Ohayou minna -san!
Hoy les traigo un One-shot... Emm... Raro? Bueno, disfrútenlo!
Capítulo Único
Lucy regresaba del centro comercial con un par de bolsas en cada mano y una sonrisa en el rostro.
Abrió su departamento y Natsu estaba ahí, sentado cómodamente en su sofá, nada nuevo.
—¿Qué haces aquí? —Preguntó con un increíble humor que hasta Natsu se sorprendió. Lucy debería salir de compras más seguido.
—Nada en especial. —Contestó rascándose la nuca. —Sólo estoy aburrido.
—Sabes, me siento un juguete cuando hablas así. —Reclamó indirectamente mientras dejaba las bolsas en la mesa del comedor. Suspiró. — ¿Y Happy?
—Misión con Wendy y Charles.
—Ya veo. —Estuvieron en silencio por varios minutos hasta que Natsu lo rompió.
—Tengo hambre.
— ¿Y? Ve a comer.
—No tengo dinero~
—Bien, vamos por una pizza. —Tomó sus llaves, cartera y abrió la puerta.
— ¿Pizza? —Confuso se levantó y siguió a la rubia, cerrando la puerta detrás de el.
—Sí, ¿Nunca la has probado? —Caminaron por las calles de Magnolia buscando una pizzería.
—Nop. —Se cruzó de brazos. — ¿Sabe bien?
—Sabe deliciosa.
— ¡Oh! Entonces si quiero. —Hizo cara de niño comprando sus amados dulces.
Llegaron a la pequeña pizzería. Deberían considerar hacerla un poco más grande, puesto que la mayoría de las personas estaban afuera esperando, ya que era casi imposible pasar entre tanta persona. Increíblemente, lograron ordenar y esperaron a que se la entregaran.
Todos miraban a Natsu como si fuese un bicho raro, ¿Y quién no? Es decir, con estrellitas en los ojos y babeando de a litro por minuto, miraba un cuadro de una pizza en una recóndita esquina. Nunca nadie se ha sentido más acosado que el pobre cuadro.
—Listo Natsu, vámonos. —Avisó Lucy con la pizza en manos y una sonrisa al ver la reacción de su compañero.
Natsu se desesperó de la lentitud -según el- de su amiga, la cargó y comenzó a correr hacia su departamento.
Lucy en cambio, ni se dio cuenta de cuando llegaron al apartamento, simplemente se visualizó sentada en el sofá y la pizza en la pequeña mesita de en frente.
— ¡A comer! —Gritó Natsu sentándose al lado de Lucy de un brinco.
—B-Buen provecho. —Dijo la rubia con una sonrisa al ver como Natsu no comía, devoraba.
Tomó un pedazo antes de que no alcanzara y mordió la punta sin tomar en cuenta la temperatura del mismo.
— ¡Me quemó! —Se las ingenió para exclamar con la boca semiabierta y abanicándose para tratar de bajar el calor.
—Bebe, te bajara la quemadura. —Le sugirió el dragón asesino tendiéndole un vaso con agua.
Pero al ver que Lucy no respondía, alzó los hombros y bebió un trago del vaso, volvió a mirar a Lucy y la besó de golpe, pasando delicadamente el agua a su boca.
— ¿Mejor? —Preguntó al separarse.
—S-Sí. —Hasta Erza con su pánico escénico se veía mejor que Lucy en esos momentos.
Natsu sonrió y continuó devorando la comida.
—Eres un tramposo. —Dijo la rubia.
El oji-jade paró de comer nuevamente y la miró con una ceja alzada.
— ¿Y eso a que viene?
—Sabes muy bien que no era para tanto... Ademas era mi primer beso. —Susurró la última frase antes de voltear su sonrojadísimo rostro a otro lado. Y Natsu sonrió.
El silencio se hizo presente nuevamente. Lucy dio otro mordisco y sonrió.
—Natsu... Me quemo. —Informó la rubia antes de acercarse y besarlo, pero esta vez, era un beso lleno de cariño.
Ambos correspondían el beso con energía y felicidad.
—También era mi primer beso. —Admitió el de cabello rosa. —De ahora en adelante eres mía. —Dijo sin temor alguno.
—P-Pero...
—Nada, no puedes ocultar que me quieres y yo tampoco puedo ocultar... Que te quiero. —Se sonrojó.
—Bien, con una condición.
— ¿Cual?
—Que comamos pizza todos los viernes. —Natsu sonrió.
—Hecho.
Ni siquiera sé si existían las pizzas o no en esa época xD Bueno, espero que haya sido de su agrado :3 ¡Gracias por darse el tiempo de leer!