reclamos aceptaron dejando a Cloud y a Tifa solos en la habitación

— ¿Y tú qué esperas?‒ preguntó, empujando a Cloud fuera de la habitación‒ Tengo que cambiarme

Antes de que Tifa lo echara el rubio puso la mano en el marco de la puerta impidiendo que su amiga de la infancia lo echara. Se dio la vuelta y cerró la puerta detrás de el

— Tú nunca gritas, tampoco lloras y menos en sueños‒ dijo Cloud acercándose a ella, mientras que Tifa retrocedía‒ ¿Qué sucede?

— Solo es una pesadilla‒respondió Tifa, ella no iba a dejarse caer por una simple pesadilla, sonrió honestamente‒ Vete, voy a cambiarme

Cloud retrocedió un poco al darse cuenta de que Tifa estaba aún en piyama. Ella utilizaba el jersey de Cloud cuando estaba en SOLDADO, el no entendía por qué lo utilizaba estaba viejo pero se encargaba de lavarlo y coserlo siempre. El rubio se quedó pensativo y luego se retiró dejando que Tifa se cambiara en paz.

Unos minutos más tarde Tifa bajo ya cambiada con su remera negra, pantalones negros y guantes de cuero negro (El traje de A.C). Se acercó hacia la barra y comenzó con su tarea.

Marlene la miro de reojo, dejando a Denzel confundido

— Tifa‒ llamó Marlene, la morena respondió con un murmuro de pregunta

— ¿Con que soñaste?‒ preguntó Marlene haciendo que Tifa casi soltara las copas que limpiaba

—N-no me gustaría hablar de eso‒ murmuró

— ¿Por qué gritaste?‒ volvió a preguntar, Tifa miro hacia otro lado por lo cual Marlene se dio cuenta de que no debería preguntar nada mas

— Iremos a jugar a fuera‒ interrumpió Denzel llevándose a Marlene consigo. Tifa los vio decepcionada de ella misma y se dedicó a seguir con su labor.

Mientras tanto que Cloud hacia sus entregas llegó a la ciudad olvidada, paró a unos metros de un lago, se bajó y sentó.

—Hola Zack, Aerith‒ Saludó Cloud imaginando que sus amigos estaban frente a el

"¡Hola campeón!" exclamó Zack en la cabeza de su amigo

"Que gusto que vinieras a vernos" dijo Aerith

—Lamento haber venido de la nada, pero necesito ayuda con algo‒ comentó el Ex-SOLDADO

"¿Es sobre mujeres?" preguntó Zack "Si es así tienes al mejor frente a ti"

Inmediatamente después de eso Aerith le dio un codazo en las costillas de Zack, este se removió adolorido

"¿Qué le sucedió a Tifa?" preguntó Aerith

— ¿Cómo sabias que…?

"Cloud…" dijo Zack "Hasta yo me doy cuenta de que estás enamorado de Tifa"

El rubio se sonrojo al instante, dándole toda la razón a su amigo moreno

"Mejor así, porque si sentías algo por Aerith" Zack adoptó una posición de ataque como si estuviera ahorcando a Cloud

— Aerith no es mi tipo…‒ susurró Cloud provocando cierto enojo en su amiga

"¿Y cuál es tu tipo?" preguntó Zack

—Tifa es mi tipo

"Déjalo Aerith está enamorado"

— ¿Podemos hablar de mi problema?

"Ya cachorrito ¿Qué sucede?"

—Tifa hoy tuvo una pesadilla, una grande‒ contestó parándose, dándole la espalda a sus amigos

"¿Qué tan grande?" preguntó Aerith

—Estaba llorando, gimiendo e inquieta‒ comentó llevándose una mano al rostro

"¿Y de que era su pesadilla?" indagó Aerith

—Ese es el problema… No quiso decirme, sólo dijo "Solo una pesadilla, estoy bien"

"Tifa es una mentirosa" dijo Zack de la nada, Aerith y Cloud lo miraron sorprendidos "Ella siempre dice «Estoy bien» y sonríe como si no ocurriera nada, pero en realidad se está matando por dentro"

Cloud se quedó callado ¿Cuántas veces le abra dicho «Estoy bien» mintiendo? Tifa era su amiga, él debía conocerla mejor que nadie y sabía que ella era la más fuerte sentimentalmente nunca lloraba, menos en sueños.

