REGRESO A TI

1.- Allí no hay camino

Made in Yatta´s Brain

..oo:…O-o…:oo..

Harry estaba caminando por una de las calles del Callejón Diagon. Ese sería su ultimo año en Hogwarts y como lo había hecho los seis años anteriores, debía obtener su material para el nuevo año. Ese día tuvo que ir a comprar sus cosas solo, lo que le hizo recordar la primera vez que fuera a ese lugar acompañado por Hagrid. El gigante le había mostrado esta fascinante parte del mundo mágico al que habría de pertenecer desde ese momento. Los siguientes años siempre había ido de compras con la ayuda de los Weasleys, pero esa vez todos parecían tener algo que hacer, Dumbledore había dado tareas a cada uno de los miembros de la Orden, y como siempre ocurría cuando se trataba de hacer algo que hiciera una diferencia, Harry era ignorado, después de derrotar a Voldemort parecía que su mera existencia ya no era necesaria.

"El Elegido" había estado divagando, molesto con la actitud del director, sin mirar a donde iba. De pronto se detuvo y miró a su alrededor. El lugar en el que se encontraba le era totalmente desconocido, donde se suponía que estaba? Todo a su alrededor estaba hecho de piedra, el muro, la calle... No había un solo mago en la mira. Harry se volteó para ver que había detrás y el lugar no difería en nada de lo que había delante. Sin saber que hacer, Harry siguió caminando, seguro que habría alguna salida o alguien a quien preguntarle cómo volver al Callejón Diagon. Fué entonces cuando se percato de que después de caminar por lo menos media hora, había vuelto al mismo lugar. Mirando a su alrededor dudó por un instante, después de todo, en ese maldito lugar todo era igual. Recordando algo que leyera tiempo atrás respecto a laberintos, sacó una moneda de su bolsillo y la dejó sobre una bardita de ladrillo y piedra a su derecha y continuó caminando a lo largo de la pared. El lugar lo estaba fastidiando! Después de otra larga caminata se detuvo y miró a su alrededor. El lugar donde se encontraba en ese momento le era realmente familiar, pero al mirar la barda en busca de la moneda no vio nada. Al menos eso le daba esperanza de no estar dando vueltas en círculos!

Harry se sentó sobre la barda. Necesitaba descansar y pensar en alguna forma de encontrar una salida. Cansado de dar vueltas, se recargó sobre la barda y entre la tierra que la cubría su mano encontró un objeto pequeño. Lo tomó y sacudió un poco el polvo que lo cubría. Maldición, ¡era su moneda!

Harry se puso de pie, sacó su varita y empezó a lanzar "Alojomoras" por todos lados; si había una puerta oculta por allí cerca, Harry iba a descubrirla. Su energía se empezó a agotar y ya estaba bastante fastidiado, así que se dejó caer en el piso. Frustrado, arrojó su varita al suelo, lo que hizo que la vara lanzara chispas sobre la barda. El centelleo llamó la atención de Harry. Al darse vuelta para ver las pequeñas gotas de luz emergiendo de su varita, vió algo que no había notado antes. Entre las rocas que formaban la pared, había un ladrillo y lo interesante era que dicho ladrillo estaba casi como saliéndose de su lugar. Harry se arrastró hasta el ladrillo y comenzó a sacarlo. Cuando por fin logró desencajarlo del muro, Harry espió a través del agujero y vió que del otro lado había pasto verde. Con más ánimo ahora que podía ver algo más que piedras, Harry tomó de nuevo su varita lanzó un hechizo para romper los ladrillos, lo que formó un agujero lo suficientemente grande como para que Harry pudiera pasar por él. Harry decidió ir al otro lado, al menos el pasto verde ofrecía un mejor panorama que la desolación del "mundo de piedras" en el que se hallaba en ese momento. Sin pensarlo dos veces se pasó por el agujero y salió del otro lado, pisando sobre una alfombra de pasto. Una vez que Harry estuvo del otro lado se dió vuelta para mirar la pared, sólo para ver que el agujero cerrarse por sí solo. Sabiendo que tenía que encontrar una salida de ese jardín si era que quería volver al Callejón Diagon, Harry miró en todas direcciones y se quedó mudo al ver que ese, no cualquier jardín! A su izquierda y había un lago, a su derecha un sendero que lo llevaría a un conocido castillo: estaba en los terrenos de Howgarts!

Harry estaba por entregarse al ataque de nervios que sentía aproximarse cuando sintió una mano que lo jaló por su hombro. Harry miro asombrado al hombre que estaba tratando de llamar su atención –¿ Profesor Dumbledore?

