A/N: Bien, esta es una historia escrita en conjunto con mi amiga Michelle Bones. Básicamente es un reboot de su otra historia. Tendrá sus giros interesantes y explicaciones más simples que antes. Espero les sea de su agrado, no olviden dejar sus comentarios y opiniones acerca de esta historia.
Disclaimer: los personajes de Bones y X-Files le pertenecen únicamente a sus autores originales y a la Cadena Fox. Con esta historia no se pretende obtener ningún beneficio más allá del de entretener a las personas.
LA PRESA EN LA ABDUCCION
PRÓLOGO
-Booth, ¿estás seguro de esto? - pregunta Brennan levantando la vista de la computadora hacia el hombre vestido en traje frente a ella.
-Claro que sí, Bones, este es un buen momento para pasar un buen tiempo en familia, nosotros podemos pasar más tiempo con Parker y él puede apreciar un evento único.
-Booth, ¿En dónde viste ese anuncio exactamente?
-Está en todos lados, lo vi en la computadora, en el puesto de revistas, incluso lo vi en las noticias. Es un evento que no se repetirá en no sé cuantos siglos.
-Booth, ese tipo de noticias están en todas partes, la mayoría son estafas o eventos exagerados para llamar la atención de algunos ingenuos.
-¿Me estás llamando tonto? - dice Booth fingiendo estar ofendido por el comentario de su compañera.
-Finges ser un tonto todo el tiempo, me extraña realmente que creas en este tipo de cosas.
-Vamos, Bones, no te estoy llevando a Woodstock o a una secta satánica. Solo quiero que vayamos a las afueras de la ciudad a disfrutar de una lluvia de estrellas.
-No creo que sea buena idea, Parker solo tiene 6 años, es un clima helado y no sabemos que tan desolado va a estar allá afuera.
-Vamos, Bones - dice Booth poniéndose detrás de su compañera y comenzando a masajearle los hombros - deja de poner excusas para quedarte encerrada toda la noche trabajando. Ya hablé con Rebecca, ella está de acuerdo y Parker está más que emocionado por el hecho de poder pasar más tiempo con nosotros... - Booth baja un poco la cabeza y le da un beso en la mejilla - además, esto te va a servir de práctica para cuando tengamos hijos.
-Ya te lo he dicho varias veces, Booth... yo no... quiero... hijos... - intenta decir Brennan entre gemidos de placer por el tratamiento que su novio le está dando.
-Eso dices ahora, veamos si piensas lo mismo en un par de años. De momento quiero conformarme solo con mis dos personas favoritas.
-Está bien... - dice Brennan rodando los ojos y cediendo finalmente - iré contigo, pero solo porque Parker quiere que vaya.
-Puedes quejarte todo lo que quieras en el camino, Bones. Solo ven y disfruta de un pequeño paseo familiar...
MEDIA HORA DESPUÉS
-¿Ves que sí valía la pena venir, Bones? - dice Booth mientras coloca una sábana sobre el césped mientras Parker la ayuda con la canasta y algunas cosas que habían comprado para el viaje.
-Booth, estamos muy lejos de la carretera, y no hay nadie aquí.
-Es porque las luces de los autos y de la ciudad bloquean la visión del cielo nocturno - dice Parker tomando asiento junto a su padre - y mi papi dice que este lugar es conocido por poca gente, por eso nos trajo aquí.
La pequeña familia, simplemente se pone a disfrutar del momento y comienzan a servir la comida.
-¡Miren, ya empezó! - dice Brennan señalando al cielo al mismo tiempo que un par de estrellas fugaces cruzan el cielo.
-Parker, hay algo que queremos decirte... - dice Booth llamando al pequeño que arquea una ceja con interés al ver que su padre y su mentora están demasiado juntos.
-¿Sucede algo, papá? - Parker ya cree tener una idea de lo que le van a decir, pero primero quiere escuchar lo que van a decirle.
-Parker, sé que esto puede ser muy repentino, ¿pero que pensarías si Bones fuera mi novia?
-¿Acaso no eran novios ya? - dice Parker decepcionado por la respuesta.
-Parker, ¿Acaso no estás de acuerdo? - pregunta el agente al ver la cara de decepción del niño.
-Claro que estoy de acuerdo, siempre quise que Bones fuera mi mamá, pero...
-¿Pero...?
-Pensé que ibas a decr que tenía un hermanito en camino.
-Parker... - dice Brennan en un susurro, entendiendo finalmente a que se refería el niño, mientras Booth está más rojo que un tomate.
Antes de que el agente pudiera abrir la boca, un fuerte sonido llama la atención de los tres, seguido de una luz cegadora que los envuelve y hace que pierdan la consciencia...
