Disclaimer los personajes de esta historia pertenecen a Rumiko Takahashi. Sin embargo, la historia es originalmente mía. Todo esto lo hago sin ánimos de lucro.
Capitulo I : El accidente
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Era una noche de invierno, hacia mucho frió y mis padres cumplían diez años de casados, así que decidieron ir a cenar, sin importarles el frió llamaron a la niñera que me solía cuidarme, yo muy contenta ya que mi niñera era un amor, siempre me hacia jugar, aparte a mis padres se los veía muy felices, y si eso les ponía feliz a ellos a mi también me ponía.
Como a las 21:00 de la noche sonó el timbre de nuestra casa corrí las escaleras esperando ver a Juliet mi niñera, en efecto fue ella, así que mis padres les repitieron lo mismo de siempre como de costumbre ella ya se lo sabia al Roll de memoria, así que luego de dejarles lo números de teléfono se fueron. Y así comenzó mi noche mas alegre hasta al otro día.
Luego de que se fueron subimos a mi cuarto y comenzamos a jugar con mis barbies, al rato me dijo que debíamos bajar a comer y con gusto me fui, mientras comíamos me comentaba que había traído unas de mis películas favoritas La sirenita, así que comimos rápido, y mientras ella preparaba las palomitas yo acomodaba el sofá con las almohadas y unas frazadas por el frió, no se demoro mucho en hacerse las palomitas y vimos la película, cuando termino subimos a mi recamara me contó un cuento y quede dormida.
Al otro día cuando desperté la vi a Juleit muy deprimida, no entendía el porque así que le pregunte:
-buenos días-
-igual mente kag-
-pasa algo?-mientras me sentaba en la mesa
-si, paso algo que no creo que te agrade mucho- me decía mientras tomaba de mis manos –se trata de tus padres-
-que paso con ellos?-ya comenzándome a poner mal
-me llamaron desde la clínica avisándome que tuvieron un accidente, y que se encontraban en estado grave-mientras me decía ambas comenzamos a llorar, yo solo negaba con la cabeza, mientras sentía como me abrazaba, aunque no me era suficiente
-llora kag, estas en todos tus derechos- me decía mi niñera
-podrías llevarme hasta allá?-le pregunte mientras me secaba mis lagrimas
-si, claro-mientras suspiraba- ve a cambiarte quieres, yo solo me di vuelta y desgana comencé a subir mis escaleras, al plazo de 15 minutos, baje y Juliet ya estaba abajo esperándome con los abrigos de cada una.
Fue un viaje para mi gusto bastante amargo y largo, por momentos pensaba que me quedaría sola en este mundo, y eso era lo que mas me temía, yo solo observaba todo callada y cabizbaja, llegamos a la clínica, y tomada de su mano nos dirigimos hasta un pasillo con personas por doquier, en eso nos acercamos a un doctor a juzgar por su ropa
-disculpe doctor, estamos buscando a un matrimonio que tubo un accidente en esta madrugada-
-ustedes se refieren a la pareja Higurashi?- decía el doctor con una cara de lo mas común
-así es-le decía Jules
-familiares suyos-pregunto el doctor
-si-respondió ella
-bueno, lo que le debo decir es algo muy fuerte-en ese momento se quedo en silencio, mientras yo apretaba mas fuerte la mano de ella-el señor falleció apenas llego, y la señora esta fuera de peligro, pero deseamos tenerla unos días mas para ver como reacciona- yo solo me hice la fuerte mi padre siempre me repetía que fuera lo que fuera nunca debía llorar, así que solo trague saliva, y aunque me alegraba que mi madre estuviera viva, sentía como algo muy pegado a mí me era arrebatado de mis manos y eso si que dolía –cuanto lo siento-
-si, aunque yo lo siento mas por ella-decía mi niñera mientras me veía, yo solo miraba hacia abajo mientras recordaba todo y a la vez nada de lo que viví con mi padre
-supongo que es la hija-dijo el poniéndose a mi altura
-así es-respondió ella
-cuanto lo siento pequeña, pero si gustas te puedo llevas hasta donde se encuentra tu madre- yo solo respondí con la cabeza mientras me repetía que no debía llorar, y así llegamos hasta donde estaba mi madre, se encontraba sola, y me dijeron que pase sola, que luego entraría juliet, cuando entre cerré la puerta, y aunque no lo podía creer era como si mi padre estuviera con mi madre
-ven pequeña, no llores, aunque se que no lo estés haciendo, siento como si por dentro ya no quisieras vivir-
-pa… pa…-tartamudeaba y comencé a llorar
-tranquila hija mía, aunque ahora yo me valla protege a tu madre, que yo desde otro lugar las estaré cuidando a las dos-cuando termino de decir eso, me abrazo me dio un beso y comenzó a irse mientras yo arrodillada en el suelo solo decía en voz baja
