Disclaimer: No, no me llamo Stephenie. Tampoco soy rica, ni hablo inglés a la perfección. Así que ni Twilight, ni la totalidad de sus personajes, escenarios, y demás elementos que podáis reconocer me pertenecen. Son de Meyer y yo únicamente me dedico a jugar con ellos, escribiendo ideas locas que se me pasan por la cabeza.


Si a cualquiera de sus hermanos le propusieras que la definiera en una palabra seguramente la respuesta sería la misma en todos los casos: histérica. Y ninguno se equivocaría. Porque sí, para qué negarlo, Rosalie Hale se irrita con bastante facilidad.

Sin embargo, si en lugar de "¿Cómo?" la pregunta fuera "¿Por qué?", las respuestas ya serían un poco más variadas e inexactas.

Alice diría con una sonrisa divertida que porque es así, nació así, y sus visiones no indican un cambio próximo. Porque por el momento nada indica que la cosa vaya a cambiar.

Jasper no sabría qué contestar. Él simplemente detecta emociones, no la causa que las provoca, y, cuando se da el caso, intenta calmarla y le pregunta qué le pasa, aunque no obtiene respuesta. Porque en el fondo es su hermana y no quiere verla triste.

Emmett diría que no le importa. Porque la quiere tal y como es.

Edward solo traduciría las palabras de Emmett. Porque cuando Emmett dice que la quiere tal y como es, quiere decir exactamente eso. En todos los sentidos. Vamos, que precisamente lo que le gusta de Rosalie es su (mal) genio y esos momentos en los que se pone tan irasciblemente sexy.

Y Bella… Bella se lamentaría. Porque es la única que sigue creyendo que Rosalie la odia y la envidia porque es humana. Aunque eso, de alguna forma, sea cierto, pero no precisamente por su condición humana.

Lo que no sabe es hasta qué punto tiene razón.

Porque sí. Rosalie odia a Bella, porque sabe que nunca será suya. Y si no es suya no debería ser de nadie. Pero Bella ama a Edward y solo la ve como a una hermana, y parece restregarle a propósito este hecho, día tras día. Porque en el fondo sabe que nunca podrá tenerla entre sus brazos más que con la fraternidad sanguínea que supuestamente la une, y eso le duele.

Pero a la vez tampoco quiere hacer daño a Emmett, así que un mar de sentimientos contradictorios la inunda cada vez que sus miradas se cruzan. Pero por mucho que Emmett sea su "media naranja", su pareja ideal, el optimista inmortal que le alegra los días, y le ame, no puede evitar sentir lo que siente. Porque sabe que con cada roce, cada caricia con lujuria contenida, cada beso impaciente, con cada noche que pasa junto a él, sabe que le está traicionando y se asquea de sí misma. Y, a pesar de eso, aún no entiende como es posible que, cada vez que Emmett se le acerca y le susurra tan sensualmente ese "cálmate, nena" ella es capaz de pensar en Bella y desear que fuera su voz la que le llegara al oído y su aliento el que le acariciara el cuello. Y eso precisamente la pone más colérica. Porque debería poder controlarse, o controlar sus pensamientos, pero no es capaz. Porque Emmett no se lo merece.

Y… porque teme ser descubierta.

Sin embargo, por suerte, sus pensamientos son tan enmarañados y confusos que Edward no puede seguirla. Al fin y al cabo, es Rosalie, se encoge de hombros, restándole importancia, cuando esto ocurre.

Pero eso no evita que se siga odiando a si misma y se irrite con facilidad. Y todo por su culpa. Porque resulta más sencillo vivir con la certeza de que Bella es una intrusa que ha venido a destrozar su mundo.

Y por eso la odia. Pero al odiarla… vuelve a pensar en ella. Y se desata de nuevo su ira.


Bueno... pequeño Oneshoot que tiene ya algún tiempo, subido como respuesta a un pequeño chantaje :P
Como podéis comprobar, el primer fic que subo... así que ando algo temerosa respecto al Ooc y otras cuestiones que me han traído de cabeza.

¿Qué opináis?^^