6 AÑOS ATRÁS
-Mulder, no sé a donde vas con todo esto… - dice una mujer menuda, con los ojos vendados, pelirroja y con seis o siete meses de embarazo – ya llevamos dos horas de camino en la cafetera y no me quieres quitar esta estúpida venda. Si esto es para proponerme matrimonio, déjame decirte que no me sorprendes en lo más mínimo…
-Ya te dije que es una sorpresa, cariño – dice el hombre que acompaña a la mujer, ambos de unos treinta años. Su altura, cabello, ojos y complexión contrastan a la perfección con los de ella, pero aún así él la ve como su media naranja.
-Mulder, me duele la espalda, los pies me están matando, tengo hambre y Johnny está sentado sobre mi vejiga, o me quitas esta estúpida venda ahora o sufre las consecuencias.
-Por supuesto, no quiero hacer enojar a una embarazada caníbal que quiere orinar sobre tu cadáver… - dice Mulder medio en serio y medio en broma mientras empieza a desatar la venda que cubre los ojos de su compañera
-Guarda tu sarcasmo para después de… que… te… mate… - los verdosos ojos de la agente se abren como platos ante la enorme casa que se impone frente a ella: tres pisos, un enorme patio frontal, espacio para dos automóviles. Todo ubicado en un amigable y acogedor barrio de los suburbios- Mulder… ¿A quién mataste para comprar esta casa?
-A nadie cariño – dice el agente con una sonrisa de buena gana al ver la expresión de sorpresa de su novia.
-¡Mulder! ¡Esta casa vale una fortuna! ¡Tú mismo viste el precio! ¡Fuiste tú el primero en quejarse de ello!
-Dije que el precio era demasiado elevado, no que no quería comprarla – Mulder empieza a buscar algo en los bolsillos y saca un llavero con forma de ovni del cual cuelgan un par de llaves – oficialmente esta casa es de los dos, pagada en su totalidad con los ahorros que Mamá me heredó.
-Fox… ¿Gastaste todos nuestros ahorros en una casa?
-No es cualquier casa, Dana, es nuestra casa. Tuya, mía y de Johnny… - él quiere agregar "más los que vendrán", pero el diagnóstico de los médicos que examinaron a su compañera años atrás fue muy claro: esterilización absoluta por métodos artificiales.
El bebé que ella carga ahora en su vientre es su pequeño milagro. Tomó a todos por sorpresa, incluidos los médicos. Es una verdadera lástima que él no estuviera presente con ella cuando lo supo… Pero quiere compensarlo, quiere darle a este pequeño todo lo que no pudo darle ni a Emily ni a Samanta…
-Mulder, ¿Vamos a entrar o no? Ya te dije que quiero entrar al baño…
-Claro, cariño, ¿quieres hacer los honores?
-Dame esa llave de una maldita vez… - la mujer menuda arrebata las llaves de las manos de su novio al primer intento, al ingresar ahí su sorpresa se agranda más al verla totalmente amueblada, totalmente opuesta a como la vio un mes atrás – Mulder… ¿cuánto tiempo llevas con este proyecto exactamente?
-Hice la oferta el día después de ver tu cara de decepción. Sabía cuanto querías esta casa, yo también la quería. Pero sabíamos que no podíamos pagarla…
-Y ahora estás en la quiebra total…
-Siempre he vivido al día, Scully, nunca necesité los ahorros de mi familia para vivir cómodamente… Además, tengo mano de obra barata a la mano. Los Pistoleros Solitarios se ofrecieron voluntariamente al enterarse de que esta casa era para ti y para el bebé…
-Yo no definiría dormir en el sofá porque apartamento está lleno de basura y periódicos por todos lados como "vivir cómodamente, Mulder.
-Sabes a que me refiero, pero eso ya está en el pasado, cariño, ¿Quieres ver la habitación de Johnny?
-¿Qué si quiero verla? ¡Se ve que no me conoces bien, Fox!
-Te conozco mejor que tú misma, Dana… -Mulder sonríe al ver como su novia asciende por las escaleras a toda velocidad, para tener 10 libras de peso extra, se mueve como si el bebé no estuviera ahí - ¿Qué pasa? ¿Por qué no entras? – pregunta el agente al ver a la mujer ahí parada con la mano en la perilla, sin mover un solo músculo.
-¿Alguno de los Pistoleros se volvió adicto al cigarro? – pregunta Scully, pero al ver el rostro pálido de su novio, la respuesta llega de inmediato.
