Summary: 'Debes ser cuidadoso, el amor no es simple.' Y aunque ambos sólo querían estar uno al lado del otro. Pero Sakura sabía, cada vez que pensaba en Sasuke, lo sentía en lo más profundo de su corazón. Fue tan fácil que ambos se enamoraran. Por eso, no se iban a prometer nada.

Disclaimer: La historia es de mi pertenencia, en ella sólo utilizo sin ningún fin de lucro, a los personajes de Naruto, cuyo creador es Masashi Kishimoto. Está prohibido re-suban esta o cualquier otra de mis historias, o adaptarlas.

NA: Esta es la historia que subí a Facebook en un concurso (voy perdiendo TnT ; 8 votos es una burla para mi corazón ToT ) Tardé un día en escribirla y editarla. Son 4,000 palabras exactas. (lol) Esta historia iba a ser un long-fic, pero ni modo. Aunque está en proceso de ser long-fic... tal vez...

Advertencia; posible Ooc y en total serán 2 capítulos.

Se me borró la primer publicación, esta historia esta encantada, ya son 4 veces que la subo y edito y me sale maaal...

No Promises

[Just Be Careful...]

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El salpicar del agua. Veía burbujas de colores. Sentía la frescura del pasto bajo sus pies y la dulzura del sol sobre de ella. Recuerdos de una hermosa infancia, presentándose ante ella otra vez.

"Regrese" dijo a nadie en particular, o tal vez, lo dijo a ese viejo campamento.

Era verano. El primero en cinco años desde la última vez que estuvo en ese lugar. Cuando era niña, le había tomado algo de tiempo asimilar y aceptar la belleza de este lugar. 'La voluntad de Fuego' era un lugar conocido. Siempre atendiendo años tras año a generaciones de niños o jóvenes cuyo sueño fue ser un ninja. No era una academia de ninjas de verdad, sólo que así les gustaba llamarse. En el lugar había instructores capacitados en diferentes áreas deportivas o culturales. Sakura misma había aprendido karate ahí. Pero desde que sus padres biológicos murieron, fueron distantes los veranos en los que ella regresaba a este lugar.

Caminó, impaciente y curiosa, observando y notando los muchos y pocos cambios del lugar. Se había ampliado más, tenían más cabañas. Saludaba caras conocidas y rostros nuevos.

Inhaló mucho aire. Olía el agua del lago cercano y escuchaba la risa de niños a lo lejos.

Era bueno estar de vuelta.

..

"…Además, ayudaras a Shizune."

"Entonces, ¿estoy como miembro oficial?" No podía ocultara la sonrisa de su cara.

Tsunade sonrió. "Es bueno que estés con nosotros, Sakura. Bienvenida a 'Voluntad de Fuego.'"

..

Estar dentro del salón donde se llevaba a cabo las lecciones de Taijutsu le traía tantos recuerdos, ahí se enseñaban diferentes artes marciales. Se acercó a los estantes que contenían algunos de los artefactos para los alumnos más avanzados. Shirukens y Kunais, Shinai, entre otras cosas. Recordó su primera experiencia con un kunai, y como este le dejó una fea cicatriz en la palma de la mano. Casi nostálgica, e inocentemente, tomó uno. Sonriendo a medias, lo giró entre sus dedos. Se moría de ganas por empezar y-

"No creo que debas jugar con eso, esta afilado y-"

Se sobresaltó, sorprendida por la voz que hablada a sus espaldas, "¡Ouch!" Reaccionó de la peor manera, pues apretó el kunai que tenía en la mano.

"Te lo dije." Se paró frente a ella. "¿Estas bien?" Aunque le preguntó, ya había tomado su mano para examinarla.

"Lamento eso," trató de disculparse ella, también mirando su herida. Cuando él le comenzó a limpiar la sangre de su mano, ella le sonrió, agradecida. Ambos levantaron la mirada, y por un momento, se sentía como si el tiempo se pausara. Todos los colores y la frescura del verano pasaron por su mente. Colores suaves y cálidos, momentos dulces y promesas no dichas. Todo pasó en un segundo.

"Segura que esta-"

"¡Eres muy bonito!"

..

No es que se diera de golpes en el pecho o negara que causaba cierta inquietud en las personas del sexo opuesto. Podía pensar y enumerar los halagos y descripciones de su físico que las chicas le habían dicho durante su vida… pero nunca nadie le había dicho 'lindo…'

Primera impresión: esa chica era rara.

