Capítulo 1. Conflicto de Intereses.
Riza llegó la primera a la oficina, como era habitual. Ordenó los papeles de su mesa distraídamente, separándolos en pequeños montones según su importancia.
Entonces lo oyó.
Un golpe seco, pisadas intentando ser disimuladas, una respiración.
Riza se movió sigilosamente y cogió el arma que estaba encima de la mesa. Avanzó hasta la puerta, preparada para atacar en cualquier momento. Antes de alcanzarla, ésta se abrió de golpe. La teniente no podía creer lo que veía: el hombre de la cicatriz, Scar, la persona que habían buscado durante tanto tiempo, estaba allí, en su propia oficina.
Venciendo la sorpresa inicial, y sin darle tiempo a reaccionar, Riza alzó el arma y le ordenó que no se moviera.
-'¿Dónde está el Coronel Mustang?'- preguntó Scar, con la intención de acercarse a ella.
-'¡He dicho que no te muevas!'
Scar sonrió maliciosamente. ¿Quién se creía que era aquella mujer? ¿Acaso no sabía con quién se enfrentaba? Podría matarla con solo tocarla...
Pero no lo haría, no entonces. Su prioridad era Mustang, y estaba dispuesto a acabar con él cuanto antes.
-'¿Dónde está el Coronel Mustang?'- repitió.
Riza le observó durante un momento, barajando todas las posibilidades que tenía. ¿Debería matarlo o sólo capturarlo para que otros le dieran muerte?
A Scar no se le pasó por alto el momento de duda de la teniente, y caminó hacia delante para situarse justo frente a ella. Su arma no suponía ningún problema.
-'Tu muerte es innecesaria. Sólo tienes que decirme dónde se encuentra el Coronel.'
-'El Coronel no está en la ciudad. No volverá hasta dentro de un par de días.'
-'¡Mientes!
Scar sintió cómo la furia lo llenaba. Corrió hasta alcanzarla y posó sus manos sobre su cuello, presionándolo. Riza lo miró, incapaz de hacer nada. Acariciaba la posibilidad de morir… morir…
¿Qué estupidez estaba diciendo? No podía morir, no a manos de Scar. Debía proteger al Coronel…
Riza alzó el arma y disparó. La bala le alcanzó en el hombro, lo que le hizo gritar de dolor. Ella aprovechó la oportunidad y se zafó de él lo más rápido que pudo, vigilante, a la espera de un nuevo ataque. Pero Scar no atacó. Se limitó a sonreír sin dejar de mirarla.
-'Pensaba que tu puntería era excelente…'
Riza se preparó para disparar de nuevo, pero Scar se dirigió hacia la ventana y saltó, taponando como podía la herida sangrante.
