Disclaimer: Ninguno de los personajes me pertenece.

Esta es una historia dedicada para Hyaku chan del Sburb Session -Ap13, por el Intercambio de San Valentín

"Como el café"

Nunca creíste que lograrías enamorarte. El amor no era precisamente la mejor de tus cualidades, Bro no te crío para eso, aun así cuando llegó Jade a tu vida, te resultó casi imposible negarte acercarte a ella. Era como una mala película de esas que le gustan ver a John Egbert, pero no lo mencionarías ahora. No arruinarías el momento que tenías con Jade. Aún más cuando te gustaba pasar el tiempo con ella.

A medida en la que iban caminando por el parque, no pudiste evitar sacar tus manos de tus bolsillos, para que, de manera tímida llevar tu mano hasta entrelazarla con la tuya. No, el contacto físico tampoco era lo tuyo, pero sabías lo mucho que le gustaba y tú no podías evitar buscar hacer cosas que le gustaban. Te gustaba verla sonreír. Te gustaba verla feliz, porque de alguna manera, tú también eras feliz.

Caminaron un poco más hasta que por fin se sentaron bajo de la sombra de un árbol. Era un día caliente y el sol afectaba a tus ojos, Jade siempre te cuidaba en ese sentido. No quería que nada te sucediese, se lo agradecías.

Lo primero que hiciste al llegar allí, fue mirar el suelo, no era como si es que fuese esta tu primera cita, pero era la primera vez que cumplías una larga relación con alguien, por lo que te costaba saber qué hacer. Jade busco tu mirada por encima de tus aviadores y tú la miraste con cierta curiosidad y ella se echó a reír. Tu alzaste la mirada, para verlo confundido. No atendías porque ella se estaba riendo.

—Eres un tontito, lo sabías—Replico ella acercándose a tus mejillas, y asentando tu mano sobre ellas.

Tu rostro pronto se pintó de rosado, pero aun así harías lo necesario para mantener tu pinta de chico cool. —¿Te estas burlando de mí?. ¡Eh!, Harley—Ella volvió a reír. —Tal parece que si—Le dijiste morder su mano, sin embargo, antes de que pudieses, ella se arrastró por lo que le quedaba de distancia de tu rostro y no dudo dos veces en sacarte las gafas.

Tú se lo permitiste. No es como si es que te molestará ya más el hecho de que la gente viese tus ojos.

Aun así, tus manos se pasearon por el rostro ajeno también y buscaste sus gafas, y en el momento en el que las agarraste, le sonreíste, si, eso también pasaba mucho luego de que entraron y se hicieron algo más. —Dos pueden jugar el mismo juego. —Le dijiste retirándole las gafas, para luego de ello, guardarlas en tu bolsillo.

Sabías perfectamente que ella no te vería sin las gafas, siendo ese el caso, te acercaste mientras con tu pulgar acariciabas su mejilla. Y te acercaste hasta posaste sobre su nariz. —Espero que puedas verme—Le dijiste en tono de burla. —Si te veo, bobo. —Te replico ella.

Tú en ese momento solo moviste tu cabeza de un lado a otro, esto era lo que las personas llamaban un beso esquimal. Y pese a que este no era el primero, ni sería el último, seguían siendo especiales.

Sin ser demasiado obvio y con cierta lentitud buscaste su mentón para suavemente dirigirlo a tus labios y plantarle un beso.

Si, quizás esto era lo que necesitabas para poder estar un poco más tranquilo.

Ella se dio cuenta de eso.

Ella siempre se daba cuenta si algo pasaba. Era un truco que creíste, nadie además e Rose podría lograrlo.

—Feliz primer año—Le murmuraste.

—Disculpa, no te escuche, ¿Crees que puedas repetirlo? —Tú gruñiste ante sus palabras. —Solo porque eres tu Harley, si no olvídate de que lo estuviera haciendo.

Pese a que sonabas a la defensiva, habías caído ante sus palabras, no creías que podrías esquivarla ahora ella, así de cerca.

—Feliz año—Le repetiste a medida que te acercabas a su oreja en forma de susurro.

Ella se emocionó mucho, que inclusive se lanzó sobre ti para darte un abrazo, tu lo único que pudiste hacer, es sostenerla, no permitirías que se caiga. No en tu guardia.

—I love you—Te dijo ella, mirándote con los jades que tenía por ojos.

—Love you too swettie—Nunca creíste que el amor podría ser tan agradable como un poco de café en una noche fría.

No había nada tan dulce.

Es el primero de 5, ¡Espero que sean de tu agrado!