Hola a todos como estan ;)...aqui les traje una pequeña "OVA" de su historia favorita n_n.
OVA Una nueva oportunidad.
¿Traición en Fairy Tail?
Capitulo 1…
¿Cómo fue que paso esto?
¿Por qué les hizo esto?
Se levanto de entre los escombros y miro a todos lados, sus amigos también salían de entre los escombros del gremio, todos estaban allí, pero no habían rastros de…ella.
Una risa despectiva se oyó en el lugar donde antes estaban las puertas, todos voltearon a ver, allí estaba ella con una sonrisa malvada surcando su rostro, y sus ojos…esos ojos dorados que tanto amaba no tenían brillo y mostraban odio puro. Kagome los miro a todos uno por uno hasta llegar al que le interesaba, Natsu se levanto con mucha dificultad pues al parecer tenía una pierna rota, tenía muchas heridas y en su mayoría eran graves.
—Kagome ¿Por qué haces esto?—Pregunta el pelirosa con la tristeza tiñendo cada una de sus palabras.
La hanyou no respondió, su mirada había sido oculta por su fleco y mantenía una sonrisa petulante. El cuerpo de Natsu no soporto por más tiempo su peso, se dejo caer de rodillas al suelo y empezó a respirar agitadamente sin apartar su mirada de ella. Kagome se rio como si todo aquello fuera lo más gracioso que hubiera visto en su vida, Lucy era ayudada a levantarse por Juvia y Gray, Erza ayudaba al maestro a mantenerse en pie.
—Ustedes hadas son patéticas—Dice la ojidorada mirando a Natsu sin remordimiento alguno—Voy a hacerles un favor—En su mano derecha comenzó a brillar una esfera negra—Los hare desaparecer.
Lanzo la esfera hacia ellos y una luz brillo.
... ... ...
Abrió los ojos con pesadez, se sentó en la cama haciendo a Kero caer sobre su regazo aun dormido y miro el reloj de pared sobre el escritorio que marcaba las 10:47 am…10:47…¡Oh no!
—¡Dios mío ya es muy tarde!—Grita la Hanyou con terror y se levanta de la cama rápidamente despertando al pobre de Kero que yacía ahora debajo de las cobijas.
El minino saco la cabeza de entre las cobijas y vio a su dueña moviéndose a una velocidad inhumana por la habitación, soltó un gran bostezo y se sentó quitándose las cobijas de encima mientras se tallaba un ojo. Ese día Kagome había quedado en ir con los chicos a un trabajo y no solo eso, habían quedado en encontrarse a las OCHO de la mañana en la estación, Erza iba a matarla por esto. Termino sus deberes lo más rápido que pudo, tomo su mochila y a Kero y salió corriendo rumbo a la estación.
Estaba comenzando a enfadarse ¿Dónde rayos estaba esa chica?, ella fue la que propuso irse temprano y ya eran más de las once. Titania comenzaba a desesperarse, se encontraba con los brazos cruzados, sus ojos estaban cerrados y tenía el ceño fruncido, su pie derecho se movía con desespero golpeando el suelo con tanta fuerza que parecía increíble que no hubiera hecho un agujero, Lucy, Gray, Wendy, Charle, Natsu y Happy estaban sentados en la banca a un lado de la pelirroja que parecía furiosa, en esos momentos era mejor no abrir la boca…si querían vivir.
Kagome corría lo más rápido que le daban sus piernas, a lo lejos diviso la estación, solo un poco más y…logro llegar. Kero se adelanto volando directamente hacia Natsu para hablar con su hermano.
—Por fin llegas—Dice Lucy levantándose.
Erza abrió los ojos y miro a la hanyou furibunda, mas le valía tener una buena excusa para haber llegado tan tarde. Kagome de inmediato la miro y un escalofrió recorrió su espina dorsal, estaba frita.
—Lo siento, me quede dormida—Dice juntando ambas manos a modo de suplica hacia Titania que pareció molestarse más—Anoche no pude dormir bien y cuando por fin pude descansar fue casi a las tres de la mañana—Dice con una sonrisa que suplicaba piedad a la maga de re-equipamiento.
—¿Tuviste ese sueño otra vez?—Pregunta Natsu acercándose a ella preocupado.
Desde hacia algunas semanas Kagome había estado teniendo un sueño muy extraño, pero siempre le pasaba que a la mañana siguiente no recordaba nada y eso era algo preocupante. Erza dejo su enojo de lado reemplazándolo con curiosidad.
—¿Qué sueño?—Pregunta una vez que se subieron al tren y éste había comenzado su marcha, Kagome y Natsu estaban sentados frente a ella con el pelirosa dormido en el regazo de la hanyou, mientras que Kero, Happy y Charle estaban sentados a su lado.
