Bueno… de regreso xD
Esta vez con un drabble de Bleach con motivo del reto "¡Feliz Año Nuevo, Ichigo"! del foro "La revolución de los fandoms"
Espero que les guste :3
Tanto la historia como los personajes de Bleach no me pertenecen, sino a Kubo Tite.
AQUELLOS DIAS
Y ahí estaba el Keigo Asano, esperando en una banca debajo de un árbol de sakura en el parque Tsubakidai miro el reloj por tercera vez en la tarde… 2:45 pm.
-Faltan quince minutos-
El castaño suspiro profundamente mientras diversos pensamientos inundaron su mente.
Su adolescencia había estado plagada de buenos momentos y los recuerdos que atesoraba en su interior eran muchos donde sus amigos junto con el eran los protagonistas.
Recordó la primera vez que vio a Ichigo Kurosaki, un chico que se notaba a leguas era un criminal, eso es lo que pensó al notar su tono de cabello…. Pero más equivocado no podía estar.
Al paso de los días se dio cuenta que el pelinaranja era un buen chico que solo era acosado por su aspecto de pandillero, pero tuvieron que pasar un par de semanas antes de poder dirigirle la palabra dando como resultado que Ichigo Kurosaki y él se volvieran amigos cercanos.
Pasaron unos meses para que el castaño supiera sobre el pasado tormentoso del pelinaranja y eso no hizo más que sentirse más cercano a él, la manera en que ellos convivían era un tanto extraña, el castaño siempre se encargaba de hacer "enojar" a Ichigo el cual respondía con un golpe o regaño, pero así era su amistad, dos amigos que se divertían haciendo idioteces.
Keigo sonrió y miro al cielo observando un globo color violeta… el mismo color que los ojos de esa bella y enojona mujercita: Kuchiki Rukia…
Tres años tenia de conocer a Ichigo, en todo ese tiempo en que convivieron, el castaño noto en varias ocasiones que el pelinaranja mostraba una mirada de tristeza… pero… todo eso cambio cuando conoció a la pequeña pelinegra… hubo muchos problemas después de eso.
Ichigo desaparecía por largos ratos, primero horas, después días e incluso semanas pero al final descubrió que todo eso se debió a algo muy grande: Ichigo Kurosaki era un shinigami un dios de la muerte.
Eso lo tomo por sorpresa y más cuando supo que el pelinaranja jamás volvería a ver a Rukia.
Dos años pasaron y en ese tiempo Ichigo volvió a tener esa mirada retraída de siempre, el castaño supo la causa de eso: Kuchiki Rukia.
Y un día sin avisar la pequeña pelinegra regreso y la alegría a los ojos del pelinaranja regreso…
El castaño suspiro y sonrió nuevamente…
Aun recordaba el día en que le dijo a Ichigo que no fuera idiota y le dijera a Rukia que la amaba, llevándose asó el último golpe que había recibido del pelinaranja.
Nueve años habían pasado desde ese día, nueve años desde que no había vuelto a ver a su amigo.
-¡Hey Keigo!-
El castaño escucho que alguien lo llamaba, volteo al instante y miro con alegría al hombre que lo nombro.
-¡Feliz año nuevo Ichigo!- Saludo el castaño al ver por primera vez en años a su amigo quien iba acompañado de la mano de una bella y pequeña mujer de ojos violetas.
….
¿Qué les pareció?
xD
Saludos a todos y a todas
Feliz año nuevo.