Scully retrocede unos pasos mientras Mulder saca su arma. Casi bota la puerta de una sola patada al ingresar al cuarto y ver a un anciano parado en medio de la habitación, fumando un cigarrillo y viendo con una sonrisa al agente que lo ve con furia.
-¡¿Qué hace aquí maldito bastardo?! – pregunta Mulder sin dejar de apuntar el arma a la cabeza del hombre – Acaba de entrar sin permiso a la casa de dos agentes federales, no hay manera de que escape de esta…
-La puerta estaba abierta, Mulder… - dice el hombre apagando el cigarrillo al ver que la compañera del agente entra finalmente en la habitación – y buenas tardes a ustedes también.
-¡Cierre la maldita boca, imbécil! ¡Salga de aquí ahora mismo si no quiere que lo descuartice con mis propias manos!
-Cálmese por un momento, Agente Scully, vengo a ofrecerles un trato…
-¡No va a ofrecernos nada, con un demonio! ¡Ya hemos tenido suficiente! Y si no entiende sutilezas, le daré el mensaje fuerte y claro: no queremos tratos ni negociaciones, si nos vuelven a secuestrar…
-¿Qué hará exactamente, Agente Mulder? ¿Demandarme? ¿Matarme? Nada de eso ha funcionado antes, ni funcionará. Vengo a ofrecerles algo, mis superiores se han dado cuenta de que todo este proyecto ha sido en vano, así que les vengo a ofrecer un trato que estoy seguro de que satisfará a todas las partes involucradas.
-¿Qué pasará si no aceptamos? – Mulder sabe la respuesta, pero quiere escucharla de boca del hombre que tiene frente a él.
-El pequeño Johnny jamás conocerá a sus verdaderos padres, y en el mejor de los casos, sufrirá el mismo destino que Emily…
Mulder solo presiona más el gatillo, el solo hecho de mencionar ese nombre hace que la sangre de ambos agentes hierva.
-Jamás vuelvas a mencionar ese nombre, ¿me escuchaste? Tú me das asco. Tú, tus superiores, tus "aliados".
-¿Es que aún no lo entiendes, hijo? - dice el hombre paseándose por la habitación y viendo con detalle la cuna del bebé nonato - nosotros trabajamos para un bien mayor.
-Déjame adivinar, "Papá" - dice el agente con total sardonismo haciendo énfasis en la última palabra - la extinción de la raza humana.
-Y la de ellos, Fox. La única forma de hacerlo es creando un espécimen híbrido perfecto. Y el bebé que la Agente Scully carga dentro de ella es lo que más se ha acercado...
-¿Qué es lo que quieren exactamente? ¿Llevarse a mi hijo por un año y hacerle cuantos experimentos quieran? ¿Esperar a que llegue a la mayoría de edad y que decida por su propia cuenta? - dice Scully tomando la palabra y colocando ambas manos sobre su abultado vientre, John capta la tensión de su madre y corresponde con una serie de patadas a sus costillas - ahora no cariño, ¿no ves que mami está ocupado con el señor malvado? - dice la agente en voz baja al niño que se detiene de inmediato - están equivocados Spender, no vamos a ceder, y es una decisión final.
-No necesitamos al niño... - dice el hombre señalando al vientre de la agente - es un tratamiento experimental aún en los hospitales más avanzados aquí en la Tierra, pero nosotros nos las podemos arreglar con el otro producto que usted tiene en su vientre, Dana.
-¡¿Estás esperando gemelos?! - pregunta Mulder sin entender del todo de que demonios está hablando este hombre que dice ser su padre real -¡¿O es que acaso usted sabe algo que nosotros no?!
-Se refiere a la placenta, Mulder... y Spender tiene razón, el tratamiento con células madre les permitiría hacer avances genéticos sin precedentes...
-Sólo pedimos dos cosas, la placenta del bebé después del parto, y una muestra de esperma del Agente Mulder. No es que lo vaya a necesitar muy pronto...
-¡Fueron ustedes quienes la dejaron así! ¡Maldito bastardo!
-Dana no es 100% infértil, Fox. Creí que ya lo habías entendido en cuanto la viste de nuevo...
-Vete ahora antes de que me arrepienta de no haber jalado el gatillo...
-No me busquen, yo los encontraré cuando llegue el momento...
Y tal como llegó, el hombre de traje desaparece por la puerta.
-¿Le crees algo de lo que dijo?
-Ni una sola palabra, Scully...
-Mulder... ¿Vas a pedir la pizza o no? - dice Scully viendo a su novio con ojos de perrito regañado.
-Claro, lo que sea para mis dos personas favoritas... - dice agachándose para darle un beso en el estómago y recibir una patada a cambio - ¡Calmado campeón! ¡Ya voy a pedir la pizza!
