#Los personajes que aquí se muestran no me pertenecen.
Sentada en la silla frente al ordenador mi cabeza sólo me decía que saliera de allí cuanto antes ya que aquellas palabras de Jade cada vez me hacían más daño.
-Tengo que irme. Me levanté y subí las escaleras metiéndome en el baño. Tomé aire tres veces para relajarme ya que estaba a punto de llorar. Acto seguido Jade vino detrás de mí.
-¿Qué te pasa?
-Nada.
-Vamos, ¿qué te pasa?
-Está bien, ¿quieres saber qué me pasa? Lo que me pasa es que estoy enamorada estúpidamente y perdidamente de ti, estoy enamorada de alguien que jamás tendré y que hace poco más de un mes me dejó claro que una relación con un alumno era inviable e imposible, por no mencionar que te gustaban los hombres. Créeme que estoy intentando guardar con llave mis sentimientos pero es difícil. Has sido lo más maravilloso que me ha podido ocurrir en la vida y no es fácil dejar atrás a aquella persona que te ha dado tanto en tan poco tiempo, te ha hecho ver que la vida también puede tener un significado y que puede llegar a ser hermosa. Tengo que dejarte ir y no quiero yo… simplemente no puedo.
Hubo un silencio corto entre las dos.
-Tal vez no tienes porqué dejarla ir.
La miré desconcertada por sus palabras.
-Yo… Jade…
-Shh…
De repente sus labios conectaron con los míos y ese mismo zoológico que he estado sintiendo estos 2 años se multiplicó, después nos separamos y con voz agitada contestó.
-Mira… yo también siento algo por ti pero no podía permitirme sentir algo más allá de lo profesional por un alumno pero contigo todo fue muy rápido. Y sí es cierto me gustaban los hombres y por eso también tuve miedo porque nunca había sentido nada más que cariño o aprecio hacia una mujer. No voy a negar estos sentimientos porque me estaría engañando de nuevo a mí misma. Yo también te quiero…
Sus palabras quedaron grabadas en mí y como dos adolescentes volvimos a besarnos para después volver a clase.