"Yo hablare con ella" interrumpió Aerith "A veces lo mejor es hablar entre chicas. Llévale unas rosas, ayúdala con los deberes y llega temprano a casa"

"¡Conquístala campeón!" exclamó Zack antes de desaparecer junto con Aerith

Cloud abrió los ojos y se encontró completamente solo, suspiro y se acercó a paso lento a Fenrir

— ¿Rosas?‒ suspiró Cloud‒ ¿Dónde las conseguiré?

Inmediatamente se le ocurrió un lugar y arrancó a gran velocidad con Fenrir

Mientras tanto Tifa seguía atendiendo el bar algo distraída, soñar con Sephirot era extraño y aterrador, había pasado un tiempo ya desde la tercera caída de Sephirot, debía admitirlo era más difícil de matar que las cucarachas. Se tomó la cabeza y comenzó a jalarse el cabello, intentando distraerse, al no funcionar saco una botella de alcohol puro y se lo sirvió en un vaso "short" como toda una buena dueña de bar se lo tomo de una. La risa de Sephirot volvió a su mente, por lo que, involuntariamente, lanzó el vaso contra la pared. Los clientes la miraron confusos, inmediatamente la morena se disculpó por la molestia y limpio el desastre.

«Sigues siendo débil»volvió la voz de Sephirot a su cabeza

—Me estoy conteniendo, vas a ver lo que pasa cuando me enojo de verdad‒ dijo Tifa para sí misma con la esperanza de que el "Ángel alado" la hubiera escuchado

Esa misma noche un grupo de soldados hechos de un extraño material negro parecido al cristal, marchaban silenciosamente por las calles de Midgar. En una hora en la que las calles del pueblo estaban casi vacías, a excepción de unos borrachos y trabajadores nocturnos, se desplazaban rápidamente hasta llegar a una casa de familia, entraron por una de las ventanas y salieron con un bulto envuelto en sabanas, perdiéndose en la oscuridad de la noche. Corrieron hasta una montaña a las afuera de la ciudad allí entraron a una profunda cueva, cuando más de adentraban las paredes se volvían metálicas, como en un hospital.

Llegaron hasta una gran puerta con un panel donde estaban dibujados unos números, uno de los soldados se acercó y comenzó a apretar las teclas creando una secuencia de números, la pesada puerta se abrió dejando ver a muchos científicos caminando de un lado para el otro, los soldados se acercaron y colocaron el bulto en una fría cama de metal. Al despojarlo de sus telas se vio a una mujer joven casi una adolecente de unos 20 o 19, alguien sin rostro se le acerco con una aguja.

Este hombre golpeo un par de veces el objeto e inyecto el contenido en el cuello de la chica, provocando que esta abriera repentinamente los ojos y comenzara a gritar desgarradoramente mientras su piel se quemaba. Pero al final se calmó y volvió a cerrar los ojos, pero esta vez fue para siempre.

—Joder, otra que no funciona‒ murmuró el hombre decepcionado‒Llevadla con las otras

— ¿Quisieras dejar ese estúpido asentó?‒ preguntó una sombra que emergió desde la oscuridad

El hombre se quedó estático, lentamente giro su cabeza para ver al que menos quería ver en ese momento

—Lo siento señor…‒ murmuró el hombre con la inyección en su mano‒ Ninguna mujer es tan fuerte para soportar las células JENOVA, la única capaz fue Lucrecia, pero ella murió hace tiempo.

—Ya no es necesario buscar‒ comentó el otro hombre, mientras caminaba hacia el científico‒ Ya encontré a una…

— ¿Quién es?

Tifa volvió a ser despertada por Cloud, pero esta vez sentía como si se estuviera quemando

— ¿Volví a despertarlos?‒ preguntó la morena mirando una vez más a los niños asustados y a Cloud a su lado‒ Creo que necesito un descanso

Tifa sonrió y de alguna forma logro de que la dejaran sola, su sueño fue horrible. Ella sabía que era pura fantasía, pero al final estaba casi segura de algo; Sephirot había vuelto