Disclaimers: Los personajes que aquí presento no me pertenecen, así como lo hace la rima del grandísimo Becquer.
Me gustaría saber si os ha gustado una vez leído para seguir con one-shot de las demás rimas, lo único que no se si serán de la misma pareja o de distintas, depende a lo que me recuerde la rima.
Muchas gracias por leer, espero que os guste y que con esto
Rima XVI
A la hora del atardecer mientras el sol se ocultaba en el horizonte una joven mujer rubia corría con su pequeño alrededor de su casa-torre, esto se debía a ficticia huida de un asalto al castillo del rey Bibler por los terribles y malvados Nargles que quería secuestrar al pequeño príncipe, pero este lleno de valor libero a su madre, la reina de sus garras y…
_Lorcan cariño creo que es hora de ir a preparar la cena.- dijo la mujer al notar lo surtimos rayos de sol
_Pero mami, si casi lo había conseguido...- y con la cabeza gacha siguió a su madre hacia el interior de su hogar.
Lo que no sabían era que una sombra sonreía a la vez que de sus labios se escapaba un suspiro de nostalgia ante la escena.
Si al mecer la azules campanillas
De tu balcón
Crees que suspirando pasa el viento
Murmurador,
Sabe que oculto entre las verdes hojas
Suspiro yo
Mientras recogía la vajilla de la mesa, el pequeño Lorcan jugaba alrededor de los muebles, cuando su madre acabo se fue directo a la cama a la espera de que esta le leyera un cuento y si tenia suerte la convencería de que fueran dos.
Luna se sentó en el borde de la cama mientras comenzaba la historia, a la vez que gesticulaba con las manos para darle más emoción y hacer que el cuento fuera real por unos instantes. Los ojos del pequeño se cerraron dando acceso libre a sus sueños para apoderarse de su mente, su madre se acerco a su rostro quitando uno rebelde mechón rubio de su frente para después depositar un suave beso antes de desearle las buenas noches y murmurar un te quiero.
La sombra ahora se encontraba apoyada sobre el marco de la puerta, disfrutando de la escena, cuantas veces había sido él el causante de los sueños del pequeño, mientras la joven les repetía una y otra vez que era la hora de dormir, y otras tantas en las que les encontraba a los dos dormidos con el cuento en la mano y cariñosamente, junto con aquella sonrisa que siempre la acompañaba le echaba una manta encima para que no se quedara fríos por las noches, pero esos eran tiempos pasados ahora tenia que encargarse de velar por ellos por la noche para que las pesadillas no invadan sus dulces sueños.
Y antes de seguir a la rubia susurro un firme y seguro "dulces sueños Lorcan"
Si al resonar confuso a tus espaldas
Vago rumor,
Crees que por tu nombre te ha llamado
Lejana voz
Sabe que entre las sombras que te cercan
Te llamo yo
La sombra entro en la habitación que se encontraba al lado del pequeño, atravesándola hasta sentarse en la cama observando a su joven amada, ahora se podía apreciar lo que en otra vida fue un platino cabello y una pálida piel, junto con unos ojos plateados como el mercurio que no perdían de vista a Luna, la observaba atentamente como un ritual;
Primero iba al baño para cambiarse y cepillar el pelo antes de acostarse, luego hacia al armario para depositar a un lada la ropa que había usado todo el DIA para echarla a lavar al DIA siguiente en cuanto se levantara, luego iba hacia la pequeña estantería al lado de escritorio, por mucho que el insistio en regalarla un tocador ella prefirió aquel escritorio para poder plasmar sus ideas en papel, de la estantería tomo un pequeño cuaderno donde guardaba fotos de ellos cuando eran jóvenes y cuando nació su pequeño se acerco a la ventana para verlas dos o tres veces antes de volver a guardarlo, pero esta vez cambio su rutina y volvió a la ventana entonces de sus labios salio algo que hacia mucho que no oía:
-Te amo mi dragón
Aquello hizo que su corazón, metafóricamente hablando, diera salto de alegría pero entonces se fijo en una pequeña gota que se escapaba de los azules ojos, no pudo contenerse, se acerco a ella con su mano intento quietar la lagrima, cosa imposible al estar muerto y antes de depositar un beso en su frente la susurro.
-Yo también te amo mi vida, y siempre te amare.
Si te turba medroso en la alta noche
Tu corazón
Al sentir en tu labios un aliento
Abrasador
Sabe que, aunque invisible, al lado tuyo
Respiro yo.