Personajes de Mizuki e Igarashi.

La imagen de portada es de mi amiga Rosdiana la mejor ilustradora.

El color por mi amiga incondicional Mariela.

Un beso a ambas las adoro.

Mayo 1950.

-En esta época del año, me acuerdo... como quise que tu padre asistiera al festival de mayo.
-¡Pero no pudo ir porque te habían castigado por culpa de mi tía Paty, en el pasillo del colegio San Pablo la descubrieron con July uno, tu saliste en su defensa, llamándole cabeza hueca a la madre superiora y bla, bla, bla...!
-¡Hijo no me dejas terminar la historia!
-Es que mamá ya me la has contado ciento de veces... voy saliendo tarde me veré con el Dr. Martin. Me va mostrar su nuevo proyecto.
-¿Escuché bien...? ¿Dijiste Dr. Martin?- entró sorpresivamente Annie al comedor en compañía de su esposo Archie y Albert.
-Hola prima Annie siempre tan oportuna.-saludó George William el tercer hijo de Candy.
_Candy no deberías dejar que se la pase tanto con ese señor que bien ya no tiene pinta de borracho pero parece médico loco.
-Gracias, por preocuparte Annie, pero no creo que sea mala influencia para el pequeño Will dejó la bebida.
-¡Hijo antes de que te vayas dale un beso y un abrazo a tu adorada madre!
-De acuerdo, padre no se te olvide prestarme el auto para llevar a Mili al río...
-Mi hijo ya está creciendo le pedirás que sea tu novia ahí en el mismo lugar donde tu padre me rescató ¡Qué romántico!
-¡Mamá!- expresó avergonzado.
-Ya no te entretengo hazme un favor en cuanto pueda pasa por el correo y envía esta foto a la dirección de tu hermano que está Chicago, antes de que cierren.
Will, Ojeó el sobre - ¿En serio, mamá? Es la foto de él, con mi hermana y conmigo en brazos.
-Es para que mi bello nieto vea como era sus padres y sus tíos de pequeños.
-Pero yo estoy desnudo.
- En aquel momento no te daba vergüenza que menos te dé ahora. ¡Vamos ve ya! ¡Antes de que se te haga tarde!

En la clínica feliz
-¡Hola muchacho pensé que nunca vendrías, acompáñame!- El Dr. Martin no lo dejó ni saludar.- ¡Taran, te muestro mi nueva creación!
_ Un cadillac del 49- con una ceja arqueada dijo- ¡Que innovador!
- No es cualquier cadilac es el auto del futuro con el podre ir a cualquier lugar quizás vaya por más Whisky gratis.
- ¡Doctor!
- Es broma ja, ja, ja,ja lo dejé.
- ¿Cuándo lo probamos?
- En la noche.
- Esta bien mis padres hoy saldrán a cenar fuera, celebrarán el día en que se conocieron en la Colina de Pony, por cierto ¿Qué hora es?
- Las cuatro.
- ¡Rayos ya cerraron el servicio de correo!- llevándose la mano a la cabeza se lamentó- Mañana lo enviaré.- Lo dejo nos vemos en la noche. – Salió a prisa.

En la noche

Candy salió glamurosa al lado de su amado esposo a pesar de ser una mujer de 54 años de edad y él un hombre de 65 años aún conservaban la elegancia y belleza que los caracterizaba.

-Hijo pórtate bien no hagas travesuras ante nuestra ausencia ¿De acuerdo?
-Mamá ya soy un hombre de 17 años, tengo casi la misma estatura de mi padre ¿qué más quieren?
-Tienes razón y sus mismos color de ojos azul cielo, nunca dejaras de ser mi bebe. Nos vemos- Candy se despedía de su hijo- inclínate un poco- le empezó a peinar.
-¡Mamá!
-Es que andas un poquito desaliñado-expresó guiñándole un ojo- me haces recordar cuando me encontré con tu padre en la cascada.- Candy no pudo evitar sonreír por el recuerdo.
-Sí, mamá andaba desaliñado.
-¿Nos vamos? La noche es joven y promete, deseo bailar.
- Los años no pasan por ti.
-Ni por ti.- contestó Albert jocosamente.