—Uno que eh tenido desde hace algunas semanas—Responde Kagome con seriedad—Desgraciadamente no recuerdo nada al despertar, es algo muy frustrante—Agacha la cabeza con pesar.
—Entiendo—Dice Erza asintiendo—¿Ya le dijiste de eso al maestro?—Pregunta al tiempo que se cruza de brazos.
—Sí, pero él tampoco sabe qué hacer, por lo que optamos por dejar que el tiempo se encargue de todo—Dice la hanyou mirando por la ventana.
Decidieron dejar el tema hasta allí; es verdad, las respuestas solo el tiempo las traería. Llegaron a su destino y se bajaron del tren, debían ir a hablar directamente con el alcalde del pueblo quien había pedido ayuda. Al llegar a su casa *cof* mansión…tocaron al timbre y les abrió una mucama permitiéndoles pasar en lo que iba a buscar al alcalde, una vez llego con el hombre se marcho. El sujeto en cuestión era de baja estatura, en su cabeza tenía un sombrero de copa y su traje lo hacía parecer un pingüino con monóculo y bastón.
—Gracias por venir jóvenes magos de Fairy Tail—Dice el hombre con una voz algo chillona—Soy Roku el alcalde de este humilde pueblo, los eh llamado por un asunto realmente urgente—Saca un pañuelo de quien sabe dónde y comienza a secarse el sudor.
—¿Qué es lo que necesita?—Pregunta Erza adelantándose al grupo.
—Vengan conmigo, les mostrare—Dice Roku empezando a caminar al interior de la mansión, más precisamente a la cocina seguido del resto.
Salieron del lugar por una puerta de la cocina y el hombre señalo a una montaña con su bastón, todos miraron en aquella dirección sin saber que quería mostrarles, pero el semblante de Kagome los hizo pensar.
—¿Qué sucede?—Pregunta Gray mirando a la hanyou que tenía los ojos abiertos como platos.
Ellos no podían verlo, pero sobre la montaña que Roku señalaba había una enorme nube negra, señal de una energía maligna.
—Hay…una terrible energía maligna viniendo de esa montaña—Dice mirando a Erza, la pelirroja asintió volviendo a mirar la montaña.
—Veo que pudo notarlo señorita—Dice Roku llamando la atención—Desde hace algunos días esa nube negra que ve ha estado en esa montaña, solo yo eh podido verla por lo que los habitantes no me toman en serio, piensan que me volví loco y quieren arrancarme de mi puesto como alcalde—Lagrimas de cascada salen de sus ojos.
—Entonces ¿Qué estamos esperando? ¡Vamos!—Grita Natsu con una gran sonrisa entusiasmado.
—¡Aye!—Gritan Happy y Kero apoyándolo.
Ante eso todos partieron de inmediato con el alcalde deseándoles suerte, sentía que la iban a necesitar. Kagome no sabía que era, pero tenía un extraño presentimiento en su pecho con respecto a esa nube, solo esperaba que no pasara nada malo.
Llegaron a la cima de la montaña un par de días después, gracias a que Kagome podía sentir esas energías malignas los guio y llegaron al frente de una enorme cueva.
—La energía maligna proviene de adentro—Dice la hanyou mirando el interior de la cueva, ese presentimiento en su pecho se acrecentó.
—Bien andando—Dice Gray comenzando a caminar con precaución al interior de la cueva.
A los pocos segundos los demás lo siguieron siendo Kagome la ultima en entrar con Kero en su hombro.
—A cada paso que damos siento el aire más pesado—Dice Wendy abrazando a Charle con fuerza, pero no la suficiente como para aplastarla.
Los demás asintieron en acuerdo, de alguna manera se les estaba dificultando un poco la respiración, lo que sea que estuviese en esa cueva era la causa. Continuaron avanzando hasta llegar a un lugar realmente extenso, parecía un enorme hoyo en el interior de la cueva.
—¿Qué es eso?—Pregunta Lucy señalando algo en el centro del lugar.
Al ver en esa dirección se sorprendieron, allí se encontraba una especie de cristal negro del tamaño de una persona adulta, al principio no lo habían visto, pero poco a poco notaron un humo negro que salía de ese cristal. Kagome comenzó a acercarse para verlo mejor dejando a Kero con Natsu.
—Ten cuidado—Dice Erza con tono de advertencia recibiendo un asentimiento de parte de la hanyou.
Kagome se acerco a paso lento pero seguro hasta el cristal, la energía maligna comenzó a sofocarla pero no se detuvo, llego hasta el cristal y sintió una presencia dentro de él.
—"Eres tú"—Dice una voz femenina en su cabeza sorprendiéndola—"Es a ti a quien eh estado esperando, por fin podre salir de aquí"
—"¿Quién eres?"—Piensa la hanyou mirando el cristal, no podía negar que estaba un poco asustada.
