Noragami no me pertenece, es propiedad de Adachi Toka.


~Gods and Half-Ayakashis.

Summary: Relatos de una chica con cola de gato y de un Dios de la Calamidad.


1.- A primera vista.

Había sido sólo un segundo, efímero, pasajero, en el que una mirada magenta y una zafiro chocaron.

Si el cielo hubiera estado en su contra, ellos habrían desviado la mirada, seguido su camino y nada habría cambiado en absoluto.

Al parecer, el cielo estaba de su lado.


2.- Persiguiendo recuerdos.

Hiyori se esfuerza, realmente lo hace, por recordar… sin embargo es en vano. Había un gato, uno pequeño, un autobús delante del que ella saltó y… algo más.

Algo más.

¿Alguien más?

El gato era la respuesta.


3.- Gato de la suerte.

Él estira la mano, olvidando por un segundo que Tomone ya no está ahí. Buscando una salvación, un apoyo, algo que lo ayude a sobrevivir. Y ella toma su mano.

Yato descubre tiempo después que eso fue más que una coincidencia –sí, mucho tiempo después de verla hacer un Jungle Savat–.

Ella estaba ahí para salvarlo.


4.- Dios.

—El destino te ha sonreído —dice él.

Hiyori se da cuenta entonces de que, a veces, el destino te sonríe de maneras extrañas. Como por ejemplo, hurgando en tu billetera e invadiendo tu privacidad.


5.- En el límite.

—¿En verdad eres un dios? —ella dice y Yato no puede esconder la irritación en su cara.

Él viene y va, sin ayudarla realmente, y Hiyori no puede evitar recordar a su madre, quien siempre le advirtió sobre los hombres inútiles.

Él es misterioso, descuidado e irritante. Y aquella noche, cuando apareció sobre ella, ¿Era olor a cerveza lo que impregnaba su aliento?

¿En verdad él era el indicado para salvarla?