-¡Sólo hazlo antes de que tu comentario se convierta en una predicción!
-Ya voy, ya voy... - responde el agente sacando su celular - bien dicen que de tal palo tal astilla... madre e hijo tienen el mismo genio...
CAPÍTULO 1
-¡Parker! - Booth despierta de un salto, sudando frío y con evidente preocupación en el rostro. Mira a su lado, su esposa también se ha despertado, obviamente por el grito que ha pegado de pronto.
-¿Otra vez ese sueño, Booth? - pregunta la mujer de cabello rojizo al hombre frente a ella.
-He tenido el mismo sueño desde hace quince años, Bones, cada vez se vuelve peor y más vívido.
-Booth, solo es un sueño, los chicos están bien - dice la mujer sobando la espalda de su esposo para intentar tranquilizarlo.
-No quiero que nada les pase, Bones. No lo voy a permitir mientras siga con vida. Ellos no merecen sufrir el mismo destino que él.
-Booth, ya habíamos hablado de esto... - dice al ver a su marido pararse y recoger la bata
-Quiero verlos, Bones, con mis propios ojos. Solo así volveré a la cama...
Booth avanza por el pasillo de la casa hasta la puerta del fondo, la habitación que comparten Joseph y Hank, los gemelos con quince años recién cumplidos. Ambos están profundamente dormidos y respirando con normalidad, en camas separadas por obvias razones.
-¿Ves? siguen ahí, dormidos, como los dejaste anoche.
-¿Y Chris? - dice Booth volviendo a ver a su esposa. Ella asiente con una sonrisa de confianza mientras abre la puerta contigua.
Una habitación decorada por una adolescente normal se haya tras ella, a sus catorce años, Christine es una amalgama perfecta de sus padres. Mandona y con la ingenuidad e inteligencia de su madre, pero con el coraje y el corazón de su padre. Los gemelos se parecen física y mentalmente a Seeley, pero los tres heredaron los ojos de ella. Christine es casi idéntica a su madre físicamente.
-Bones, sé que esto puede sonar ridículo, pero no sé que haría si algo les pasara a ellos también. No voy a permitir que la historia se repita. No después de lo que pasó con Parker.
-No puedo negar de que el peligro aún existe, Booth, pero si de algo estoy segura es de que no estás solo en esto. No eres el único que intentará defender a nuestros hijos...
Brennan solo mira a los adolescentes, mientras acaricia el pecho de su esposo. Parece que fue ayer cuando apenas estaban en la cuna. Ahora son adolescentes hechos y derechos... en lo que cabe.
-¿Papá, Mamá? - pregunta Christine comenzando a despertar al notar que alguien la está observando - ¿pasa algo?
-Nada cariño, solo quería asegurarme de algo...
-¿Otra pesadilla, cierto?
-Me conoces demasiado bien... como tu madre - dice el agente sentándose a los pies de su hija mientras juega con su cabello.
-Quizás estás nervioso por la cita de mamá.
-Solo es un exámen de rutina, cariño, el que el Jeffersonian pide al año - dice Brennan entrando también - solo vuelve a dormir, que mañana tienes escuela.
-Son las 7 de la mañana, Mamá... - dice la joven señalando al despertador junto a su cama - ustedes ya deberían de estar preparándose si no quieren llegar tarde.
TRES HORAS DESPUÉS, EDIFICIO J. EDGAR HOOVER
"Genial" - piensa Booth mientras va caminando por los pasillos del edificio hasta la entrada de su oficina - "primero se nos dificulta el caso que tuvimos la semana pasada, las pesadillas recurrentes y ahora esto..."
Booth golpea la pared con fuerza, sabe que alguien le va a llamar la atención por ello, pero poco le importa. Cuando supo que su esposa estaba esperando gemelos, sintió que lo estaban recompensando por la pérdida de su primogénito, pero esto...
-¿Problemas en el paraíso, murciélago de fruta? - dice una voz a su izquierda, un hombre 10 años mayor que él y vestido en el traje de regla para los agentes del FBI lo mira con tono burlón.
-Cállate E.T., y regresa al calabozo de donde saliste - dice Booth sin voltear a ver a su viejo "amigo".
-Soy más humano que otra cosa, Seeley.
-Eso podría decirlo yo. Tú estás mezclado con no sé que cosa mutante. Déjame en paz antes de que te mande al sótano de un solo golpe...
-Claro, al menos yo no tengo una camada de adolescentes que se podrían comer a toda la escuela entera si así lo quisieran.
