- Matt - pronunció Near cuando por fin culminó con su gran torre de cartas.
El mencionado sin prestarle mucha atención contesto con un simple - ¿Umh? - aún seguía su vista en el PSP.
Quizás para los dos estar solos en una habitación durante más de 4 horas no era nada para ellos, ya que Matt se entretenía jugando un juego nuevo que salió, mientras que Near empleaba todo ese tiempo construyendo una ciudad de naipes alrededor de la habitación mientras pensaba y sus ideas fueron expuesta cuando el pelirrojo que estaba al frente prendió su sexto cigarrillo, llevandolo hacia sus labios para inhalar y exhalar el humo que le urgía al concentrarse.
Por supuesto, para Near ese humo le parecía muy molesto aun así, nunca lo trato de detener. Pues, ya se había acostumbrado a verlo SIEMPRE con un cigarrillo.
- ¿Cuál es la razón por la que fumas? Sabes perfectamente que corrompe tu salud y a medida que pasa los años el cáncer sin duda aparecerá y tendrás que cumplir con la sentencia que te ha demandado ese producto - Dijo por fin Near para atraer nuevamente su atención.
Esas eran las primeras palabras que se había oído después de 4 horas de silencio, Near miraba fijamente a Matt esperando una respuesta.
- Empezé a fumar desde la adolescencia... por esa razón se me hace muy difícil abandonar esta adicción, aunque sé que me hace daño tengo una dependencia que me obliga compulsivamente a consumirlo. - Respondió nuevamente sin levantar la vista.
Eso realmente fue muy curioso, la respuesta dada no era algo que él esperaba. Sin dejar que eso afectara a sus pensamientos prosiguió a seguir la conversación que inicio con la finalidad y con el verdadero objetivo de intervenir en la vida de éste chico que nunca le prestaba atención.
- ¿Y por qué no vas a un médico para que trate este hábito que tienes? - instigó
- Si lo dejo entonces mi cuerpo exigirá nuevamente lo que he dejado. Mi cuerpo reaccionará con un Síndrome de abstinencia y entonces sería algo que no deseo sufrir a estas alturas, y no me parece realmente necesario si el cigarrillo no me mata, definitivamente otra cosa lo hará. -
El albino parecía querer inmiscuirse en los asuntos de Matt y a pesar de que las respuesta recibidas no le estaba gustando para nada siguió pensando en una gran estrategia para que Matt aunque sea una vez levantase la vista para que se fijará en él.
- Entonces... si cambias ese hábito por otra ¿podrás dejarlo?
El chico alzó una ceja incrédula ante tal pregunta, y al no saber qué responder era la peor situación de su vida, fue difícil hallar una respuesta y lo que iba a decir a continuación no era algo que estuviera totalmente seguro de ello.
- Tal vez. - contesto con una voz seria para que aquel niño no pudiese encontrar su inseguridad.
Near ya tenía preparadas sus próximas palabras, él quería decirlo pero le estaba dando vergüenza que se sonrojo hasta las orejas sin poder evitarlo
- Matt, en ese caso ¿puedo ser tu nueva adicción?
Al escuchar esto, el mencionado levantó su mirada tan sorprendido que el cigarrillo cayó de sus labios al suelo y el juego que requería de toda su concentración lo perdió e inmediatamente la pantalla del PSP decía "Game Over"
Era increíble lo que esas palabras había provocado, primero en los últimos años, Matt nunca había perdido ni un solo partido de un juego y esta vez Near hizo que perdiera un juego era básicamente imposible. Segundo Near logró hacer que Matt -algo inusual- fijase su completa atención al pequeño albino.
Near celebró por dentro, por fin logró hacer que el pelirrojo le prestase atención. Aunque a cambio Matt consiguió ver un nuevo rostro de Near, la cara totalmente sonrojada de la vergüenza de ese pequeño... sin duda le provocó una nueva adicción.
Fin.
