Mi nueva historia!

Esta será probablemente un poco más corta! =P

Espero que les guste...

Disclaimer: Bones pertenece a Hart Hanson, FOX y Kathy Reichs

Dejenme su review! quisiera conocer su opinión! Besos!


El avión proveniente de Indonesia aterrizó con una hora de retraso, en el aeropuerto de Washington, caía una tormenta que empapaba a cualquiera que caminara por la calle tan solo unos pasos; la compuerta del avión se abrió, la Doctora Temperance Brennan respiró hondo "al fin de regreso" pensó, vio por última vez el trozo de papel que Booth le había enviado desde Afganistán, donde le indicaba la hora exacta de llegada de su vuelo y la hora en la que se verían en el carrito de café, se levantó de su asiento para tomar su maleta del compartimiento del avión, miró su reloj y maldijo el clima, llegaría tarde para ver a Booth, definitivamente llegaba tarde.

Apenas llegó a la puerta de entrada del aeropuerto vio a lo lejos un pequeño grupo de caras conocidas, caminó lento hacia el grupo, y los fue reconociendo uno a uno; ahí estaban Cam, Hodgins abrazando a Ángela, Sweets, incluso Caroline fue a recibirla, pero él no estaba, simplemente no estaba ahí, sabía que él lo vería en el carrito de café, pero tenía una hora de retraso y sintiendo como el corazón se le encogía llegó al pequeño grupo y apenas les sonrió, Cam fue la primera en abrazarla:

-Me alegra que haya regresado ya doctora Brennan, bienvenida.

-Gracias Cam- Brennan le contestó en un tono serio.

Se aproximó aún más al grupo y paseó una vez más su vista por todos sus amigos con la esperanza de que él se hubiera retrasado y simplemente fuera a llegar en el preciso instante en que ella cruzó el aeropuerto; pero no fue así, dejó su maleta de rueditas parada, posó encima la maleta que traía colgando de un hombro y continuó saludando a todos los presentes: Caroline, Sweets, Hodgins y Ángela por último:

-¡Hola Brenn!- la artista le abrazó fuertemente- me alegra que hayas regresado sana y salva.

-Gracias Ángela- Brennan se separó del abrazo y le miró a los ojos suplicante, como esperando que le leyera el pensamiento y le dijera algo acerca de Booth, ella le miró y asintió con la cabeza, como captando su mensaje, entonces hizo un ademán con la mano para indicarle que debían de hablar a solas.

-¿Qué ocurre Ángela?- dijo Brennan sin rodeos- ¿llegué muy tarde?- su cara reflejaba una desesperación y angustia palpables a distancia.

-Calma, calma Brennan…- la artista la tomó del brazo

-No Ángela, mira lo que me ha enviado- le dijo estirando la nota- he llegado tarde, por eso no vino a buscarme por eso… seguramente cree que lo olvidé… que no me importó…

-¡Brennan!- le interrumpió Ángela impaciente- Booth aún no llega, me envió un mensaje esta mañana, su avión se ha retrasado por culpa del mal tiempo, me pidió que te dijera que te veía mañana a la hora que te dijo, y…

- ¿Y?- Brennan le miró interrogante.

-Bueno no sé, pensé que lo sabías…- le dijo la artista sintiéndose culpable.

-Ángela acabo de llegar ¿cómo iba a saber eso? - dijo ella fingiendo tranquilidad, cuando en realidad sentía que algo en su interior estaba roto, como una profunda herida que sangraba desde el momento en que se separó de Booth, un año atrás, sin decirle que lo amaba, sin haber besado esos labios que se moría por probar.

-Bueno vamos, que todos nos están esperando- le dijo Ángela emocionada.

Tomó una ducha rápida, se maquilló con un poco de corrector para las ojeras, rubor, y un poco de gloss en sus labios, tomó una playera de manga larga negra, un poco ceñida y unos pantalones de mezclilla, se miró al espejo por última vez y salió del departamento, tomó su coche y condujo hasta el centro comercial, se estacionó, y con el estómago hecho un manojo de nervios caminó hasta el carrito de café, fue entonces cuando le vio, ahí parado, vistiendo unos jeans y un suéter a rayas, con las manos en sus bolsillos, viendo hacia el espejo de agua, el corazón de Brennan latió más fuerte, y caminó decidida hacia él.

-Buenos días- le dijo el encargado del carrito de café- ¿desea alguna bebida?

Brennan negó con la cabeza, caminó un poco más y cuando estuvo a unos pasos de él no supo que decir o que hacer, quería voltearlo y besarle, decirle que lo amaba, pero había algo en su interior que no se lo permitía, dio la vuelta y respiró profundamente cerrando los ojos, como reuniendo el valor para poder decirle "hola Booth ¿cómo estás?", abrió los ojos y justo en el momento en que se volvió para ver a Booth él le habló:

-¡Huesos! ¡Vaya, ya estás aquí!- exclamó el agente con alegría.

A Brennan se le heló la sangre y no supo que contestar, se quedó mirando a Booth quien se acercó más:

-¿Qué no me vas a saludar?- le dijo él mientras la abrazaba y la cargaba por los aires- vamos hace un año que no nos vemos…

"Un año sin ti" pensó ella.

-Ho… hola Booth- dijo Brennan nerviosa - ¿cómo te fue?- le dirigió una mirada extraña, nunca antes la había cargado así.

-Bueno que te puedo decir…- dijo el agente bajándola de nuevo al ver su mirada- cada vez son más jóvenes los chicos que entran al ejército…

-Ah vaya… es verdad…-dijo Brennan suspirando- me alegra que no te haya pasado nada malo, ¿Te importa si nos sentamos?- sentía las piernas de gelatina.

-No claro que no, vamos- Booth le notó algo rara, sin embargo no dijo nada.

Encontraron una banca cerca desde la cual podían observar perfectamente el espejo de agua.

-¿Recuerdas que quedamos en el espejo de agua?- preguntó el agente todavía recordando sus palabras de un año atrás.

-Claro es por eso que estamos aquí Booth- le dijo ella en su tono de "bueno-eso-es-obvio"

-Lo sé Huesos- le dijo tomándola de la mano- ¿cómo te fue en tu viaje?

-Fue algo increíble… descubrimos cientos de esqueletos muy antiguos, incluso redacté varios artículos bastante interesantes donde describo la importancia de la evolución desde los primates hasta nosotros y expongo parte de mis teorías, de hecho la próxima semana daré una conferencia por parte del Jeffersonian por ello…

-Que bien Huesos- le dijo mientras acariciaba la mano de ella con el pulgar inconscientemente- estoy muy contento por ti.

-Gracias Booth- a Brennan el roce del pulgar de Booth la hicieron estremecerse de pies a cabeza.

-Oye me gustaría celebrar que hemos regresado- le dijo el agente- ir a tomar una copa tal vez…

-Si claro, les llamaré a los demás.

-No, me refiero a nosotros dos solos- respondió el ex–ranger, mirándola a los ojos.

-Está bien- contestó la científica bajando la mirada hasta sus manos, que seguían unidas -¿A dónde iremos?

-Es una sorpresa- dijo el agente- ¿paso por ti a tu casa a las ocho?

-Si claro- le contestó ella levantándose de la banca, y soltando la mano de Booth.

Él también se levantó, se acercó a ella y viéndola a los ojos le dijo:

-Te extrañé Huesos, te extrañé mucho- la abrazó rodeándola completamente con ambos brazos.

-Yo también- fue lo único que pudo contestar ella.


Debe continuar?