-cuidare de ella, como todo este tiempo lo hiciste tu, pero no me puedes dejar sola, no ahora, no-y entre la oscuridad de mis pensamientos, recordé que mi madre se encontraba cercas así que me levante, le cogi la mano y me senté a su lado, paso tiempo hasta que alguien entro a la habitación
-ven, vamos kag, hay que descansar-me decía mi niñera mientras entraba
-no, me quedare con ella hasta que vuelva conmigo a casa, es una promesa que le hice a mi padre-
-ella, aunque no era su deber se quedo conmigo-hasta que ambas caímos rendidas al sueño
Al día siguiente
-mi pequeña, como estas?- me decía mi madre mientras me acarisiba la cabeza
-madre, bien, y mejor ahora que tu también te ves mejor-
-gracias tesoro, juleit-dijo mi madre asombrada
-buenos días señora-le respondía ella
-que hace usted acá-
-bueno kagome no quería regresar así que decidí quedarme con ella acá, y los doctores no se opusieron así que-
-gracias por tu amabilidad-respondió mi madre
-no hay porque, a por cierto no se si hice bien pero llame a su padre, ya debe de estar llegando-
-esta bien gracias, y mi marido-dijo mi madre con un tono de esperanza, pero no obtuvo respuesta mas ambas bajamos la cabeza-ya veo-
-lo siento tanta señora Higurashi-
-esta bien-dijo mi madre mientras una lágrima salían de sus ojos
-disculpe, se puede-decía un señor mayor de edad que en una de sus manos traía una canasta con flores, y unas golosinas
-abuelo-dije yo algo animado, ya que hace mucho que no lo veía
-mi nieta querida, hija, joven- saludaba mi abuelo
-padre, no debió molestarse en traer todo eso desde tan lejos-
-descuide quería hacerlo, estas mejor?-decía mientras colocaba la canasta en el suelo, y juliet recogía las flores y las colocaba en agua
-si padre, juliet puedes llevar a kag a casa a bañarse
-pero madre- y justo entro el doctor
-descuida linda, tu madre ya te alcanzara ya que en unas horas estará en alta- eso fue una noticia que en el rostro de todos los que estábamos dentro nos coloco una sonrisa
-de acuerdo si lo pode de esa forma esta bien, nos vemos madre, adiós abuelo-le decía mientras a ambos les daba un beso-gracias doctor-y a el también le di un beso
-gracias a vos hermosa-así que decidimos irnos
-ahora hija, dime que sucedió- le decía mientras se sentaba en la silla
-bueno sucedió así-
Flash Back
-bien, sube amor, volvamos a la casa antes que se nos haga mas tarde-decía el esposo mientras abría la puerta del auto
-si, vamos-le decía unas ves ya adentro de este, colocándose el cinturón
, y veía como el tan bien se subía
-estuvo muy rico la cena no lo crees así-decía el mientras ya una vez puesto su cinturón arrancaba el auto
-si, me gusto mucho, gracias por el regalo- le decía ella mientras observaba la pulsera de oro que de un lado estaba grabada y decía, eternamente juntos
-de nada, la frase la pedí yo que la colocaran, te gusta-le decía el mientras se paraba en un semáforo
-si, gracias-y le da un beso, luego de eso el semáforo se pone en verde, y eran los únicos que venían en la misma dirección de estos, y cuando iban a cruzar totalmente esa avenida doblo un auto de la nada a toda velocidad, y como no pudo frenar ya que estaba muy encima chocaron
Fin del Flash Back
-eso es todo lo que recuerdo, luego escuche el sonido de la ambulancia y fue cuando me desmaye totalmente-
-ya veo, sabes que-y no lo dejo terminar
-si, me dijeron las chicas, va en realidad me lo dieron a entender así, es verdad, dime, falleció-le dijo su hija mientras comenzaban las lagrimas asomarse a sus ojos
-si hija, cuanto lo siento-mientras lo abrazaba
-no es justo padre, no lo es, teníamos todo una vida por delante me regala esta pulsera, y en los momentos mas felices de nuestras vidas viene a suceder esto-
-ssshhh, tranquila, ahora solo hay que concentrarse en tu hija, mi nieta, que de todos es la que mas debe de estar sufriendo, ya que si no mal recuerdo era muy apegada a el, no es así?-le decía mientras aun la abrazaba y le pasaba su mano por su cabeza
-si, pobrecita, me imagino debió ser como una bomba para ella, pero-
-no digas mas, solo el tiempo ira solucionando esta herida que esta en sus pechos- mas el silencio se hizo notar en el cuarto
-disculpen, espero no molestar, pero ya se puede retirar cuando guste señora Higurashi-decía una enfermera, que entraba mientras le sacaba el suero de su brazo y de su mano derecha.
