El despertador sonó por tercera vez aquella mañana en la habitación. Rachel extendió su mano para coger su teléfono y apagarla, fue entonces cuando vio la hora. Llegaba tarde a su último día de rodaje de la temporada de su serie por lo que dejo el móvil en la mesita de noche y salió corriendo de la cama. Busco su ropa por el suelo de la habitación, su camiseta estaba a los pies de la cama pero sus pantalones estaban más cerca de la puerta. En su búsqueda encontró una camiseta de chico que lanzó encima de la cama, golpeando a la silueta que aún permanecía allí tumbada. Rachel término de recoger sus cosas antes de acercarse a la cama a despertar al chico.

-Levántate ya- dijo Rachel mientras le acariciaba la cabeza.

-mmmmmm- apenas un gruñido fue la respuesta,

-Voy a casa a vestirme- le informo- cámbiate ya que llegamos tarde Sam.

-Esta bien- dijo por fin abriendo los ojos.

-Ahora nos vemos- dijo Rachel mientras se levantaba pero Sam la agarro del brazo.

-Espera- pidió el chico- buenos días

-Buenos días- una sonriente Rachel se acercó a el para dejar un beso rápido en sus labios-¿me recoges?

-Claro, en cinco minutos en tu puerta- acepto el chico Rubio.

Rachel bajo las escaleras para salir de la casa de Sam, por suerte para ella su casa se encontraba al otro lado de la carretera. Cogió unos vaqueros y una camiseta del armario para cambiaste rápidamente, la ventaja de trabajar en la tele era que no le hacia falta ir maquillada, peinada o muy arreglada porque cuando llegaba al estudio le deban el vestuario y pasaba por maquillaje u peluquería antes de rodar las escenas. Como había dicho cinco minutos después Sam la esperaba con su coche deportivo en la puerta, la morena se recogió el pelo y de subió con una sonrisa y sus grande gafas de sol en el.

No tardaron en entrar en los estudios donde Rachel salió corriendo hacia el estudio con su guión en la mano mientras Sam se quedaba aparcando. Habían llegado poco más de media hora tarde, en circunstacias normales se habrían llevado una buena bronca por retrasar el rodaje pero al ser el último día de rodaje de la temporada decidieron déjarlo pasar.

Rachel llevaba cinco años trabajando en aquella serie de televisión, lo que equivalía a que estaban terminando de grabar su quinta temporada. La gran oportunidad se le había presentado a la actriz cuando se encontraba trabajando en Broadway, en el musical de Funny Girl. La chica era la revelación del momento y todo habían quedado sorprendidos por su talento por lo que a nadie le sorprendió cuando se anuncian que la FOX la había contratado para ser la protagonista de una nueva serie de televisión. Lo que sí sorprendió fue que abandonada Broadway meses después de haber debutado, la chica se estaba jugando su futuro. Si aquella serie fracasaba no podría volver a los escenarios después de la forma en la que se había marchado pero si triunfaba, todos sus pecados serían perdonados.

Cuando la chica abandono Nueva York no sólo dejo atrás el musical, sino en general todo su vida anterior a ese momento, hacia años que no hablaba con Kurt o que no veía a Mercedes. Santana, convertida en su representante, y Sam, con ganas de llevar su carrera al siguiente nivel, se habían marchado junto a ella cuando había decidido aceptar el trabajo en televisión. Poco antes de aceptar aquel trabajo, todos estaban en Nueva York y habían prometido verse seis meses después en su apartamento pero esa promesa nunca se cumplió. Al menos no se cumplió por parte de Rachel porque Santana y Sam sí regresaron a la ciudad para reunirse con sus amigos.

Al mudarse a la ciudad del sol, la actriz intentó mantener lazos con su vida anterior, pero después de un par de semanas deprimida sin ningún ánimo o ilusión decidió que no podía seguir así y corto los lazos. Rachel había dejado muchas cosas atrás al irse de la gran ciudad pero sobre todo había dejado atrás a Quinn y esa fue la razón que le llevó a desconectares de toda su vid anterior. La rubia vivía en Nueva York junto a Kurt y Blaine y también pasaba gran parte de su tiempo junto a Artie o Mercedes si estaba en la ciudad, todos eran grandes amigos e inseparables. Esto implicaba que si Rachel iba a la ciudad a visitar a Kurt o alguno de los chicos, su encuentro con Quinn era inevitable, al igual que lo era que el nombre de la rubia saliera a menudo en las conversaciones que mantenía con sus amigos.