Le miraba de reojo, a unos metros de su derecha. En un vestido veraniego con muchas flores. Mirara por donde mirara, era rara. Desde su extravagante cabello rosa, su cuerpo delgado, sus ojos verdes y sus labios rosas. Lucía sonrojada, Sasuke se preguntaba si era normal eso en ella.

Ella miró hacía su dirección, y tratando de parecer disimulado, movió su mirada. Aun así, de reojo podía verla caminar hasta él.

"Lamento lo de hace rato." Dijo al llegar a su lado. Sasuke veía como campistas e instructores se reunían ahí. Estaba en campo abierto, frente un escenario donde consejeros y la directora daban su discurso de bienvenida.

"Hn." Le respondió él después. Mirando al frente, de brazos cruzados y esperando que ella se alejara.

Ella jugó nerviosa con sus manos. A Sasuke le estaba irritando.

"Que es-"

"¡Por favor sal conmigo!" Gritó ella. Sasuke la miró de inmediato, sorprendido. No sólo él, sino todos los presentes se giraron para verlos. "¡Eres muy bonito, ten una cita conmigo!"

El tiempo se volvió a suspender. ¡Y Sasuke jura y perjura que no se sonrojó!

Sentía a su alrededor, miradas pesadas en su espalda. Risitas poco disimuladas y alguno que otro chiflido. Aseguraba que era Kiba y Naruto. Apretó los puños. Frunció el ceño y miró con molestia a la chica.

"No salgo con campistas." Suponía que si él hubiera sido otra persona, habría agradecido la oferta o decir lo siento. Pero al diablo. Ella lo estaba avergonzando en público. Bonito ni una mierda…

La miró, y esperó que esta niña entendiera de una vez. Él no- ¿Por qué ella sonreía? ¿Que era ese brillo en los ojos y ese sonrojo?

"Entonces, si no fuera una campista -" Sasuke notó como ella iba a decirle algo más, pero fueron interrumpidos.

Desde el micrófono, alguien se aclaró la garganta. Un poco alarmado, recordó que no estaban solos. Y para su desgracia, la directora ya estaba ahí. Así como todos los instructores.

Que la tierra se abriera y los llevara a todos.

La directora, una mujer con presencia y porte… uno que se arruinaba cuando estaba ebria, le miraba. Divertida. Sasuke juraba que era una bruja. O al menos actuaba como una. Avergonzado, sin saber realmente porque, ignoró a la chica que acababa de declarársele.

Se concentró en inhalar y exhalar. Poca atención le prestaba al típico y nada nuevo discurso con el que se iniciaba formalmente seis semanas de actividades. Su mente se dejó llevar por cosas agradables. Memorias de este lugar, recuerdos de momentos vividos con su hermano y amigos, vívidos en este campamento.

"Además de darle la bienvenida a nuevos campistas, es un placer presentar al nuevo miembro de instructores y auxiliar."

Sonidos de sorpresa y comentarios de bienvenida resonaron. Con poco interés, Sasuke levantó la mirada y observó a la chica pelirosa, ahora, de pie a un lado de Tsunade.

Decir que esta no la vio venir era poco. No muchas cosas lograban sorprenderle, o importarle, pero esto sin duda se ganaba todas. ¿Cómo era que esa chica era instructora?

Sintió un flash en la cara. Parpadeando, miró al intruso. Lo fulminó con la mirada.

"¿Que? Tu expresión merecía ser fotografiada, pocas veces te he visto así de atontado." Sasuke apretó la mandíbula.

"Borra eso, Naruto."

"¿Bromeas? ¿Sabes cuánto dinero voy a conseguir con tus fangirls por esto? Aunque…" miró hacia al frente, observando a la chica de cabello rosa. "Creo que Sakura-chan se convertirá en un problema para ellas."

De todas las tonterías que decía, lo único que se quedó en la mente de Sasuke fue el nombre de la chica que seguía sonriendo. La miró de soslayo, y ella ya lo observaba. Ahí estaba otra vez, una sonrisa petulante.

Tch. Apenas era el inicio del verano, y Sasuke ya sentía que iba a ser una locura.

..

"Aun no puedo creer que hayas hecho eso." ¿Era su imaginación o era reproche en su voz?

Aunque ahora que la euforia se había ido de ella, Sakura comenzó a reflexionar lo que hizo. Okay, tal vez si se había pasado de efusiva…

"¿Crees que estuvo mal?"

"¿Qué cosa? ¿Qué le hayas dicho 'bonito' a Sasuke Uchiha frente a toda la población del campamento, o que le hayas pedido salir a Sasuke maldito Uchiha y él te rechazara frente a todo el campamento?"

