El amor es, más bien, una confluencia de dos vidas que se unen con el afán de fundirse, confundirse en una sola.
- Manuel García Morente
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Capitulo 1
Podia escuchar a los demas, hablar en la habitacion continua. Yo estaba encerrada en mi mundo o eso pretendia, aveces no es tan bueno ser la encargada. Observaba un lapiz con el que jugaba en mi escritorio. ¿Cuando se pondrian de acuerdo, solo era un nuevo diseño', por Dios.
- ¿Acaso quieres que sea el diseño mas anticuado de la historia? -
- ¿Quieres que nos llamen los "atrevidos mas tontos"? - Bien tal vez era hora de interrumpir.
- Chicos - Me levante del escritorio y fui hacia aquella habitacion, donde teniamos los cientos de bocetos para hacer nuevos diseños, de ropa o accesorios.
- Emily, dile a este que su idea es simplemente mala -
- No, Emily, dile a ella, que su idea es aburrida y sosa -
- Bien, Calma, los dos, no quiero mas peleas, ¿si? - pero en cuando se miraron, la pelea continuo. Charly y Cathy, siempre peleaban, aunque fueran primos. Eso no lo impedia.
- Veraz que Corinna, aceptara mi idea -
- oh pero por supuesto y tambien pondras tu cara de mojigata supongo -
- Eres un... - y antes de que aquello se volviera la tercera guerra mundial un hombre interrumpio.
- ¿Disculpe? - era alto, traia un traje negro y pelo hacia atras color castaño - ¿podria decirme quien esta a cargo aqui? -
- Yo, a sus ordenes - sali de entre los dos primos. Sintiendome avergonzada por ellos, al fin y al cabo eran mi responsabilidad, y tambien por el echo de que habia dejado mi puesto.
- Bien, ¿podria acompañeme? - Acenti y mire a los dos primos para que dejaran su pelea para despues. Me llevo hacia un extremo del lugar, justamente al mostrador, donde podia ver, a traves del amplio ventanal un auto estacionado. Yo no se de marcas, pero se veia costoso.
- ¿Digame? - hable con toda la cortesia posible, aunque aquella escena me parecia un tanto escalofriante.
- Bien, vera... mi jefe necesita entrar a su tienda, pero primero necesitamos verificar si esto es... ¿discreto? - la ultima palabra me sono un tanto extraña.
- Realmente no lo entiendo señor -
- El necesita que esto sea de la mayor discrecion posible, no queremos personas atosigandolo o cosas por el estilo - Los pequeños ojos de aquel hombre me indicaban lo mucho que le costaba explicarse sin tener que perder la pasciencia. Por suerte mi cerebro capto la idea inmediatamente.
- Oh, claro... yo me asegurare personalmente de que la visita de su jefe ocurra sin contratiempos, pero pido que me diga su nombre -
- Me parece aceptable. Bill Kaulitz. - y el hombre se alejo y fue hacia el auto. Me recline en el mostrador, encajando las uñas en este. Corinna me mataria. Seguro. Los chicos se hacercaron a mi, ambos con la interrogante en su cara.
- ¿que pasa? - pregunto Cathy. - ¿algo malo?, ¿malas noticias?, oh por dios no digas que son malas noticias -
- Cathy, calmate, me asustas mas que Emily -
- Bill Kaulitz -
- ¿Que es lo que tiene? -
- Pues el entrara en la tienda... justo ahora - Y lo vi. En la entrada con el hombre detras suyo. Traia un gorro sobre su cabello y jafas enormes, una chaqueta negra y pantalones de mezclilla.
- Buenas tardes - Se dirigio hasta donde nosotros nos encontramos.
- Bienvenido a Corinna´s boutique, ¿en que puedo ayudarle? - mostre mi mejor sonrisa, pero no tanto para asustarlo.
- Gracias, solo estoy buscando algunos accesorios -
- Bien, pues esta de suerte tenemos los mejores de toda Alemania -
- Eso he escuchado -
- Por favor dejeme conducirlo a lo mas nuevo que tenemos - le hice un ademan, para que pasara a uno de nuestros pasillos. La verdad no me gustaba tratar a la gente como su hubiera caido del cielo, pero en casos como estos, era mejor que lo hiciera "una remuneracion gorda" decia Corinna. queria decir que mi paga lo seria tambien.
