Hola a todos!! mmm se que me toca actualizar mi otro fic...pero es que tuve un poco de inspiración y escribi este u.u Solo tendrá dos capítulo junto con un epílogo y será, o eso tengo planeado, un poco tétrico XD no mucho pero de manera razonable.

Es un SasuHina navideño sin las normales muestras de afecto, aunque claro que habrá regalos n.n

Estaba nevando

No podía recordar cuando había sido la última que vez que había contemplado la nieve caer de una manera tan tranquila como aquella, el invierno pasado hubo tormenta prácticamente toda la navidad. Si, lo recordaba porque había perdido horas de entrenamiento a causa de la fuerte ventisca.

Se abrigó un poco con aquellas suaves mantas que momentos atrás su primo había colocado sobre sus hombros y contempló el fuego de la chimenea en silencio. Todo el esfuerzo puesto en los entrenamientos por fin había dado frutos. Ahora, guardado en su habitación, el chaleco de Jounin demostraba cuanto había mejorado.

Muchas veces había deseado ser poseedora de ese rango, pero ahora que lo había alcanzado solo esperaba el momento para pertenecer a algún escuadrón ANBU así como su primo. Neji siempre había sido un genio, era bueno para las artes marciales, bueno en tratos con la alta sociedad, bueno manejando chackra. Era extraño como el titulo de "genio" podía ser dado sin necesidad de poseer un coeficiente intelectual como el de Shikamaru.

Neji era, sin mentira alguna, un genio para muchas cosas, menos para las matemáticas. En eso la heredera Hyuuga era indudablemente mejor, nunca necesitó ayuda para memorizar las tablas de multiplicar, ni para los examenes de cálculo de Iruka-sensei. Y tampoco necesitó ningún tipo de linea de sangre para resolver el examen en las pruebas chunin al contrario de su primo.

Todo lo que ella necesitó para llegar a ser una ninja respetada fue un poco de confianza, no estaba casada aunque ya estuviera en edad de tener hijos. Su padre paso varios años intentando juntarla con cualquier joven de noble familia y alto cargo, su última opción había sido, por muy irónico que suene, Naruto Uzumaki. Ya su amor por el era cosa del pasado, los sonrojos y los tartamudeos fueron quedando de lado dando paso a sonrisas agradecidas y palabras de aliento.

19 años - suspiró, llevaba demasiado tiempo en esa aldea, después de tanto tiempo de desaprobar a esas chicas enamoradizas no podía evitar sentirse como una de ellas.

Sasuke Uchiha era su problema, con nombre y apellido se había convertido en el peor terror de la Hyuuga. Después de la superada fijación por el rubio comenzó a notar un extraño cosquilleo en el estómago cuando el Uchiha se encontraba cerca de ella, cuando le hablaba comentándole sobre algún cambio en la aldea después de la misión o simplemente cuando después de un largo entrenamiento sonreía con superioridad y decía "Nada mal Hyuuga...nada mal"

Se abrazó a sus rodillas hundiendo la cara en la manta, a la mañana siguiente se celebraría la prueba para ingresar al escudrón ANBU, y ella junto a los otros chicos que una vez fueron los 9 novatos arriesgarían su vida en ella.