-gracias, padre puede llamar un taxi-
-si ya vuelvo, con permiso-y así fue a llamar al taxi, al ratito llego este y llegaron a su casa, al entrar era como si volvieran a entrar a la habitación de la clínica, el silencio era inevitable, aun así el abuelo llevo a su hija a su cuarto, y luego se dirigió a la habitación de su nieta
-se puede-decía mientras golpeaba la puerta, y esta a su ves se abría
-yo mejor me voy a mi casa, dígale a la señora que no me debe nada, que quizás luego venga, adiós señor- decía juliet
-yo le digo, muchas gracias joven, adiós-decía este mientras entraba a la habitación de la niña –mi nieta hermosa- le decía mientras se dirigía a la cama donde estaba ella recostada
-abuelo, venga siéntese a mi lado-le decía ella mientras pegaba unas palmaditas al colchón
-si querida-sentándose a su lado –dime, como te encuentras- le decía mientras tomaba lo que ella tenia en sus manos, la dio vuelta y era una foto de ella con sus padres
-bien abuelo, miraba la foto y recordaba lo que vivimos ese día, lo recuerdas abuelo
-si, fue ese día que los invite para que vallan a mis campos verdad-decía este tratando de recordar
-así es abuelo, ese día la pasamos muy bien todos, y aprendimos mucho sobre los animales, cuando me volverás a llevar-decía ella sin bajar lo brazos
-cuando tu madre este un poquito mejor, tomamos el primer tren queres-
-si, abuelo, yo mejor voy a prepararme unos sándwich, deseas-
-claro, de tus favoritos si es posible yo ya bajo en unos instantes veré a tu madre primero-mientras veía como ella salía corriendo alegremente de la pieza, y el tomo el mismo camino solo que mas lento, a su paso, y dirigiéndose a la habitación de al lado
-padre, como esta ella-decía la madre mientras lo veía entrar a su padre a su recara
-ella, bueno la verdad-decía el cabizbajo
-que, esta muy deprimida-decía ella bajando la mirada
-no en realidad, esta como si no hubiera pasado nunca, es como si evitara pensar en que el ya no esta, y solo piensa en los buenos momentos-le decía el mientras le acariciaba la mano
-supongo que es bueno-le decía ella mientras tomaba su mano
-si, por cierto le prometí que cuando te recuperaras iríamos a nuestros campos-
-como guste padre, ella en donde esta ahora-
-abajo comiendo sándwich-
-muy bien, yo descansare un poco más-
-como desees, adiós-y le dio un beso en la frente y se dirigió hasta la cocina
Y así fue como comieron juntos, y después subieron a la recamara, el le contó uno de sus cuentos favoritos, y ella al rato se quedo dormida.
Al poco tiempo su madre se recupero y fueron al campo a tratar de olvidar lo malo, para después de un largo plazo volver a las vidas comunes.
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Muy bien, por fin hago el primer capitulo, y no creo demorarme para el segundo, hice primero este para que comenzara a narrar mi verdadera historia, solo les quiero comentar, que no es una historia como las otras, en la vida de kagome no va a pintar todo en color de rosa, será algo triste, negra, incluso terminara perdiendo… pero eso se Irán enterando luego, a los capítulos los tratare de hacer largos, y la inspiración nacerá cuando tome el teclado jajaja, así que si me demoro es porque no me llego la inspiración, bueno a aquellos que les guste este fic y a aquellos que no me gustaría que me lo hagan saber, criticas también recibo, no me molestare, aparte es mi segundo fic, y este nada que ver con el primero, bien besos, gracias por tomar un tiempo para leerlo, chau