En la clínica feliz del Dr. Martin el pequeño Will, llegó a la hora acordada él le explicó todo lo concerniente al funcionamiento de su nuevo invento que según él los llevaría a cualquier parte.

-¿A qué parte desea ir?

-Me gusta la época cavernaria-dijo con una risilla traviesa luego se retractó- es broma- suspiró- en realidad me gustaría volver a sentir el calor de mis padres tenerlos a mi lado, tú tienes mucha suerte los tienes siempre, sin ellos no estarías en este mundo.

Will un poco dudoso respondió- ¿Usted cree?
-Sí, sería justo en 1913. Por cierto te conté que en el año 1920 tuve la gran idea de este invento, fue al ir al baño resbalé, golpeé la cabeza contra la puerta y¡ taran! Fue toda una revelación...

Repentinamente se escuchó un estruendo sonido que provenía de afuera eran unos hombres buscando al Dr. Martin aparentemente se había llevado sin el permiso de uno de los más grandes mafiosos de la época una pieza cilíndrica del motor difícil de adquirir.

-¡Muchacho súbete al auto! ¡Huye!
-¿Por qué? ¿Qué pasa?
-Luego te explico ¡Vete!

Will se subió al auto siguiendo las instrucciones del doctor Martin arrancó al ver que los tipos iban atrás de él en sus autos aceleró de tal manera que los controles tomaron vida propia, seguidamente se abrió ante él un portal de luces de múltiples colores que lo traslado a otra época. Chocó contra un árbol.

-¿Dónde estoy? Parece un castillo de la época medieval. – Se sobaba la cabeza por el golpe recibido debido al impacto-Se escucha algo en los árboles. ¡Mamá!
Candy había caído encima de sus hijo, ella conmocionada al verlo dijo- ¿Príncipe eres tú?- se desmayó él trató de revivirla con suaves golpes en las mejillas.
_ ¡Mamá! Digo Candy reacciona.
-El pensó: No puede ser estoy en el pasado cuando mi mamá estudiaba en el San Pablo y mi papá de seguro a estas horas debe estar en el zoológico Blue River.
Candy reaccionó: - ¿Qué haces aquí príncipe?
Will carraspeó: -No soy príncipe mamá... digo Candy.
-¿Cómo sabes mi nombre, entonces... yo te lo dije en la colina de Pony?
-Mi nombre es...-Will miró para todas partes buscando una respuesta convencedora, al ver unas especies de ardillitas se le salió decir- ¡Ardi...Andy! Mi nombre es Andy Blue.
Candy arqueó una ceja:- Un nombre extraño.
-Es que soy de Irlanda, pero ya me regreso a ciudad natal.
-¡Espera!-Candy lo detuvo por un brazo- estas herido en la frente- Will se llevó la mano a la cabeza para corroborar lo que le decía su madre- te haré una curación, ven a mi cuarto.
-Te pueden castigar.
-Siento en mi corazón que te debo ayudar.
Will aceptó la ayuda. Tenía la misma agilidad para trepar árboles. Ya en la habitación de Candy.
-¿Quién lo diría que estas medicinas al final iban ser necesarias?
Al escuchar tocar la puerta, Will se levantó en seguida salió al balcón no quería causarle problemas a su madre.
Una vocecita entró por entre la hendidura de la puerta: -Candy soy Paty.