El caminaba por el pasillo observando cada uno de los aparadores.
- Ahi algo que le interese -
- Si, bueno... si - parecia inmerso. - Pero podrias hablarme de que es exactamente lo que voy a comprar.
- Por supuesto - aunque pareciera que tenia respuesta para todo, no sabia "Exactamente" a lo que se referia. - Este por ejemplo es un diseño unico, se hizo aqui mismo - Tome un collar, cuyo diseño era de mi autoria. Apenas lo habian colocado esta mañana en el aparador.
- ¿Es un diseño propio? - Me sorprendio su pregunta. Pero deduci que la mirada que le lanzaba a mi obra, era mas reveladora de que lo que pretendia.
- Si, lo es, pero ahi muchos mas. ¿Tiene un gusto en especifico o desea verlo todo? -
- No es que tenga un gusto, solo compro lo que me gusta - Claro, asi es para las personas que no tienen que preocuparse por el dinero.
- Me lo imagino -
- Pero en si, ese collar me parecio hermoso - se hacerco con cuidado y lo toco con su dedo indice. Se quito las gafas, me dirigio una mirada rapida y me sonrio. - Me gustaria ver mas -
- Claro - abri el vidrio para colocar el collar en su lugar.
- No lo guardes, me lo llevare -
- Claro - esta respuesta sono un poco mas apagada, siempre me sentia asi cuando alguien se llevaba uno de mis "Bebes".
Recorrimos pasillos, mientras le decia de que material estaban echos, cuando y quien los habia echo.
- La tienda es bonita - acenti. - Pero me sorprende que no tengan grandes carteles o algo para llamar mas la atencion, jamas habia escuchado de ella.
- Todos saben que despues de la tormenta viene la calma. Asi que despues de un gran bullicio este lugar quedaria olvidado - atine a contestar.
- Hum... es verdad. Pero... bien, si me parece que no le vendria mal un poco de propaganda -
- Bueno, es lo suficientemente bonito para llamar la atencion, pero lo suficientemente sencillo para pasar desapercibido -
- Es verdad, por eso decidi parar a comprar algo -
- Hizo una buena eleccion - y sonrei.
- Tambien, me llamaron la atencion los diseños tanto de afuera y como veo, los que estan aqui dentro, todo esta decorado magnificamente -
- Oh, ¿enserio lo cree? - habian tocado mi punto debil. Yo habia hecho el diseño de aquel lugar. El me miro algo confundido, mi voz sono muy personal y conmivida .- quiero decir... nos esforzamos para que todo le resulte agradable.- de nuevo el tono profesional pero frio.
- Enserio amas tu trabajo - parecio decirlo mas bien para si mismo. Antes de volver a mirarme. El hombre que lo habia acompañado apararecio detras de el.
- Sr. Kaulitz tenemos que irnos -
- Oh... por supuesto - Note la decepcion que esto le causaba. - Bien, por hoy solo me llevare el collar - Me tendio una targeta de credito que yo acepte. Pude ver mas de cerca sus dedos. Algo huesudos, delgados y largos, tenian un toque de elegancia. Uñas esmaltadas de un negro profundo.
- Claro - Me aleje hacia el mostrador. Y como pensaba los primos habian estado siguiendo mis movimientos. Pero al llegar al mostrador, regresaron sus narices al papel. Cobre el collar y lo meti dentro de su correspondiente caja, negra con diseño en rojo. Fue extraño siempre me habia dolido vender a mis bebes, pero este collar, se habia quedado con una parte de mi. Emiti un corto y ligero suspiro para volver a recuperar la sonrisa profesional y darle esa parte de mi. - Que lo disfrute y vuelva pronto -
- Gracias, y si lo are - se habia vuelto a colocar los lentes obscuros .- y tambien regresare - me sonrio y tomo la bolsa para despues salir de ahi.
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Continuara.
Aqui mi primer capitulo de esta romantica historia, como se dieron cuenta, esta inspirada en Bill Kaulitz de Tokio Hotel.
Espero les guste tanto como a mi me gusta n.n!
Besos y que la disfruten :D
Deka
