Los personajes de Mai Hime no me pertenecen, solo la historia que a mi maquiavélica mente se le ocurrió.
Prologo
Manejaba su auto calmadamente saliendo del pequeño pueblo y se adentró a una carretera solitaria, ubicada en una pradera del inmenso bosque, minutos después pudo divisar por el espejo retrovisor un auto negro con las ventanas polarizadas, le pareció haber visto el mismo auto siguiéndolo desde hace horas, pero como creyó que eran paranoias suyas, lo había ignorado, hasta ahora. Intentaba concentrarse en el camino, pero no podía, pues cada vez que volvía a ver por el espejo retrovisor, le parecía notar que el auto se acercaba cada vez más a él, hasta que la parte delantera del auto ajeno estuvo a la altura de sus llantas traseras después golpeo contra ellas logrando así, que su auto se descarrilara y diera vueltas antes de que lograra estabilizarlo y frenarlo, pasado el susto inicial, dispuesto estuvo de bajar del vehículo para encarar y reclamar a la persona que casi había provocado un accidente, apenas y se quitó el cinturón, cuando otro golpe fue dado al vehículo, en el costado opuesto de donde él se encontraba, siendo empujado un par de centímetros, su cuerpo entero se sacudió por la fuerza del impacto, se ganó varios cortes en la cara y brazos por los vidrios, que rotos, salían volando en todas direcciones y su cráneo fue golpeado contra el timón y el parabrisas dejándolo aturdido.
Aun en el interior del auto, uso toda su fuerza de voluntad para no caer desmayado, pues algo le decía, el instinto quizá, que eso no había sido todo, que su agresor no estaba satisfecho solo con eso. Logro salir de su aturdimiento, y escucho claramente el sonido de un motor que se acercaba cada vez más hacia donde estaba el, sabiendo que vendría un tercer choque, intento abrir la puerta del piloto, pero tarde fue cuando el auto de su atacante impacto de nuevo esta vez con mucha más fuerza que antes, justamente en el mismo lugar donde había chocado primeramente, y ya que no había logrado abrir la puerta, su cabeza golpeo contra el vidrio de la ventana, que no había logrado quebrase con el golpe anterior, la cual se rompió con el choque de su cráneo, haciendo que definitivamente ya no pudiera mover ni un musculo de su cuerpo.
Eso era todo, sabía que no podría salir de esto, aun siendo consciente de lo que pasaba a su alrededor, sintió como alguien abría la puerta del piloto, su cuerpo cayo como peso muerto al césped, un pie lo movió para que quedara boca arriba, con la poca fuerza que tenía logro abrir sus parpados, encontrándose así, con unos intensos ojos verdes que lo miraban con odio.
Hola gente, como les va.
Bueno esta historia, es una que me había rondado en la cabeza desde hace mucho tiempo, espero haber logrado captar su atención con este prologo.