—"Soy un espíritu que fue sellado aquí hace cuatrocientos años"—Dice la voz en su cabeza con rencor—"Fui una maga muy poderosa al servicio de Zeref, pero el muy maldito me traiciono y dejo que sellaran mi alma en este cristal"
—"Ya veo"—Piensa Kagome tragando en seco—"Y ¿A qué te referías con que era a mí a quien estabas esperando?"
—"Veras, como puedes notar no tengo un cuerpo físico"—Dice el espíritu dejando notar la obviedad del asunto—"Debo poseer un cuerpo pero no uno cualquiera, debe tener el poder suficiente para resistir el mío, y tu querida, eres la indicada"
Kagome se paralizo, al reaccionar comenzó a retroceder lentamente tratando de alejarse de ese cristal, los muchachos la observaban confundidos pero alertas a cualquier cosa que pudiera ocurrir.
—"Tonta, ya es demasiado tarde"—Dice el espíritu comenzando a reír de forma maniática.
El humo comenzó a arremolinarse alrededor del cristal, Kagome siguió retrocediendo y tropezó con una roca cayendo de espaldas, luego el humo se dirigió hacia ella rodeándola por completo sin dejarle posibilidad de escapar. Los chicos salieron corriendo rápidamente hacia ella, pero algo les impidió acercarse.
—No se entrometan—Dice el espíritu dejándose escuchar por ellos, arrojo una ventisca hacia ellos tratando de hacerlos retroceder.
—¡Kagome!—Grita Natsu tratando de acercarse resistiendo lo mas que puede la fuerte ventisca.
—¡Natsu!—Grita Kagome desde adentro del remolino negro cubriéndose con sus manos aun en el suelo.
La ventisca aumento a un torrente y los arrojo a todos contra las paredes de la cueva dejándolos inconscientes.
—¡Muchachos!—Grita la hanyou al ver a sus amigos en ese estado.
—Con ellos fuera de mi camino podre continuar con lo que hacía—Dice el espíritu volviendo a reír.
El remolino negro aumento su fuerza obligándola a cerrar los ojos con los brazos frente a su rostro tratando de cubrirse, luego todo se volvió negro.
Escucho como alguien la llamaba, era un grito lejano que poco a poco se fue acercando a su lado.
—¡Kagome!—Grita la persona, esa voz le era muy bien conocida.
Escucho que volvía a llamarla y había comenzado a moverla, abrió los ojos lentamente encontrando por leves momentos una mancha borrosa de color rosa a su lado izquierdo, cerró los ojos por un momento y al volverlos a abrir se encontró con los orbes almendra de Natsu que se veía muy preocupado.
—Kagome ¿Estás bien?—Pregunta el pelirosa mirando a su novia ayudándola a sentarse.
—Sí, ¿Y tú?—Pregunta la hanyou mirándolo, el chico tenía un rasguño en un brazo pero nada grave.
—Estoy bien—Dice Natsu con una sonrisa que la tranquilizo.
—Por cierto…¿En dónde estamos?—Pregunta Kagome mirando a su alrededor, se dio cuenta de que ya no estaban en aquella cueva sino en una habitación con dos camas, un pequeño librero con unas flores encima y un armario.
—Estamos en la casa del alcalde—Responde Natsu, ella volvió a mirarlo—Erza, Gray y Kero fueron los primeros en despertar y nos trajeron aquí.
—Ya veo—Dice la hanyou asintiendo.
Ambos salieron de la habitación y se encontraron con Lucy y Wendy.
—Chicos, que bueno que ya despertaron—Dice Lucy con una sonrisa aliviada.
—Dinos Kagome, ¿Estás bien?—Pregunta Wendy acercándose a ella.
—Sí, no te preocupes—Responde la hanyou con una sonrisa tranquilizadora.
Los cuatro bajaron a la sala donde vieron a Erza y a Gray hablando con el alcalde, mientras que Kero y Happy volaban alrededor del enorme candelabro que colgaba en el techo y al verlos salieron volando hacia la hanyou.
—¡Kagome!, que bueno que despertaste—Dice Kero abrazándola con ojos llorosos al igual que Happy.
—Estábamos muy preocupados—Dice Happy.
Kagome se enterneció ante eso y los abrazo con fuerza pero sin lastimarlos.
—Lamento haberlos preocupado chicos—Dice la hanyou restregando su rostro contra los de ellos de manera cariñosa.
