Phineas and Ferb no me pertenecen.
Resfriado.
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Era un día común y corriente, aunque más aburrido que las otras. Candace miro con pereza a sus hermanos, Phineas y Ferb estaba construyendo otra maquina.
¿Qué sería esta vez: Una maquina del tiempo, un rayo?
Poco importaba, estaba cansada y con un dolor terrible en la cabeza, tenia un resfriado y la nariz roja. Su madre le llamo, ella suspiro y apresuro el paso para entrar en casa y echarse en su cama, descansar.
Descansar sin saber nada de sus hermanos. A veces era agobiante no poder pillarlos.
Cerro los ojos cansada y durmió con tranquilidad. Desde afuera Jeremy se removió inquieto, con un mohín en los labios.
—¡Ey! ¿Qué pasa?—preguntó Phineas alargando el cuello para ver mejor al rubio que estaba detrás de la cerca. Jeremy dio un respingó y avergonzado movio la cabeza.
—...Me dijeron que Candace estaba enferma. —murmuro mirando a Ferb que le miraba intensamente y una curvatura en sus labios, sintió un escalofrío recorrerle. Él casi nunca veía a Ferb sonreír, y mucho menos con esos ojos fijos en su persona, durante un segundo se sintió intimidado por la vista del pequeño. —Hola Ferb. —saludo sonriendo forzosamente, Ferb asintió meditabundo y encogió los hombros siguiendo a lo suyo. —Creo que mejor me voy...—balbuceo.
—Candace en su habitación, la segunda planta a la izquierda, mamá fue de compras.—dijo seriamente Ferb mirando el martillo de su mano y la tabla en la otra, Jeremy apretó los labios. —Creo que querrá verte. —por primera vez Jeremy comprobo que hasta Ferb podía hablar más que una linea de palabra.
—Gracias.—murmuro. Phineas alzo su ceja y miro a su hermano.
—¿Qué pasa Ferb?
Ferb le miro y sonrió discreto, volvió a encogerse de hombros y paso por el lado de su hermano pequeño.
Candace farfullo entre dientes palabras incomprensibles y bajas, su garganta estaba seca y pedía un vaso de agua. Sintió en sus labios algo frió, bebió abundante agua y se hizo un ovillo en su cama.
—Hmn—se quejo soñolienta.
—Parece que estas bien, Candace.
La chica abrió los ojos sorprendida levantandose de un salto, su cabeza giro unos grados antes de dar con el rubio que tenia delante de ella. Su rostro se torno rojo.
¡Ella estaba un desastre!
Empezó a peinarse en pelo con sus dedos temblorosos, movía su cuerpo freneticamente.
—Hey Candace, tranquila. —dijo Jeremy sonriendo alegre. Ella asintió avergonzada.
—Estoy un desastre.—susurro por lo bajo.
—Estas bien, igual de guapa. —Jeremy se revolvio su cabellera dorada sonrojado, Candace sonrió. —¿Estas mejor? Me tenias preocupado cuando no fuiste a clases, le pregunte al profesor por ti y me dijo que estaba enferma.—sus ojos azules vieron a la chica que estaba roja y temblando con violencia en la cama. —¿Tienes escalofríos?—pregunto preocupado, le ayudo a echarse en la cama y le cubrió con la colcha. Se miraron fijamente y Candace empezó a cerrar los ojos.
Se quedaron en silencio hasta que Jeremy escucho el suave murmullo que hacia Candace al dormir, suspiro. Dios, estaba tan nervioso, nunca había entrado a la habitación de Candace, mucho menos la haba visto despertar de esa forma graciosa. Soltó una risita entre dientes. Se encogió en la silla a lado de la cama de ella y acarició su cabellera naranja.
De verdad que estaba preocupado, pensó que estaba peor. Candace Flynn era la única chica que lo hacia preocupar de esa forma, también avergonzarlo tanto como para ruborizarse y balbucear.
N/A. ¡Nice! xD Me encantó, es la primera vez que escribo sobre está hermosa parejita —espero hacer más.—aunque no sabría si podré hacer más ya que.. xD Bueh. En fin, one-shot. Espero hacer un Phineas y Isabela. =)
Adiós~—Dejad R&R que no cuesta nada xD—