Paty había entrado con una caja de dulces. Will escuchó toda la conversación de inmediato supo que era el día en que fueron castigadas, dado que ella le quizo mostrar a Candy su más grande tesoro Hughley. Por lo que decidió distraer a la madre superiora para que no la castigaran de ese modo su mamá y sus papá acudirían al tan anhelado festival de mayo, se les cumpliría el sueño, ella vestida de Hada y el de caballero. En efecto, logró su cometido.
Su tía Paty se fue a su habitación sin ningún inconveniente. Él pasó la noche durmiendo al lado de su madre, se sintió como en casa al sentir el suave aroma de ella. Al día siguiente se levantó al primer halo de luz, se lavó el rostro y se despidió de Candy. Le gustó a ver tenido la oportunidad de conocerla joven.

Al regresa al futuro vio todo diferente extraño el hogar de Pony estaba en total ruina, el pueblo estaba envuelto en una neblina que le generaba pánico, un temor inexplicable, se sentía débil. La clínica feliz ya no estaba. Entró al hogar de Pony, vio a una monja con ojeras pronunciadas a leguas se veía la tristeza que inundaba su ser, a pesar de sus manos temblorosas logró tomar un sorbo de té de una vieja taza.
Will preocupado dijo:- Abuela María ¿Qué ha sucedido?
-Muchacho ¿usted quién es?
Will despavorido se alejó de ella un poco ¿cómo no lo iba a reconocer?
-Abuela soy el hijo de Candy.
-¡Oh Candy! Empezó a llorar.
-¿Dónde está el Dr. Martin?

La hermana María le era imposible responder.

Will se hacía ciento de preguntas-Él me debe de responder todas las interrogantes que tengo ¿Estaré en un mundo paralelo? Tras indagar en el pueblo sin respuesta alguna fue a Chicago ahí le informaron que el doctor había fallecido producto de una cirrosis hepática hace más de 15 años, no lo podía creer, desesperado por no saber nada de su familia entró a una hemeroteca, sin lidiar palabra alguna con la encargada se llevó varios periódicos y revistas viejas.

-No, no, no puede ser verdad ¡es mentira!- Su piel perdía lentamente la coloración.- Se subió al auto en medio de la exasperación dio marcha a 30 años atrás.
Había llegado a Chicago 1920, de inmediato preguntó por la clínica Feliz.
El doctor Martin como cosa rara estaba en estado de ebriedad.
-Hola... jovenzuelo ¿Qué desea? Lo viernes damos consultas gratis ja, ja, ja de hecho todos los días son gratis se les olvida pagar.
-¡Dr. Martin reconózcame soy el hijo de Candy y Albert, he venido del futuro porque el curso del tiempo se ha alterado debe ayudarme!
-¿Qué futuro? Ahora sí, que se me fueron las luces ja, ja, ja, ja dejaré de beber, pero mañana ja, ja, ja...

Will continuaba explicándole pero él sencillamente no le prestaba atención, hasta que se resbaló y golpeó la cabeza.

-¡Tengo una idea! ¡Crearé una máquina del tiempo, viajaré a donde quiera!
-Doctor Martin ya la creo y yo soy la prueba de ese futuro...
Posterior al haber asimilado toda la información proporcionada por el chico que tenía al frente, trató de buscar una solución creíble a todo lo que estaba viviendo.
-Pero es que yo no los conozco, sí he escuchado de las grandes corporaciones Ardlay que ha sido absorbida en parte por los Legan, que se han adueñado de casi todas la propiedades de Chicago, dieron créditos y al cabo de un tiempo aumentaron los interés a un monto impagable es así como varias familiares perdieron sus hogares.
Will se llevaba las manos a la cabeza- ¿pero qué pasó?
-Dices que fuiste al pasado y evitaste que tu madre fuera castigada para que tu padre se le cumpliera el sueño de asistir ¿cierto?
-Sí, tal cual se lo expliqué.
-Permíteme ver la fotografía de tus hermanos y tuya. Solo veo a dos personas.
-Mi hermano no está y mi hermana se esta desvaneciendo.

-Déjame ver el periódico.

Continuará.

Nota: actualización sujeta a números de comentarios jejejeje