Disclaimer: Los personajes de Harry Potter no me pertenecen.
Este fic ha sido creado para los "Desafíos" del foro "La Noble y Ancestral Casa de los Black".
Tonks estaba que se subía por las paredes. ¡No podía aguantarlo más! ¿Pero cómo hacerlo? ¿Cómo, cuando Remus desayunaba todas las mañanas delante de ella, sin camiseta? ¿Cómo si él iba por toda la casa meneando su culito? Como diciendo: "Mira que sexy soy"
Remus y su culito, superaban a Tonks, la pobre no aguantaba más.
Tenía que buscar la manera de estar a solas con él, la manera de arrinconarlo contra alguna esquina de la casa, o tal vez hacerlo sobre el escritorio que había en una de las habitaciones, o sobre la encimera de la cocina…
Sí, Tonks estaba muy necesitada. Ella tiene mucha paciencia, pero también tiene un límite, lleva esperando mucho, demasiado, por estar con su querido lobo… y no me refiero a simples besos. No señor, ella quería más, mucho más…
Así que ideo un plan, un plan maravilloso y muy trabajado, que a la mínima podría salir mal… Vale, su plan era simplemente emborrachar a su tío Sirius y acorralar a Remus en alguna habitación. ¿Simple? Sí. ¿Fácil? También. Pero efectivo al fin y al cabo.
Así que eso hizo, emborrachó a Sirius, como no lo habían emborrachado desde la adolescencia.
Su siguiente paso fue vestirse provocativamente y no se le ocurrió nada más, que disfrazarse de lobita sexy. No la culpéis o juzguéis, la pobre estaba muy, pero que muy necesitada y bueno… un poco loca para ser sinceros.
Y se metió en la habitación de su lobito, se sentó en el escritorio e intentó poner una pose sexy… Pero acabó tirando unos cuantos tinteros, plumas y pergaminos al suelo. Cuando fue a recogerlo todo, tiro sin querer la silla, que a su vez tiró una pequeña mesita, que tenía encima un jarrón (que parecía muy caro) y que tenía comida para lechuzas.
Resultado: Un desastre monumental.
Tonks estaba desesperada, no creía tener tiempo para ordenarlo todo y su necesidad de hacer el amor con Remus le nublaba el pensamiento, por eso no se le ocurrió utilizar su varita para ordenarlo todo.
Entonces oyó un "crack" y vio a Kreacher, el cual se la quedó mirando como diciendo : ¿WTF?
-¡Limpia todo esto! – le ordenó presa del pánico Tonks.
-Kreacher no sirve a sangres sucias – respondió el elfo con gesto enfuruñado, aunque aún algo desconcertado por el atuendo de la joven bruja.
Y así empezó una ardua pelea entre el elfo y Tonks. Llegado un momento, Tonks harta del elfo, le tiró un patito de goma (vete tú a saber de donde lo sacó) a la cabeza.
Pero teniendo tan mala puntería y siendo tan torpe como es, no fue a darle a otro que a Sirius, que justo entraba por la puerta. Tambaleándose, como hace cualquier borracho.
El simple golpe del patito (que fue lanzado con mucha fuerza) le hizo caerse al suelo y allí se quedó, pues no tardó en dormirse sobre el suelo.
Y para rematar la escena…
Remus entró en la habitación y se quedó en shock, aunque cualquiera lo haría…
Tonks y Kreacher seguían peleando y Tonks estaba intentando estrangular al elfo, el cual no paraba de insultar su sangre y se metía con su pelo. Además del atuendo de Tonks que también lo trastocó.
La habitación estaba echa un desastre y en el suelo se encontraba Sirius durmiendo y abrazando a una botella de Wisky, como si fuera un peluche.
Remus no sabía que hacer, finalmente, optó por largarse silenciosamente. (Vale, que eso no era muy Griffindor, pero lo que había presenciado lo superaba. ¡Ni siquiera yendo a un psicólogo muggle lograría superarlo!)