El alcalde les agradeció por haberse deshecho de aquella energía maligna y les dio su recompensa, aunque a decir verdad no sabían lo que había ocurrido con aquel espíritu maligno cuando se desmayaron, pero eso era algo que no podían decirle o se pondría peor. Regresaron a casa y Kagome se separo del grupo diciéndoles que los vería en el gremio mas tarde para luego correr hacia su casa, debía ver lo que le hacía falta para comprarlo de una vez. Al entrar a su casa y agacharse para quitarse las sandalias sintió que todo le daba vueltas, se arrodillo en el suelo con una mano en la cara dejando ver sus ojos por entre sus dedos, parpadeo tratando de reducir el mareo pero parecía suceder completamente todo lo contrario.
Aparto su mano de su cara y cerro con fuerza los ojos moviendo la cabeza de un lado a otro un par de veces y los volvió a abrir, el mareo se había ido. Se levanto y fue a la cocina, al refrigerador para ser más precisos, hizo una lista de lo que debía comprar y salió corriendo de la casa rumbo al gremio, compraría todo de regreso a casa mas tarde. Llego al gremio y fue directo a la barra donde su novio y los demás estaban hablando con Mira; cuando iba llegando con ellos volvió a sentir el mareo de hace rato y cayó de rodillas al suelo otra vez cerrando los ojos con fuerza, los chicos al verla se alarmaron y fueron corriendo a su lado siendo Natsu el primero en llegar y arrodillarse a su lado.
—¿Estás bien?—Pregunta el pelirosa preocupado colocando una mano sobre la espalda de la hanyou y con la otra le tomo una mano que ella apretó un poco.
—Si…solo fue un mareo—Dice Kagome abriendo los ojos, pero aun veía todo dando vueltas y los volvió a cerrar con fuerza.
Natsu y Gray la ayudaron a levantarse y la sentaron en una silla que Mira había traído, la escena ocasionó que los curiosos miraran y se preocuparan también, fueron al lugar y se colocaron alrededor de ellos dejando suficiente espacio para que la hanyou pudiera respirar.
—A ver—Dice Mira agachándose frente a Kagome—Abre los ojos.
Kagome abrió los ojos con lentitud y vio a Mirajane claramente, pero el mareo regreso y esta vez vino acompañado de un terrible dolor que se extendió desde su cuello hasta el resto de su cuerpo, no pudo contener un gemido de dolor, esto los alerto a todos y los preocupo aun más. El maestro salió de su oficina al notar que el típico escándalo del gremio se había detenido de repente, al ver a todos agrupados cerca de la barra se acerco y vio a Kagome con su rostro contraído por el dolor y a Natsu tomándole una mano.
—¿Qué ocurre?—Pregunta Makarov acercándose más a los Dragón Slayers.
—Kagome comenzó a sentirse mal de repente—Responde Erza mirando a la chica con preocupación—No sabemos lo que le pasa.
El maestro asintió y fijo su vista en Kagome, la hanyou apretaba la mano de Natsu mientras que con su brazo libre se sujetaba el estomago. Esto hizo que el maestro se preocupara igual que el resto, Wendy se acerco para ver qué podía hacer y aplico su magia curativa en Kagome, pareció funcionar ya que Kagome se relajaba, la hanyou abrió los ojos de nueva cuenta y su mareo se había ido.
—¿Cómo te sientes?—Pregunta Mira.
—Me siento mucho mejor, gracias Wendy—Responde la hanyou mirando a la niña con una sonrisa.
—Lo mejor será que te vayas a casa y descanses—Dice el maestro llamando su atención recibiendo un asentimiento por parte de ella.
—Yo te acompaño, no es buena idea que te vayas sola—Dice Natsu mirándola.
—Claro—Dice Kagome asintiendo con una sonrisa tranquilizadora, con ayuda de Natsu se levanto y ambos salieron del gremio seguidos de Kero y Happy.
—Maestro ¿Qué cree que le haya ocurrido?—Pregunta Lucy angustiada.
—No lo sé, por el momento habrá que estar pendientes—Dice el maestro con seriedad caminando de regreso a su oficina—Wendy, debes estar pendiente por si ocurre algo.
—Si maestro—Dice la niña asintiendo.
Luego de eso, todos volvieron a lo suyo y el escándalo no tardo en regresar. Mientras tanto, el maestro había regresado a su oficina y observaba por la ventana, no sabía que era, pero eso que acababa de pasar era el presagio de que algo peor, de que algo terrible estaba por ocurrir.
Continuara…
Espero que les haya gustado ;)...tomenlo como un regalo por lo que paso con 7 Años despues ó_ò...No tendrá más de dos o tres capitulos pues...es una OVA y las OVAS reales no duran mucho -o-...
Pronto subire el 2 y ya estoy trabajando en los siguientes cap. de Fairy Tail I, la inspiracion en estos momentos me cae como lluvia xD, aunque sea una pequeña llovizna que pronto se me pasará xD.
¡ESPERO SUS REVIEWS!
¡JA NE!
