Disclaimer: Nada es mío, si fuera mío probablemente no estaría escribiendo aquí... tendría mucho dinero, un jeep, un mustang y una casa en Londres. Como no es así, aquí estoy yo, sin nada de lo anterior y sin llamarme J.K Rowling a quien sí le pertenencen estos personajes.
¡Hola! Pues éste es mi primer fanfic que contiene algo de slash, batallé muchísimo para hacerlo T.T, pero lo logré y aquí está el resultado.
Dedicatoria: Este fanfic es para Christian y Kristina (pequeñas letrinas como yo) que me están metiendo en el mundo del yaoi, me disculpo porque no pude hacer gran cosa, pero es con mucho, mucho, mucho cariño para ustedes. Las quiero!!! :)
Primavera
Remus Lupin piensa que lo único que le queda es el olvido, pero no llega, lo que hay es recuerdos, nostalgias, si alguien le hubiera dicho en aquellos tiempos que él sería el último merodeador no lo creería posible, los otros eran más fuertes (excepto, tal vez Peter, pero eso ya es otra historia).
Sirius… lo vio caer sin poder hacer nada, le dolía, pero le afectaba más darse cuenta que no sentía lo mismo que hace ya quince años.
"James…" sus labios susurraban su nombre, por las noches aún lo llamaba, sabiendo que no llegaría, en realidad incluso antes ya no era suyo, desde que prefirió el cabello rojo y los ojos verdes.
Pero más atrás en una época que ya se le antojaba muy lejana ellos se habían encontrado; James porque Remus era frescura, era un soplo de aire, la contraparte de Sirius que era una tormenta de fuego, así cuando estaban juntos Prongs encontraba en su amigo la serenidad que algunas veces necesitaba; Remus porque James era alegría, era las ganas de vivir que él no tenía, era un rayo de sol en un día nublado.
Juntos Remus y James, Prongs y Moony eran como un día de primavera, tranquilo, soleado. Tal vez por eso su relación duró tan poco, lo que duran las flores antes de marchitarse y morir.
En otra estación probablemente no habría funcionado, pero todo fue perfecto, ellos eran el clima, la respiración de uno se sentía como la brisa primaveral sobre la piel del otro, sus besos se sentían como el rocío mañanero; en ese momento Remus fue feliz, la vida le sonreía y todos lo notaban, ahora también el resplandecía, no decía la razón, pero no importaba, estaba acostumbrado a ocultar cosas y así siguieron durante casi cuatro meses… Hasta que un día James vio a Lily Evans de una manera diferente, ahora él la buscaba, la observaba, escribía su nombre; y como un acuerdo tácito, sin decir nada, sin despedirse, la primavera terminó dándole paso a James y Lily, lo cuál no duró sólo el verano, sino también el otoño, el invierno, la primavera y otra vez, hasta que terminaron los dos juntos, casi al mismo tiempo en el Valle de Godric, dejando un hijo.
Harry… Tan igual a James, pero al mismo tiempo tan diferente, Sirius a veces parecía casi confundirlos, pero Remus no podía , al revés, veía los ojos del muchacho y no veía a James, no eran café tierra, café chocolate, café canela; eran verde hierva, verde reptil, verde… Como la envidia que no podía evitar sentir detrás de la sonrisa que siempre mostraba.
Pero ahora ya no quedaba que ocultar, ya no había sonrisa, ni falsa ni verdadera, ahora sólo había muerte, la muerte que él espera, pero no llega.
Andrea S.
Hola otra vez, espero que le haya gustado... me preocupa un poco repetir palabras y cosas técnicas, además de que espero no haber usado muchos lugares comunes. Cualquier cosa que no se entienda o que no les guste me dicen.
Gracias por leer!
Y ya que están por aquí dejen reviews, por favor...