Su relación con Quinn había sido sin dudar una de las mejores cosas que le había pasado en su vida y el hecho de terminarla había supuesto un gran golpe para la actriz. Quinn y Rachel habían estado siendo oficialmente pareja por más de un año entre New Heaven y Nueva York antes de que rompieran. A pesar de la distancia y sus diferencias conseguían llevar bien la relación porque realmente se querían. Todo explotó entre ellas cuando Rachel aceptó el trabajo en Los Ángeles sin ni dei quiera consultarlo con Quinn que se encontraba tramitando todos los papeles para trasladar sus estudios a la ciudad y abandonar así New Heaven, no solo porque Rachel estuviera allí sino porque amaba la ciudad. La noticia de que Rachel tomara aquella decisión dando por hecho que Quinn la seguiría sin pensar al otro lado del país no fue algo que la rubia se tomara bien, había llegado un punto en el que no podía seguir cediendo en todo para poder mantener su relación con Rachel, si ella no ponía de su parte, Quinn no podía hacer nada más. Lo que más había dolido de aquella ruptura fue que se seguían queriendo, fue una ruptura llena de amor en el sentido de que la habían llevado a cabo para que cada una pudiese tener un futuro mejor y no ser arrastrada por la otra.

Habían prometido seguir en contacto, escribirse, hablar… pero todo aquello dolía demasiado, ¿cómo seguir hablando a diario con una persona que sabías que no verías en mucho tiempo? ¿cómo intentar ser amiga de alguien a quién quieres con toda tu alma? Habían sido cuestiones que habían pasado por l mente de ambas chicas y que las llevó a terminar alejándose y a no haber mantenido ningún tipo de contacto directo en los últimos cinco años. Lógicamente Quinn sabía de la vida de Rachel ya que era famosa y sus apariciones en revistas, galas de premios o televisión eran inevitables, y a su opinión parecía irle bastante bien. Rachel, sin embargo, había tardado mucho más en tener alguna noticia de Quinn, la rubia había finalizado correctamente sus estudios en arte dramático antes de comenzar a buscar trabajo en pequeñas obras y series de televisión. No había sido hasta poco tiempo atrás cuando Quinn había comenzado a aparecer en el círculo de los famosos gracias a su buen trabajo en varias películas cada vez con papeles más relevantes.

Desde Quinn la morena no había vuelto a tener una relación seria, al menos ninguna que mereciera la pena mencionar, en cinco años había salido con varios chicos pero nada que durara más de unos meses. De hecho la relación más larga que había tenido hasta el momento por extraño que aún fuera para ella era con Sam. Al llegar a Los Ángeles el chico había continuado su carrera como modelo gracias al éxito conseguido en la campaña que había realizado en Nueva York para una gran marca de calzoncillos. Sus numerosas campañas, su buen ver y su cuerpo le habían hecho poco a poco convertirse en alguien realmente famoso que era invitado a numerosas fiestas todas las semanas, lo que poco a poco le estaba introduciendo en el mundo del cine y la televisión. Su fama y su conocida amistad con Rachel le habían llevado a aparecer en la segunda temporada de la serie de su amiga durante varias capítulos, lo que se convirtió en algo permanente después de ver el tremendo cariño que los espectadores habían cogido a su personaje.