En verdad que parecía Albus solo que más, ¿joven?

El director lo miraba algo desconcertado –¿cómo has llegado aquí muchacho?

Harry levantó una ceja – No lo se profesor Dumbledor. Todo lo que se es que estaba en el callejón Diagon haciendo mis compras para el año escolar, cuando de pronto, y no se cómo ni por qué, me hallé en un lugar desértico y lleno de rocas y...-

–¿Me conoces? Lo interrumpió.

Harry se quedo muy serio, ¿a qué estaba jugando Dumbledore preguntando si lo conocía? –Profesor, ¿se encuentra bien?

–Escucha muchacho, no digas cosas innecesarias. Creo entender un poco la situación, por el aspecto de tus ropas y por el hecho que me conoces, pero yo no a ti, pienso que este no es tu tiempo.

Harry se quedó muy serio. Ahora que lo pensaba eso explicaría por qué Dumbledore se veía más joven, y la verdad era que en un mundo mágico todo podía ser posible.

–Necesito que me des un nombre falso, que no hayas usado nunca y de alguien que no exista, pero que te sea fácil de recordar –Dijo el director en un tono casi agitado, como tratando de hablar antes de que Harry pudiera decir algo más, algo que le diera una pista de quién era Harry realmente.

Harry lo pensó un poco, esta vez no podía usar el nombre de Neville como lo hiciera aquella vez en el autobús Noctámbulo –¿Qué tal Henry Porter?

–Excelente! ¿Supongo que conoces este lugar cierto?

Harry asintió con la cabeza –Es el colegio de Magia y Hechicería Howgarts.

El futuro director lo miro complacido –Si conoces el castillo, es por que en el futuro eres un estudiante ¿cierto? –Harry asintió con la cabeza –¿A que casa perteneces? –Dijo el profesor

–Gryffindor –Contesto con alegría el muchacho.

Dumbledore se lo pensó por un momento –Bien ésto es lo que haremos. Diremos que eres un estudiante nuevo, pero tendrás que pasar por el Sombrero Seleccionador otra vez. Si eres Gryffindor, entonces no habrá problemas, pero tus ojos...- Dumbledore se quedó serio por un momento.

Harry lo miro extrañado –¿Qué hay con mis ojos?

Dumbledore lo miró inquisitivamente –El color, no es común. Deberás usar algo para cubrirlos todo el tiempo, ven muchacho se me esta ocurriendo algo.

Harry siguió a Dumbledore en dirección al castillo.

OoO

Todos los estudiantes del colegio estaban reunidos en el Gran Salón, listos para ver la ceremonia de selección, curiosos como siempre acerca de quiénes serían los nuevos estudiantes que formarían parte de su casa.

La ceremonia no fue distinta de otras. Cada nuevo y temeroso estudiante de primer año se sentaba en el banco a la espera de que el Sombrero mencionara a que casa habría de pertenecer de ahí en más, para después ser recibido con aplausos y vitoreos por los integrantes de su nueva casa. El último en ser recibido por su casa fue un Ravenclaw, y una vez que que el pequeño se sentó junto a sus compañeros, Dumbledore entró con un joven, quien tenía puestas unas extrañas gafas oscuras, cabello más negro que la noche y de piel morena. El director se puso frente a todos y comenzó a hablar.

–Estudiantes de Hogwarts, este año tengo el placer de presentarles a Henry Porter; un joven quien estará con nosotros por tiempo indefinido. Ha venido a aprender como es la vida de colegio. Henry es un chico –El director se quedó en silencio como pensando que palabras eran las mejores para decir exactamente lo que quería, sin dar más información de la necesaria –Con habilidades diferentes. El también necesitará una casa donde vivir en su tiempo aquí en el castillo.

Dumbledore tronó sus dedos y salió una chispa. Esta se dirigió a Harry lo rodeó. Al final la luz se depositó sobre la palma de su mano y lo guió hasta donde estaba el Sombrero Seleccionador.

FLASH BACK

Harry y Dumbledore se encontraban en un salón de clases –¡Esto es lo que haremos! –dijo el profesor.

Harry solo podía observar a su ahora más joven director como éste intentaba comenzar con la explicación –Como aún no se como regresarte a tu tiempo de origen, y ésto es algo que debemos manejar con mucho cuidado, te haremos pasar por un nuevo estudiante. Creo recordar que mencionaste ser de Gryffindor ¿es correcto?

