Bueno, primera vez que comienzo una histporia publicandola acá (o sea, las que publiqué antes ya estaban en otros foros :P) Y... esta es la primera historia que escribo de pokémon y esta pareja que me formó un trauma infantil al no concretarse jamás en esta eterna serie.

El asunto es que jugando pokemon heart gold se me ocurrio retomar una de las series que en mi infancia me tuvo mas enviciada y aqui me tienen, con un pequeño juego de cartas entre una dse las parejas que mas quiero en el mundo del anime =).

Bueno, sin nada mas que decir, me despido diciendo lo típico:

Pokemon no me pertenece, es de Nintendo, y la serie de Satoshi Tajiri

Ciudad Celeste, 16 de abril de xxxx.

Estimado Ash:

Sé que es extraño que te escriba después de tanto tiempo ¿Cuánto ha pasado, 5 años? Es increíble que aun tenga la imagen clara de cuando emprendiste el camino hacia tu nuevo viaje, y esta claro que tras ese emprendiste otro y otro más; ¡vaya, como se nota que nunca puedes quedarte tranquilo en un solo lugar!

Bueno, supongo que sabes que por fin logré que mis hermanas se quedasen en casa y se hicieran cargo del gimnasio y aproveché para comenzar un nuevo viaje; bueno, quería perfeccionarme fuera de acá, tu sabes, pelear con entrenadores con algo mas de experiencia que aquellos principiantes que iban al gimnasio. Además pensaba que, con algo de suerte podría encontrarte en y quien sabe, recordar viejos tiempos cuando aun éramos unos niños y viajábamos capturando pokémon y venciendo al Equipo Rocket ¡es verdad!, en un pequeño pueblo me los encontré. Fue extraño verlos después de tanto tiempo, sobretodo viviendo en una casa y ya retirados. Claro, siguen siendo un tanto torpes, pero aceptaron alojarme en su pequeña hostal (si, aunque no lo creas, se ganan la vida honestamente). Obviamente me preguntaron por ti, y como es lógico solo pude responder que estabas viajando.

¿No sería lindo reunirnos algún día Brock, los pokémon, tú, yo? ¡Pero he intentado tantas veces comunicarme contigo Ash Kepchum y parece como si te tragara la tierra, y lo peor es que ni siquiera he recibido una llamada de tu parte estúpido ingrato!… Siempre es lo mismo, pero creo que serpia mucho pedir alguna señal de vida de tu parte; pues lo pokémon son todo para ti, les dedicas tanto, das tu vida a cambio de su propio bienestar… y creo que por eso te quiero tanto.

Pero bueno, la idea de esta carta es precisamente para que nos veamos, porque claro, ¿como mi mejor amigo va a estar ausente en el día más importante de mi vida? Si, sé que el gran Ash Kepchum es demasiado duro como para sentimentalismos y cursilerías, pero no creo que se reúse a hacer un pequeño sacrificio para poder asistir a mi boda ¿verdad? (sabes que si no vas, mejor ni te me cruces, que la furia de un gyarados no será nada comparado conmigo)

A decir verdad, supongo que ya sabes todo esto, lo anuncié hace meses y le encargue tanto a tu madre, al profesor Oak, a Tracy, Broak, incluso a Gary que te dijeran, pero no he recibido ni siquiera un miserable mensaje de felicitaciones. No creas que no me molesta tu enorme ingratitud, insisto, me hierve la sangre el comprobar lo ingrato que estas siendo conmigo después de años de amistad… pero a decir verdad, me entristece mucho mas de lo que me puede enfurecer; quería que fueras el padrino de la boda, pero la fecha se aproxima así que tuvimos que poner a Tracy en tu lugar.

En fin, cuento contigo. Pienso que quizás te molestó que no enviara la tarjeta de invitación directamente, ¡pero tu paradero nunca es algo fijo! De todas maneras, para que no tengas excusa señor gran maestro pokemón, la adjunto a esta carta que está dirigida a ti y solo a ti, sin intermediarios, sin dejar recados con terceros, por lo tanto ¡más te vale asistir! Además, Tom no te conoce, y créeme que le he hablado tanto de ti y de nuestros viajes, que sería estúpido que no te viera si quiera una vez, además te extraño mucho… no sabes cuantas ganas tengo de verte, de decirte un montón de cosas que no te dije antes y que a veces me armaba de valor pero… amigo… esa palabra pesa tanto, y es tanta la responsabilidad que lleva consigo, y aquello que tenemos desde que éramos niños es tan valioso que si abro mi bocota… no, no me hagas caso Ash, creo que con esto de la boda me pongo un poco nostálgica y ando mas sensible que otras veces… y tu odias los sentimentalismos… solo omite lo ultimo.

Ash…amigo; ven por favor. Obviamente pikachu también debe venir, también lo extrañado.

Un abrazo enorme.

Con cariño, Misty.

Pd: Espero que conserves la lonchera que te regale aquella vez, el anzuelo y aquello que te di hace 5 años. De más esta decir que si los pierdes ¡no vivirás para contarlo!.