El problema de Murasakibara

Murasakibara Atsushi tenía un problema.

¿Que problema? Os preguntareis, pues uno de muy complicado.

Todo empezó un día en el que se habian reunido todos los milagrosos, como diría el gigante; Aka-chin, Kuro-chin, Kise-chin, Mine-chin, Mido-chin y él. Habian acordado verse y salir a pasear, tomar algo, quizás hacer algunas canastas en la cancha del parque en memoria a sus tiempos en la secundária etc.

Lo que pasó fue lo siguiente: quando llegaron al parque resultó que no podian entrar porque toda la plaza estaba en obras y entonces tuvieron que buscar otro parque. Todos estaban pensando que hacer hasta que el modelo empezó a hablar.

-¡Ya sé!

-¿Que sabes Ryouta?- Questionó el ex capitán de Teiko.

-Estaba pensando donde podríamos ir cuando se me ha ocurrido una idea.

-¿Y desde cuando tienes cerebro para pensar Kise?-Se mofó el as de Tōō.

-¡Aominecchi hidoi !

-Aka-chin, vamos al parque que dice Kise-chin.

-Kise-kun guianos porfavor-Pidió amablemente el jugador fantasma.

-¡AAAAAHHHHHHH! ¡Kurokochi, me has dado un susto de muerte!

Caminaron durante unos 5 minutos y llegaron.

-Quiero subir-Dijo Atsushi y se fue corriendo a sentarse.

-¡Cuando te lo diga empuja Mine-chin!

-¿Y porque diablos tengo que hacerlo yo?-Replicó Aomine.

-Aomine-kun, tu eres el más grande y fuerte de todos nosotros sin contar a Murasakibara-kun y por ende te será más comodo.-Explicó como si nada Tetsuya.

-Concuerdo con Kuroko-Opinó el peli-verde mientras limpiaba su objeto de la suerte ese día.

-¡Que te jodan Tetsu y a ti también Midorima!-Bufó-¿Y porque teneis que estar mirando todos?

-Vamos Daiki ni que fuera esta tu primera vez- Se mofó Akashi.

-¡Ovbio que no, però para algo tiene piernas ese gigantón!

-¡AAAAAAAAAAAA! ¡DUEEEELEEEEEE!-El devora-dulces empezó a llorar.

-¿Que te pasa Murasakibaracchi? ¿Midorimacchi es tan amargado que te ha hecho llorar?

Entonces se fijaron en la escena, escena que no habian visto por estar demasiado ocupados dicutiendo, Murasakibara era tan alto que se chocaba contra la barra de metal cada vez que se columpiaba.

Así es el problema de Murasakibara era que su estatura no le permitía columpiarse puesto que se estampaba contra el metal que sujeta al columpio.

FIN