Un nuevo comienzo

La mañana era hermosa y perfecta, excepto para un chico rubio que caminaba cabizbajo por el parque.

Alzo su cabeza y las palabras que días atrás le había dirigido cierta peli rosa retumbaron en su cabeza, como si fueran martillos de hierro.

"Yo… lo siento mucho Tadase, eh tomado mi decisión. Lamento mucho lo que ha pasado, pero… al fin me di cuenta de que a quien amo de verdad es a Ikuto…"

Tomo su cabeza con sus manos y la agito, intentado sacar esas dolorosas palabras de su mente.

Al no tener ya mas fuerzas para continuar, se sentó en una banca cercana, suspiro larga y pesadamente, mientras en sus ojos comenzaban a asomar lagrimas cristalinas.

-Toma- susurro una suave y aguda voz.

-¿M-mashiro-san?- pregunto Tadase, alzando su cabeza, algo sobresaltado.

La joven reina lo miro, y sin decir nada extendió su mano, en la cual reposaba un pañuelo blanco de papel.

-A-arigatou- contesto cortésmente, tomando aquel trozo de papel para secar las pocas lagrimas que de sus ojos habían escapado.

La chica se sentó a su lado y espero en silencio.

-¿Qué haces aquí?- pregunto con su fría y usual voz.

-Eto... yo…- balbuceo Tadase, no quería que todos supieran el sufrimiento que en su corazón yacía.

-De acuerdo, si no me lo quieres contar esta bien, a veces hay cosas que no se deben compartir- comento la pequeña rubia, con la amabilidad impregnada en su voz

Él la miro, un tanto sorprendido. La Reina solía ser un tanto fría y reservada, nunca había mostrado un lado tan comprensivo, o al menos no con él.

-No!... es solo que… es difícil y yo…- más lagrimas escaparon de sus ojos, a lo cual las limpio con el pañuelo que, momentos atrás, Rima le había ofrecido.

-Tiene que ver con Amu- afirmo Rima, cerrando los puños imperceptiblemente.

-¿Cómo lo supiste?- la incredulidad destilaba en la voz del joven guardián.

-Solo hay una cosa que puede poner lagrimas en los ojos de un hombre…- comenzó sabiamente- El amor- finalizo girando su cabeza, para ver directamente los ojos miel de su acompañante.

El chico desvio la mirada y sonrio con tristesa.

-Pues si, supongo que tienes razón.- susurro, haciendo que el flequillo cubriera su rostro

La guardiana tomo el rostro del joven entre sus manos y lo alzo, queriendo que la viera fijamente, a lo cual Tadase se sorprendió, sonrojándose un poco.

-M-mashiro-san…-

-Escucha.- interumpio Rima- Sea lo que sea que haya pasado, tienes que superarlo porque eres fuerte; quizá algo timido, pero tu puedes superar cualquier adversidad. Es por eso que eres el Rey-

Tadase la miro con admiración y el sonrojo en sus mejillas creció aun mas.

-Arigato… Rima-chan- agradeció, con una amplia sonrisa pintada en sus labios

La Reina sonrio imperceptiblemente y dejo caer las manos.

-Cuando quieras- contesto ella, cerrando los ojos.

El Rey se acerco a Rima y beso su mejilla, causando que la Reina abriera los ojos y lo mirara con incredulidad.

-Creo que de ahora en adelante seremos mas amigos que antes, porque desde hoy es un nuevo comienzo- comento Tadase, sonriendo de nuevo

Ella le devolvió la sonrisa, mientras un ligero sonrojo tomaba lugar en el rostro de ambos guardianes.

"Quizas…" pensó con alegría la Reina, mirando como el sol se ocultaba para dar lugar a una brillante luna.

Ohio!

Qe tal todos, eh vuelto con esta linda historia Ridase.

Se que a muchos no les gusta esta pareja pero a mi me fascina ^-^

X cierto prometo actualizar "Encubiertos" el sábado o domingo a mas tardar

Recuerden que dejar Reviews disminuye la probabilidad de morir ahogados :)

Rima: No es cierto y lo sabes ¬¬

Yo: Shhh, es un secreto :s

Rima: O.o qe loca…

Yo: Uhm ¬¬'

Viaje bueno a todos! XD