Desde entonces habían pasado mucho más tiempo juntos y por casualidades habían encontrado dos casas perfectas una en frente de otra en un buen barrio residencial de Los Ángeles, lo que les llevaba a pasar todavía más tiempo juntos. Rachel siempre se había llevado muy bien con Sam en el pasado, en su época en Lima le había considerado un buen amigo y le había ayudado cuando su familia había tenido problemas de dinero, más tarde tras la muerte de Finn incluso tuvieron varios momentos de tensión en los que finalmente no ocurrió nada ya que la morena siempre consideraba que no era la correcto. Pero ahora estaban los dos en LA casi todo el tiempo juntos y no sé podía negar que la química que sus personajes tenían en la gran pantalla era consecuencia de la química que tenían en la vida real ambos amigos. Porque Rachel lo tenía claro, eran amigos a pesar de todo o eso se decía ella, llevaban acostándose más de un año y medio y pasaban juntos la mayor parte del tiempo del que disponían pero no habían hecho ninguna aparición publica en premios o revistas para confirmar lo que las revistas llevaban mucho tiempo rumoreando, que los dos actores protagonistas de la serie de Rachel eran pareja.

Por otro lado Rachel tenía a Santana, después de muchas vueltas en su vida había encontrado su camino el día que decidió ser la representante de Rachel y se trasladó junto a ella al otro lado del país. Poco a poco la latina con sus técnicas de persuasión, su seguridad en sí misma y su talento habían conseguido que fuera teniendo poco a poco varios artistas más a su cargo de gran talla. A pesar de la de años que habían pasado Santana seguía manteniendo una relación extraña y esporádica con Britt, y por ello era la única del grupo con la que Rachel había mantenido el contacto gracias a sus visitas y finalmente su mudanza tambien a la ciudad.

Y después de tantos cambios allí se encontraba, saliendo al atardecer del estudio después del último día de rodaje, ya sólo le faltaba la última temporada de la serie y podría empezar nuevos proyectos que tenía entre manos. La sería había sido todo un éxito en su estreno, concierto endose en una de las más vistas de la televison debido a los temas reales que habían tratado, mezclados con un toque de humor, música y vivir vías personales de Rachel pero había. Decidió que la sexta temporada sería la última, no querían explotar más de lo posible el éxito. Cuando llego al parking Sam ya la esperaba apoyado en el coche, el chico había terminado de rodar un poco antes que ella pero la había esperado para llevarla a casa una vez más.

Vio en su móvil un mensaje de Santana invitándola a su casa a cenar por lo que tuvo que rechazar la idea de sam de pasarse más tarde a verla porque iba a ver a su amiga. Descanso un poco en su casa con una larga ducha de agua caliente antes de vestirse y salir hacia el apartamento de la latina. No tardo en llegar al centro de la ciudad donde dejo el coche aparcado frente al apartamento, saludo al portero del edificio al que conocía más que de sobra y subió al ascensor.

-Por fin llegas- dijo la latina cuando abrió la puerta.

-Yo tambien me alegro de verte San- dijo irónicamente Rachel mientras entraba y se acomodaba en el sofá.

-Empecemos bien- dijo ofreciendo una copa de vino a la morena.

-Gracias- acepto la chica- brindemos por mis merecidas vacaciones.

-De hecho de eso quería hablarte- comenzó a decir la latina- no vas a tener tantas vacaciones como pensabas.

-¿De qué estas hablando?- preguntó Rachel confusa.

-Tengo un proyecto para ti- explico la latina- me dijiste que querías hacer cosas nuevas cuando terminaras la serie pero he pensado que podrías empezar ya poco a poco a enseñar el resto de tus facetas.

-¿Qué tienes entre manos?- preguntó Rachel ya más curiosa.

-Una película- anuncio por fin la latina- tendrás que hacer una prueba para el papel pero será puro trámite porque el director te conoce bien.

-¿Y por que me conoce tan bien?- preguntó mientras tomaba un sorbo de su vino.

-Porque es Artie- respondió Santana provocando que Rachel casi se ahogará con el vino.

-¿Artie? ¿Nuestro Artie Abrams?- preguntó Rachel cada ve más atenta a la conversación.

-El mismo- contesto Santana- le han ofrecido hacer la trilogía de los libros esos famosos, los de las chicas que compiten por vivir…

-Los he leído- interrumpió Rachel- son geniales.

-Artie me dijo que la protagonista le recordaba a ti por lo fuerte y decidida que era pero sobre todo cabezota- se burló la latina.

-Eso significa que… ¿haría tres películas?- preguntó ilusionada.

