Autor: Framba

Título: Conversatio

Resumen: El diálogo es ameno, siempre ameno cuando se trata de ti.

Pareja: Camus x Milo

Comentarios adicionales: Tenía muchas ganas de escribir algo corto sólo para empezar bien el año. Aquí está un pequeño drabble para iniciar a calentar motores y para festejar que llegamos a cien seguidores en Facebook.

¡Gracias por leer!

Fram

Conversatio

POV: Milo

Hay ocasiones en que es necesario hablar con uno mismo. Es necesario tener un diálogo interno para lograr entender y no perderse en la inmensidad del universo; hay que procurar intentar analizar y descifrar el microcosmos. Este microcosmos que se traduce en mi realidad inmediata, es decir, la intervención que tienes en mi mundo.

Pienso que últimamente me la paso hablando de ti conmigo mismo.

El diálogo es ameno, siempre ameno cuando se trata de ti. Me cuento los encuentros que tenemos, sé que yo ya los conozco, estuve ahí, pero hay cierta magia en volver a relatar las emociones, en volver a ver las imágenes en la mente. Algunas ocasiones las imágenes avanzan en cámara lenta, muy lenta, con tal de volver a saborearlas, con tal de sentirlas por completo. Otras veces es necesario pasarlas rápido como para poder absorberlas en conjunto, para exprimirles el todo, para remarcar su importancia como una unidad de acontecimientos. Lo bueno de esta técnica es que se pueden volver a vivir una y otra vez estas imágenes dentro del cráneo sin que nadie externo diga algo al respecto.

¿Qué dirían los demás Caballeros si supieran lo que compartimos? La mayoría intuye que algo pasa, esta continua cercanía entre tú y yo no puede ser normal ni coincidencia. Sólo que nadie se atreve a decir nada en realidad. Lo dejan existir.

Nos dejan existir.

Existimos.

Juntos.

En ciertos momentos.

Los mejores momentos, me repito constantemente. Trato de compararlos con otros momentos del pasado, pero el pasado parece lejano, parece el de otra persona. Me esfuerzo por traer al presente los momentos en que no estabas, en que era sólo yo y el mundo, en que sólo era un niño tratando de convertirse en Caballero Dorado, pero parece esa otra vida.

Ahora en mi vida estás tú.

Sigo intentando no sonreír tanto al hablar de ti conmigo mismo. Claro que tienes defectos y claro que es complicado la mayoría de las veces, eres opuesto a lo que estoy acostumbrado y es difícil llegar a ese órgano que late en tu pecho, pero… tienes magia.

La magia que hace que todo alrededor se ponga en paz cuando estamos juntos. Ésa es tu magia, traer paz a mi mundo de batallas, a un mundo de guerras, a un mundo de poderes, de ver quién es el más fuerte. Me traes absoluta y sincera paz. No hay más. Estar contigo se siente como no tener que esforzarse, como no tener que aparentar, como no tener que pelear constantemente, sólo se trata de ser. Ser una mejor versión para llegar a ser como tú.

Hoy detengo el tiempo para hablar de ti conmigo, necesito detenerme y hablarme de ti. Me gusta escuchar la conversación que me provocas, es interesante, es divertida, es inteligente, algunas veces desesperante, algunas veces frustrante, pero otras muchas, la mayoría, es increíble; puedo pasar horas hablando de ti conmigo, trato de describirte y no alcanzo a narrar todos los detalles, me cuesta enumerar todas tus características porque cada vez hay una sensación distinta y también porque cada cierto tiempo, cambias favorablemente el discurso que tengo de ti. Llevo un rato dándome cuenta que mis conversaciones internas sobre ti siempre me sorprenden, siempre me llenan, siempre son infinitas.

No te acabes nunca, Camus, no te alejes nunca, me provocas palabras, oraciones, líneas de pensamiento. Eres tú, sin duda, mis letras favoritas.