Harry asintió afirmativamente

El profesor lo miró detenidamente –¡Estupendo! Bien el sombrero seguramente te colocará en esa casa. Aún así, debes pasar por la prueba frente a todos para que no haya duda de eso.

Dumbledore sonrió amablemente –Esta es tu historia: eres un mago que no conoce la vida de colegio, y estas aquí en tu último año por petición tuya a tus padres –el hombre empezaba a mostrar emoción en sus palabras, orgulloso de haber planeado tan buena solución en tan poco tiempo –Y dígame, señor Porter, ¿Por qué no ha estado en un colegio antes?

Harry lo miro incrédulo –¡Pero sí he estado, en este mismo colegio!

Dumbledore lo miro a través de sus lente de media luna –No muchacho, la razón por la cual no has estado en un colegio es simple –dijo Dumbledore entregándole unas gafas oscuras que hizo aparecer con un movimiento de mano –Es por que no puedes ver, de acuerdo?

Harry tomó las gafas –¡Pero si puedo! aunque con éstas quien sabe si pueda –Harry miró el par de gafas con desagrado.

Dumbledore le quitó las gafas oscuras de las manos y las que Harry estaba usando, fusionándolas –No podemos arriesgarnos a que vean tus ojos. El color no es común. Debes ocultar tus ojos y fingir que no ves. Te asignaré un Gryffindor para que te acompañe todo el tiempo. No te preocupes, será un estudiante de mi entera confianza. Pruébatelas –dijo Dumbledore entregándole las gafas que acababa de fusionar.

Harry se las colocó sobre la nariz. Harry podía ver claramente, como si sólo tuviera puestos sus propios lentes.

FIN FLASH BACK

La chispa desapareció cuando Harry llegó a su destino, Harry se sentó en el banquito a la espera de que le colocaran el Sombrero Seleccionador sobre la cabeza. De inmediato, el Sombrero se puso a sopesar –Vaya, vaya, si que estamos en un lío. No hay nada que puedas ocultar de mi muchacho. Quizás esta sea tu oportunidad se averiguar que hubiera pasado si fueses un… SLYTHERIN!

El profesor Dumbledore se quedó impactado con tal declaración del Sombrero. El mismo Harry estaba que no cabía en su asombro. Si no fueran por esas gafas habría sido más que evidente que el nuevo alumno estaba anonadado. Harry, aturdido y sin saber qué hacer, se puso de pie al momento que le retiraron el sombrero.

Dumbledore se acerco y le dijo al oído –¿Acaso escuche mal? Me pareció que me dijiste que eras un Gryffindor.

Harry asintió –No se lo que pasó

Dumbledore se quedó pensativo –No importa seguiremos adelante con el plan. –Le dijo a Harry en un susurro. Luego dirigiéndose al alumnado en general agregó en voz alta, –Mis queridos estudiantes, quiero pedirles su apoyo para que nuestro visitante se sienta como en casa. Como ya se menciono, Henry tiene habilidades especiales, por lo que me temo que necesitará apoyo particular de uno de ustedes y puesto que desde ahora Henry pertenece a la casa de Slytherin , ¿señor Snape puede venir?

Los Slytherin se abrieron paso dejando pasar a un joven de larga y negra cabellera, de aspecto un tanto serio –¿Si, profesor?

Dumbledore puso un rostro muy serio –Dejaré al señor Porter a tu cargo.

Harry solo podía estar parado frente a todos los estudiantes, callado y actuando como si no supiera qué era lo que sucedía, pero por dentro estaba que se moría de la angustia. ¿Tendría que pasar todo el tiempo que les llevara a él y Dumbledore el descubrir cómo mandarlo una vez más al futuro con el grasiento de Snape? ¿Pero qué podía hacer nada para evitarlo? La mentira ya había empezado.

Harry no tuvo más remedio que seguir a Severus hacia su nueva habitación, una con el nombre de Slytherin en la entrada.

Continuara...


Nota.- hello! Pues aquí con un nuevo fic! Este estaba pensado para algo corto como de unos 4-5 cap pero esta cabecilla mía voló y voló y psss ya está terminada, tiene historias cortas que se entrelazan a esta de cierta forma, pero si las leen sin leer esta historia o si no la leen no tiene mayor relevancia en este fic, aunque si les gusta este, pues léanlo se los recomiendo jajajj XD! (como no hacerlo si yo lo escribi juar juar)

Este capitulo esta corregido por mi beta Suzuki 1969. No se cuanto tardara, pero estará corrigiendo poco a poco. Ojala les guste mas!

Próximo Capitulo 2.- La vida de Severus Snape