-A no ser que haya un gran problema deberían de hacerse las tres películas- le explicó Santana- qué me dices, ¿aceptas?

-Estaría loca si rechazara esta oportunidad Santana, la gente está deseando que estos libros se conviertan en películas, ser la protagonista me convertiría en el centro de todas las miradas… porque sería la protagonista ¿verdad?- había reparado en que Santana aún no le había dicho cuál sería su papel.

-Serás la protagonista- afirmó Santana.

-Perfecto, ¿alguna idea de quién será la otra chica del libro? ¿la que siempre va conmigo?¿alguien famosa?- preguntó mientras servía una nueva copa de vino.

-Artie me dijo que el casting está en proceso, se ha presentado mucha gente pero que él no está encargado de eso que lo único que ha pedido por favor era tu presencia y lo ha conseguido- le dijo la latina.

-Entiendo, ¿cuándo tengo que ir entonces a hacer la prueba?- volvió a preguntar.

-Dentro de dos días, mañana te confirmo la hora y el sitio- le explicó su representante.

-Que ilusión, es genial Santana- dijo Rachel muy alegre.

-¿No vas a decir cuanto te alegras de tenerme de representante o qué quieres subirme el sueldo?- bromeó la chica.

-Me alegro mucho pero ya te pago bastante- continuó riendo Rachel.

Los dos siguientes días pasaron volando para Rachel que no había hecho otra cosa más que leer y memorizar el guión con el que se había marchado del apartamento de Santana al recibir la propuesta de trabajo. A pesar de que la latina le había dicho que Artie la quería a ella para el puesto y que era el único requisito que el director había hecho en lo que respetaba al casting quería demostrar al equipo de casting que se merecía ese papel y no estaba allí solo por su amigo.

A pesar de que había leído el libro tiempo atrás, le asombró lo bien escrito que estaba aquel guión, intentó memorizar varias escenas que le parecían realmente buenas para mostrar lo que tenía que aportar al personaje.

Cuando llegó al estudio donde las audiciones eran realizadas encontró que había varias chicas esperando para su papel. Esperó pacientemente su turno y cuando entró en la sala se encontró con una mujer y un hombre que se presentaron como los encargados del casting. Rachel no tardó en presentarse y comenzar la prueba, le hicieron interpretar varias partes del guión, los encargados quedaron sorprendidos al ver que la actriz ya se había preparado algunas escenas y memorizado varias líneas. Rachel jugaba con ventaja al saber que Artie la había pedido a ella pero sino hubiese sido así había una alta probabilidad de que la hubieran elegido gracias a su gran prueba.

Regresó feliz a su casa, no sin antes asegurarse de escribirle a Santana para contarle que todo iba genial y esperaba ansiosa su llamada confirmándole que aquel papel era suyo. Metió el coche en su patio delantero y antes de cerrar la puerta pudo ver que las luces de casa de Sam estaban encendidas y decidió acercarse a saludar, el rubio la recibió muy sonriente cuando abrió la puerta y la invitó a entrar.

-¿Cómo ha ido todo?- dijo mientras le daba una cerveza a Rachel.

-Genial, me encanta el guión y realmente espero que me lo den- respondió la chica.

-Artie te quiere, ¿por qué no iban a dártelo?- pregunto el chico.

-Pero quiero que me lo den por la prueba de hoy no por enchufe- protestó Rachel.

-Lo harán, estoy seguro- dijo sonriéndole- aunque eso implique que no te puedo llevar de vacaciones.

-¿Me ibas a llevar de vacaciones?- preguntó riendo Rachel.

-Quería llevarte a México para que te pasaras una semana tumbada al sol- le explicó Sam.

-Por suerte para mí en Navidad hace muy buen tiempo en Hawaii- bromeó la chica.

-Entonces ya tenemos plan- dijo Sam a modo de aceptación de la propuesta- ¿Quieres ver una película?

-Solo sí la elijo yo- respondió la actriz.

-Ya sabes donde están los dvds- aceptó el rubio.

