No te puedo olvidar

Entro junto con sus amigas a un bar, aunque llevara mala cara intentó pasársela bien. No podía creer que le hubieran convencido de salir. Vio como Sakura, Ino, Tenten y Matsuri pedían una mesa que les dejará ver todo el local a sus anchas, según ellas sería noche de chicas; conociéndolas era más que nada el encontrarle nuevo novio. Suspiro por octava vez en la noche, estaba harta de que le intentarán hacer citas a ciegas, estaba harta de ello, que era lo que sus amigas no entendían de que quería estar sola con su depresión. Seguía extrañado a aquel peli negro con el que había tenido una relación de cinco años. Todavía no entendía porque habían terminado, sólo estaba consiente de que ya no existía nada entre ellos. Seguía dándole la vuelta al asunto; estaba consciente de que ambos eran bastante celosos con el otro, y no era para más. Él era uno de los jóvenes más atractivos de último semestre de la universidad, alto, atlético, con una cabellera negra alborotada y unos ojos tan negros que parecían que podían leerte el alma, al mismo tiempo en el que te podías ahogar en ellos. Ella igualmente, era alta, con un cuerpo de infarto que había hecho a varios del campus tener una hemorragia nasal severa, su cabello largo que parecía ser azul y unos ojos de un exótico color entre gris y blanco.

Ninguno pasaba desapercibido entre su sexo opuesto, cosa que de vez en cuando los molestaba, no podían estar dos minutos tranquilos sin que alguien les coqueteara aún teniéndose uno a lado del otro. Sabía que había sido la última escena de celos que le había hecho lo que terminarán. El encontrar a una de sus compañeras de facultad restregándosele a su novio como si fuera una lombriz pudo más que ella. Lo había dejado pasar hasta que ambos se reunieron en el departamento, ahí dejo que todo saliera de control, se insultaron demasiado lastimándose sin pensarlo. Ella había optado por irse, sabía que necesitaba estar alejada de él por un tiempo y sus amigas la ayudarían a no quebrarse en la decisión. Y ya teniendo tres meses sin haberlo visto era el colmo que ya le quisieran buscar un nuevo prospecto.

-Hinata.-Sakura le sacudió el hombro.-¿Que te parece ese rubio que no deja de voltearte a ver desde que llegamos?-

La nombrada volteo a ver en dirección a la que su amiga veía. Lo examino con cuidado, no estaba nada mal, además tenía unos ojos azules muy llamativos, pero estaba harta de la situación, no quería salir por el momento con nadie, quería estar sola y poder pensar aunque fuera un momento.

-No.-dijo secamente.

-Vamos Hina. Haz rechazado a todo hombre que te voltea a ver o se te acerca.-

-Por el simple hecho de que no quiero salir con nadie. Que todas ustedes tengan a su novio no significa que quiero uno ahora. No en este momento.-dijo sintiendo como sus ojos se llenaban de lágrimas que no dejaría salir.-Yo…-se mordió el labio.-yo sigo queriendo a Sasuke.-

-Hinata. Sabemos que no ha pasado mucho desde eso.-Ino le tomo la mano.-Es sólo por el hecho de que ya no queremos verte así, queremos que sonrías por lo menos una vez en estos días.-

-Yo…-no sabía que decir.

-No tienes una idea de las ganas que me da de irlo a golpear, no soporto verte tan mal.-

-No lo hagas.-la volteo a ver con reproche.-Creo…sería mejor que los dos arreglemos esto…algún día.-

-¿Hasta cuándo Hinata?-le reprocho Tenten.-No pueden verse sin que ambos tomen caminos diferentes o desvíen la mirada. Uno de los dos debe de intentarlo.-

-Algún día lo haremos. Sólo dejen que las cosas fluyan y dejen de buscarme compañía. No la necesito.- dijo tomando su bebida.