"Cuando dices las cosas de esa manera, me hace pensar en que tal vez hice algo mal." Su acompañante la miró de mala manera. "Además, no me rechazó como tal…"

Suspiró, exasperada. Ino adoraba a Sakura, había sido su mejor amiga del campamento durante años, pero a veces simplemente quería arrojarla al río. Y mira que venir luego de tanto tiempo y hacerse notar con semejante espectáculo. Negó con la cabeza. Ya veía venir todo un circo.

"Aun no puedo creer que hayas hecho eso."

Ella inclinó un poco la cabeza, "¿Por qué? ¡No me digas que tiene novia! O peor aún… ¡novio!" Dios, sabía que no podía existir un hombre tan bonito, y-

"Para ya. Primero, nunca le vuelvas a decir 'bonito' si no quieres que te odie, nunca le digas así, menos en público, ya que él es… él... es Sasuke."

"Lo dices como si con saber su nombre voy a saber cómo es o quién es."

Ino giró los ojos. "Deberías. Ahora, cierra la boca y deja te cuente sobre él."

..

Muy bien. Ahora que todo el espectáculo del día anterior se había insertado bien en su cabeza, gracias al silencio de la noche y su costumbre de repensar sobre su día, Sakura se dio cuenta de que… de que tal vez actuó sin pensar. Y tal vez se sentía algo avergonzada… tal vez si daba la vuelta y le pedía a Tsunade que-

"Oye."

"¡Yiiep!" Chilló, porque gracias a su mente fantasiosa, no se dio cuenta que Sasuke la había notado, y se había acercado a ella. ¿Qué haría? ¿Le golpearía, diría algo hiriente? ¿Y si la arrojaba al lago? No podi-

"¿Cómo está tu mano?"

"¿Uuh?" porque él estaba frente a ella, su cerebro parecía desconectarse. Se abofeteó, mentalmente, claro.

"Tu mano." Repitió con impaciencia.

"¡Ah! ¡Está bien, mira!" Levantó su mano izquierda, mostrando las vendas alrededor de esta. Él asintió.

Ahora que le miraba de cerca. Sakura empezaba a entender la detallada descripción de Ino sobre él. Sí, lucía serio, y algo misterioso. Tenía un aura de seguridad, como si fuera alguien inalcanzable. Pero Sakura veía algo más. ¿Era soledad?

"Así que también eres instructora." Él la miró con mucho detalle. Como si examinándola pudiera descubrir quién era realmente. Su instinto le decía que se moviera, incomoda, pero no lo hizo.

Sólo sonrió y asintió. "Y asistente de enfermería."

"Eso escuché." dijo sin mucho interés.

Silencio.

"Sobre lo que te dije ayer..." comenzó ella, algo nerviosa.

Ahí estaba, Sasuke ya veía venir sus palabras, seguro-

"¿Qué te parece mañana?"

Quieto. Así se quedó. Algo confundido. ¿De dónde sacaba valor esta chica? Alzó una ceja, y la miró fijamente. ¿Se le había zafado un tornillo?

Ella trató de explicarse.

"¿Te gustaría tener una cita conmigo?"

"Una cita." Ella asintió de manera enérgica. "Una cita… ¿en un campamento…? ¿En el bosque? "

Sí, era incredulidad. No sabía si ella estaba siendo sería, enserio que casi se ríe.

"Ohhmm... podríamos- podríamos ir a caminar alrededor del lago, o algo…"

Él bufó.

"Nos acabamos de conocer, literal, ayer te vi por primera vez, ¿y quieres una cita conmigo?" Ella volvió asentir, sonrojada. "Ni siquiera te conozco, y no sabes nada de mí, tu no-"

Ella estiró su brazo y extendió su palma. Sasuke la miró, confundido, ella la movió con insistencia. Quería que él la tomara. Inseguro, estrechó su mano con la de ella, más pequeña y más suave.

"Mi nombre es Sakura Haruno, seré instructora de Taijustu y auxiliar de enfermería. Es un placer conocerte Sasuke-kun, por favor considera mi petición."

..

Durante sus diez y ocho años de vida, Sasuke nunca se había quedado sin habla y sorprendido tantas veces con la misma persona.

Con el sol sobre sus cabezas, con los rayos de luz sobre ese cabello rosa y el olor a agua cerca de ellos, las risas y la humedad del calor, Sasuke sostenía la mano de esta peculiar chica. No sabía que era, pero en el momento en que tomó su mano, algo dentro de él se sintió diferente.

..

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