Rachel se levantó para ir a la estantería del fondo del salón del chico donde había una gran colección de películas, en circunstancias normales la mayoría de las películas de Sam serían de acción y aventuras pero la presencia habitual de la morena allí habían hecho que aparecieran entre ellas algunos musicales y películas románticas. Cuando colocó el cd en el reproductor volvió el sofá para tumbarse apoyada en Sam y disfrutar de una noche tranquila y relajada,

Tan solo hicieron falta un par de días después de su audición para tener noticias al respecto. Rachel acababa de llegar de hacer la compra, algo que estaba empezando a convertirse en una pesadilla ya que siempre encontraba algún fotógrafo a su salida, cuando el timbre de su casa sonó, se quedó pensativo antes de acercarse a abrir, no esperaba a nadie a esa hora. Al abrir la puerta se encontró con su amiga y representante que sonría de oreja a oreja, no esperó ni que Rachel la invitará hablar, simplemente la hizo a un lado y fue directa a soltar su bolso en el sofá.

-Como en tu casa Santana- dijo irónicamente Rachel.

-Relaja ese tono enana- dijo la latina con su habitual tono- te traigo noticias.

-¿Qué pasa ahora?- preguntó la morena.

-Me han llamado por tu audición, enhorabuena, el papel es tuyo chica- le comunicó sonriente.

-Oh dios mío- Rachel saltó de alegría antes de acercarse a darle un abrazo a Santana- es increíble.

-¿Sabes lo mejor?- preguntó Santana y Rachel la miró expectante- no solo has conseguido un papel en una película sino en tres porque ya se ha firmado el contrato para la trilogía.

-¿En serio?- preguntó sorprendida, no podía tener tanta suerte.

-En serio- aseguró la latina- acabas de conseguir el papel protagonista de una de las películas que están destinadas al éxito.

-¿Cuándo empiezo?- preguntó aún emocionada.

-Mañana vamos a firmar el contrato- le explicó la chica- pero aún tienes una semana de descanso porque no han terminado las pruebas del resto de personajes de la película.

-En tal caso vamos a celebrarlo- Rachel sacó de la nevera una botella de vino y dos copas del armario.

Rachel y Santana celebraron haber conseguido el papel en aquella película como el mejor éxito en la carrera de la morena, más incluso que cuando consiguió la serie ya que aquello fue un poco más amargo al final. Una copa de vino siguió a otra y a otra hasta que terminaron la botella entera. Tanto fue así que la latina se quedó a dormir en casa de su amiga para ir directamente a la mañana siguiente con ella a los estudios donde tenían la reunión para la firma del contrato. Quizás no fue la mejor idea acostarse tarde y aparecer con resaca el día que firmas tu contrato para una gran producción de Hollywood pero a Rachel no le importó nada en el momento en que su nombre estuvo escrito junto a una estrella en todos los papeles que fueron necesarios.

Aquella firma significaba un éxito en la carrera de Rachel, un gran papel en una trilogía de películas basadas en unos exitosos libros que habían vendido millones de copias por todo el mundo. Además llegaba en el mejor momento porque su serie estaba a punto de terminar y ese proyecto le abría muchas puertas de cara a su futuro. Rachel salió junto a Santana de aquel estudio, lo que la morena no sabía era que aquel papel le iba a dar un giro a su vida entera y no solo en lo que al trabajo se refería.


Como les prometí aquí les dejo el primer capítulo de la segunda parte de la historia 'Quería que te sintieras especial'

Han pasado cinco años desde que Rachel cogiera la oportunidad de irse a LA a grabar una serie de televisión, dejando NY y con ello a Quinn allí.

No se enfaden con este primer capítulo introductorio, la rubia aparecerá ya en el siguiente

Noten que he dejado muy claro que Rachel piensa que Sam es solo su amigo... lo advierto antes de que alguna Faberry me ataque! jajaj

Yo también amo a las chicas juntas pero primera deberán reencontrarse y enfrentarse al pasado y además... ¿no creen que Rachel va a tener que trabajar un poquito para recuperar a Quinn?

Actualizaré muy pronto, lo prometo! Espero que me acompañen también en esta historia y dejen sus opiniones a lo largo del camino :)

Gracias a los que vienen desde la primera historia y bienvenidos a los nuevos!