Sheldon, Leonard y Howard, caminaban por los vacíos pasillos de la secundaria, querían promover la ciencia a las mujeres, desde sus raíces, jovenes estudiantes y entusiastas.
Al entrar al aula donde darian una charla, ven cinco filas de alumnas en charlando entre sí y alborotando todo, a excepción de una de ellas que se destacaba con su paz, sentada muy correctamente y atenta a su lectura.
Hemorsa y delicada, tenia rizos dorados y era la más alta.
Leonard empezó la presentación, nombrando a cada uno de ellos. Los ojos verde esmeralda de la chica se fijaron atentamente sobre Sheldon cuando lo presentaron, y rapidamente volvió su atención al libro con una sonrisa.
Las horas que disponían pasaron y durante su transcurso Sheldon no pudo evitar ver a esa muchacha y desviar la mirada cuando ella lo descubría observándola, como... una clase de juego... infantil.
Terminaron la charla con resultados poco alentafores y los tres se dirigían a la puerta cuando una dulce voz hizo que se voltearan.
"¿Doctor Sheldon Lee Cooper?" La chica rubia preguntó.
"Si, así es." Respondió el alto luego de un segundo, al darse cuenta que realmente habia dicho su nombre.
{...}
N/A: Esta historia la escribo a la noche antes de irme a dormir en un 'block de notas' de mi celular, luego lo subo desde mi computadora, por lo que no creo que tenga mas de aproximadamente 1000 caracteres. Por lo tanto todos van a ser cortos pero constantes.
De antemano digo que no intento hacer ver a Sheldon como un pervertido que 'juega' con niñas, sino mas bien como alguien a quien 'las niñas' (por así decir) se sienten atraídas asía él, pero él no logra entender lo malo en eso. Tampoco quiero llegar a debates sobre esto.
Solo espero que les guste, comenten, síganlo...
- Saludos (:
