Autora: bueno aquí les dejo lo que sería la continuación de "siete días en España", esta vez nuestros queridos países viajan a Francia, ¿que cosas les esperaran allí?.
Advierto, cuadrado amoroso Rusia x España x Lovino x Yao
Día 1:
Si alguien se preguntaba porqué Inglaterra estaba colgado de la torre Eifel mientras Alfred y Ludwing trataban de salvarlo, deberán retroceder unas tres horas para entenderlo todo.
El día de Francia había sido muy tranquilo, se había levantado a las cinco de la tarde alegando que necesitaba descansar bien para mantener su hermoso cutis, lo que pasaba es que anoche se había ido de borrachera y de putuferio y tenía una resaca más grande que Rusia. Se levantó sonriente, sin preocuparse siquiera de mirar el reloj y bajó a desayunar, fresco como una rosa. Su desayuno, que el exigía que fuese ligero, consistía en una torre de Creepes con cantidades industriales de chocolate, un café y varias tostadas con mantequilla, si a eso se le llama un desayuno ligero en Francia.
Tras su "ligero" desayuno, el joven francés se dirigió a su santuario, o sea se, el cuarto de baño; llenó la bañera casi hasta el borde y utilizó para crear espuma unos jabones aromáticos que Canadá le había regalado, se quitó con delicadeza su pijama de franela rosa y se metió en la bañera soltando un gran suspiro, todo era muy apacible, en unas horas llegarían Antonio, Lovino, Arthur, Kiku, Yao, Iván, Ludwin, Feliciano y Alfred para pasar siete días en su casa, solo deseaba que el toro fantasma de Alfred no apareciese por allí, le dolían las piernas al recordar las carreras que tubo que darse para que el toro no lo matase.
El sonido de su móvil en el cual se oía una música bastante pegajosa que resultó ser el himno de Francia, trató de ignorarlo, pero el móvil seguía sonando así que al final lo cogió.
-¿España?-pensó al ver la foto de su hermano en la pantallita- Bonjour je suis Francis Espagne
-Hola Francis-saludó España con una voz que al francés no le gustó nada, estaba cabreado
-¿Pasa lago hermano?-dijo Francis asustado-Te noto la voz rara
-No, no pasa nada, solo que te quiero hacer dos preguntas-dijo el español, el tono de voz cada vez era más sombrío.
-Pues tu dirás
-¿sabes a que hora llegaban nuestros vuelos?
-Si, a las doce -respondió
-Correcto-le felicitó el otro-última pregunta.¿que hora es Francis Bonnefoy?
Francis miró el reloj, para luego dar un grito ahogado eran las cinco de la tarde, sabía que ciertos rubios le iban a matar por su impuntualidad, así que rápidamente se vistió y salió como alma que lleva el diablo hacia el aeropuerto de Orly.
Legó a las seis y media, y para cuando vio al resto de las naciones quiso pisar a fondo el acelerador y salir de allí, todas le miraban impasibles y notablemente enfadadas, por no decir que Iván había sacado su tubería, tras varias disculpas que incluyeron varios insultos y golpes bajos hacia el francés todos subieron al gran coche de Francia.
-Oye que lo de llegar tarde es cosa de los italianos, los americanos-le dijo Arthur mirando por la ventana- tu no deberías llegar tarde Francia.
-Perdón-susurró a regañadientes por vigésimo quinta vez en una hora.
-Es España el país de los tardones-siguió Arthur hasta que el aura maligna de Rusia se extendió por el coche, haciendo que todos los presentes, salvo España, quisieran saltar al Sena, nadie se metía con España en presencia de Rusia.
-Ya se-dijo Francia alzando una mano-os voy a llevar a un sitio genial, os va a encantar.
Y dando un giro tan brusco que hizo que las naciones acabasen agarradas a sus asientos y rezando a sus respectivos dioses Francia los condujo al lugar más representativo de su ciudad.
-Il s'agit de la Tour Eiffel-dijo Francia emocionado, viendo como Kiku y Yao comenzaban a sacar fotos al monumento
-Que irónico-comentó Arthur despectivo-un pene gigante en el país de los salidorros
Todos, salvo Francia, rieron ante este comentario, la verdad es que era muy irónico.
-Hmp, ¿queréis subir?-preguntó Francis
Tras tres horas de cola los países consiguieron subir al ascensor, sonde iban todos como sardinitas en lata.
-Hey alguien me esta tocando el culo-se quejó España
-Francia estate quieto-le regañó Alfred
-PEro si yo no soy, estoy muy lejos-respondió el francés que efectivamente estaba muy lejos del español
Antonio tragó duro al sentir como una mano fría se deslizaba por dentro de su camiseta , ya sabemos todos quien era y quien recibió el tomatazo de su vida, si señoras y señores, esa persona había sido Rusia.
-¡Waaaaaaaa!¡Que vistas más bonitas!-gritó ilusionado Feliciano observando todo a su alrededor.
-Es muy bonito-coincidió Lovino que visto lo visto no se separaba del español, el cual aún estaba afectado por el intento de anexión de Rusia.
Empezaron a tirase fotos con la cámara de Kiku, tal y como habían hecho en casa del español hacia tiempo.
-Oye España, que te caes-dijo Arthur empujando al español, que se había separado de Lovino para ver las vistas, y estaba muy asomado al borde de la torre.
El empujón que le propinó hubiese bastado para tirarle desde lo alto de la torre y que se hubiese matado, si no fuera por que Rusia, que acosaba al español, le hubiese cogido y dejado en el suelo inconsciente por el susto, para luego coger a Inglaterra por el cuello de la camisa y colgarle de un alambre.
-Inglaterra que te caes-dijo Rusia con su típica sonrisa macabra
El grito de Inglaterra se escuchó en toda Francia, a su rescate acudieron Ludwin y Alfred, los cuales trataron de sacarle pero no había manera
-Iggy deja de moverte-le decía Alfred, pues el ingles no dejaba de mover las piernas y Francis ya se había llevado una buena patada en el rostro.
-¡QÚE SE ESTÉ QUIETO TU PADRE!-le gritó histérico el inglés.
-¡O TE ESTÁS QUIETO O NO TE AYUDAMOS!-le gritó Alemania el cual había esquivado por los pelos varias patadas del inglés haciendo que este se calmase.
Cuando consiguieron volverle a dejar en tierra firme, lo primero que hizo fue besar el suelo, por dios que miedo había pasado. Se fueron derechitos a casa de Francia, pero al llegar al coche.
-¿oye chicos y Rusia?-preguntó Kiku mirando a todos lados-tampoco está España
Mientras en un cuarto de la torre Eifel
-¿Dónde estoy?-preguntó el español recién despertado mirando a todos lados
-No te preocupes, estás conmigo-dijo Iván apareciendo de entre las sombras con su típica sonrisa
-Iván-suspiró el español al ver acercase al ruso- que alegría creía que eras Francis, ¿porque te acercas tanto?
-No tengas miedo, te voy a hacer cosas muy bonitas mi lindo girasol.
-¿Ah?-preguntó el español sin comprender
El resto no lo pueden ver niños
Fin del día 1
Autora: espero que os haya gustado.