-No, si el tuyo solo los mataría con los rayos que saldrían de sus ojos
-Lo estás entendiendo todo mal Seeley. Pero cree lo que quieras... Al menos yo sé controlar a mi equipo. Tú dependes de una forense que ni siquiera está bajo tu mando, una antropóloga que es la única que puede tener a los internos bajo control. Y mi favorito personal: un pato que se cree doctor.
-Se llama trabajo en equipo, Fox. Algo de lo que estoy seguro tú no has escuchado en años.
-¡Oye! Yo no tengo la culpa de que la mitad de mis amigos estén tres metros bajo tierra...
-O pasando la atmósfera. Por eso no asignan más agentes a tu "departamento" - Booth está hastiado de este hombre, todos los días lo ve en el pasillo cuando tiene que ir a rendir cuentas con el subdirector, pero hoy está más molesto que de costumbre - bueno Mulder, fue un disgusto hablar contigo, pero tengo trabajo que hacer. Algo que te convendría hacer de vez en cuando... Antes de que te llame la nave nodriza.
-Pff. Tú no soportarías más de una hora en esa oficina haciendo mi trabajo.
-¡¿Trabajo?! ¡Te la pasas todo el bendito día jugando solitario en tu computadora o lanzando lápices al techo! ¡La única que trabaja ahí es tu compañera! ¡Por algo tu esposa es tu jefa!
-Habemos un total de cuatro personas en esa oficina, Booth.
-Claro, había olvidado que con excepción de Dana, cada uno de ustedes está más loco que el otro. Bien dicen que en tierra de ciegos, el tuerto es rey...
-¿Acaso crees que puedes manejarla tú? - Booth piensa la respuesta por un momento, pero responde al momento.
-Con los ojos cerrados, Spooky. ¿Por qué?
-¿Tienes experiencia paranormal, cierto?
-¿Pasar un día entero contigo cuenta?
-Te propongo una pequeña apuesta...
-Estoy en rehabilitación, Spooky.
-Entonces míralo más como un reto desafío amistoso.
-Suelta la lengua, Fox, antes de que te la arranque de cuajo.
-Un caso, algo así como "Cambiemos Esposas". Solo que con nuestros respectivos equipos.
-Sueña con que te cambiaría a mi esposa. Aparte de que Temperance me mataría sin piedad.
-¿Te acobardas?
-Tú irías después...
-Tienes razón, Seeley, no eres un murciélago de fruta, eres una galiina. De ahora en adelante te llamaré gallina. Cloc... Cloc... - empieza a decir Mulder imitando a dicho animal para fastidio de su amigo.
-Fox... - el agente ignora al otro siguiendo con su imitación - oh, está bien, solo cállate, déjame pensarlo por un momento. Quizás no sea tan mala idea...
-Cloc... - Mulder carraspea al darse cuenta que sigue hablando en gallinés - ehem, digo, ¿En serio?
-En serio, quiero ver como Bones te parte en dos en frente de todo el laboratorio... - dice booth con una mirada inquisidora y sonrisa maléfica.
-Oh, claro, señor perfecto, ya quiero ver como lidias con Dana...
-¿El intento de Hobbit?
-Ella no es una santa paloma, Seeley...
-Lidio con Hodgins y con Bones a diario, ¿Qué tan malo podría ser una combinación de ambos?
-¿Quién es el Hobbit? - una voz femenina a la espalda de Seeley hace que sufra un escalofrío.
-¿Da-dana? - dice Booth tragando en seco -No te había visto, ahí, parada, detrás de mí...
-Buenos días a ti también - dice la agente con una mirada de querer matarlo, suerte para él, la mujer menuda ya está acostumbrada a las burlas por su altura - estoy más que feliz con mi estatura, Seeley, muchas gracias por recordármela.
Mulder se ríe sin disimulo al ver a todo un vampiro profético temblar como gelatina ante su esposa de metro y medio.
-¿Y tú de que te ríes, Fox?
-Oh, de nada, cariño, de un pequeño juego que descargué ayer para mi computadora. Está basado en el programa "Cambiemos Esposas".
Scully mira a su marido con extrañeza. ¿De cuando a acá él está interesado en algo que no involucre extraterrestres o cosas paranormales?
-Sólo a ti se te ocurren esas cosas escabrosas, Spooky.
-Ese es mi trabajo, cariño - dice dándole un beso en los labios - lo siento, Booth, pero el deber me llama, ¿Qué me dices? ¿Empezamos mañana?
-Vas a perder, Spooky. Temperance tendrá tu cabeza en una estaca para el final del día.
-La misma advertencia va para ti, murciélago de fruta...
