Bueno, realmente, es bueno estar de vuelta. Probablemente, ninguno de los lectores que me conocieron con Reparando La Luna Nueva aun estará por aquí, pero aun así, no podría estar más feliz de volver.
Esta historia…esta historia. Ha estado conmigo un largo tiempo. Ha crecido conmigo, madurado conmigo. Data del momento en que cerré el libro de Amanecer (hace ya cinco años) y me puse a divagar en qué realmente pasaría después.
Es simplemente una de esas historias que merece ser contadas, solo porque guarda un lugar muy especial en mi corazón y me ha aguantado muchísimo tiempo. Ya la había intentado escribir una vez y tengo el prototipo de muchos capítulos, por lo que espero este sea un trabajo de edición más que de escritura, así que espero (no prometo) que las actualizaciones sean rápidas.
Realmente, escribir fanfics otra vez se siente como en casa, espero que estos capítulos les resulten lo suficientemente interesantes como para quedarse, los quiero a todos!
Las olas van y vienen con el viento,
pero, es la mar quien elige a que olas soltar,,
y también elige que olas se van a enfrentar
Por una hermosa lluvia en una lucha voraz.
Zarahi Castro
Viento y mar
Prefacio (renesmee)
Siempre he considerado la perfección como un arma de doble filo. En el momento en que la vez por primera vez, estas tan ciego por su belleza que te niegas a la posibilidad de que sea irreal. Antes de que te des cuenta estas atrapado en ella, tan profundo en sus entrañas que la aceptas como una normalidad. Luego te enfrentas a la horripilante verdad de tener que ver más allá de tus ojos, de percibir la verdadera esencia de la perfección. En ese momento, algo pasa, y esa perfecta fachada se va manchando cada vez más, como una hoja blanca a la que súbitamente le caen gotas de tinta. Empiezas a tener demasiadas pistas, te sientes confundido, perdido. Te has apegado tanto a la perfección que no puedes tolerar su verdadera identidad.
Sabes, muy dentro de ti, que esa verdad te matará.
Tristemente, esa descripción se adapta perfectamente a mí. Al crecer, realmente no podía imaginar nada menos que tenerlo todo. Mi mundo era dictado por el amor, la pureza, la belleza de una realidad que nunca había sido amenazada. Rebelarse contra eso es especialmente difícil. De pronto, te sientes asfixiada, como si toda tu vida estuvieras encerrada en una pequeña caja sin darte cuenta, sin agujeros para respirar, sin modo de salir. Y estas en tal estado de desesperación que te niegas a continuar allí.
Y eso era especialmente peligroso. Estar tan desesperada por cualquier tipo de emoción te enferma y te hace obsesionarte. Estar desesperada por emoción es doblemente peligroso.
Cuando la consigues, eres simplemente incapaz de dar vuelta atrás. De ver la verdad aun cuando está en tus narices. Se vuelve tu droga, tu adicción y eres simplemente demasiado inocente para darte cuenta.
Yo no sería nada especial, nada "anormal" si los principios de mi naturaleza no fueran excepcionales. Cuando algo extraño se vuelve incluso más extraño, resulta más fascinante, mucho más interesante para alguien ajeno a ello.
Yo soy, después de todo, el crepúsculo de una generación dorada. Hay tanto que se espera de mí, tanto que quieren que haga… cuando en realidad estoy por todas partes.
Tal vez no quiera ser el comienzo o el final de algo. Tal vez tan solo quiero se la mezcla perfecta de todo lo que está bien y mal en este mundo. Tal vez solo quiero hacer un desastre y no tener más remedio que acomodarlo más tarde. Tal vez solo quiero gritar y patalear hasta que mi garganta se seque y me ardan las piernas. Tal vez quiero salir y sentir algo más que seguridad. No quiero protección, no quiero cariño. Quiero ir y hacer el amor, sentir pasión, adrenalina, desesperación. Tal vez solo quiera sentir algo.
Tal vez no estoy luchando en contra o a favor del destino si no en contra de mi misma. Y justo por eso es que estoy perdiendo.
¿Pero y si están en lo cierto? Podría no saber vivir. Podría ser solo un patético intento de niña que quiere ser mujer. No vale la pena intentarlo, ¿no es cierto? ¿Para qué luchar si es un caso perdido? No se podía reescribir el destino. No debería querer ir en contra de él.
Pero era simplemente demasiado tentador como para no hacerlo. Deséenme suerte.
