La mascota de Sanji by Alvissaoikitsunechan o AlvissAKC

Pareja: Sanji X Zoro y otras que ya me saldran.

Genero: Romance. Humor.

Ok, gente veis la imagen del fic no? Pues quiero que os imagineis a Zoro con las orejas y la cola del peluche que tiene Sanji, sera algo así como un zorro raro, o vamos, yo creo que es un zorro, pero me gusto esta imagen n.n

Bien, sin na más que decir os dejo el primer capi XD

PD. El mundo es como ahora no el de One Piece, yo me he inventau to asi ke no os imagineis el mundo OP

Cap.1. Bienvenido.

Cuidad de Kotobasuke, en la universidad Kapon, un nuevo curso donde los internos convivirán con sus nuevos compañeros de cuarto durante la grandiosa cantidad de amargura se les alargaría 3 años bien largos. El gran edificio se alargaba muchos metros en forma rectangular, con un campus de ocio, donde contaban con gimnasio, con piscina, y otros más lugares de ocio que los chavales podían aprovechar mientras aprobaran adecuadamente las materias exigidas por la universidad.

Para cierto rubio, ese día iba a ser agotadoramente exasperante...

Sanji Pov´s

Genial, como si los problemas en casa no fueran suficientes, ahora tengo que venir a esta universidad de mala muerte...No me gusta estudiar, en sí, solo me gusta la cocina, como a mi abuelo, es algo así como herencia familiar. Sí, yo soy Sanji Kuroashi, el futuro aspirante a mejor cocinero de la historia, algo difícil para mí ya que estoy encerrado en esta puta prisión y ni siquiera dan la asignatura de cocina…

Imaginaos, todo mi sufrimiento empezó cuando lo conocí a él, repelente, dormilón, un capullo sin cuidado al que la mariconería de las cursiladas no le iba para nada.

Entre con mis maletas en lo que era el patio de entrada del gris edificio con cristales claros de los cuales se podía ver perfectamente la clase. Había césped artificial por la mayoría de la superficie del mismo y la fuente de delante redonda ocupaba no muchos metros pero era vistosa. La gente estaba, casi toda, en lo que eran los bancos debajo dela sombra de los árboles, algunos se abrazaban, posiblemente se conocieran de antes y estaban alegres de reencontrarse con su mejor amigo o amiga. Otra gente se despedía de los padres con abrazos y algunos con lágrimas dándose cuenta de lo mucho que habían conseguido llegando a la universidad. Y oh, dios que culos, que tetas y que cinturas tan delgadas…Sí, les estoy mirando cada parte de la anatomía a esas bellezas diosas de los harems de los cuales me gustaría ser sultán. ¿Y qué pasa? El caso era que yo no había venido con mis padres, ¿por qué? Pues porqué estaban muertos, así de fácil. El que se encargaba de mi era mi abuelo Zef, el cual siempre se quejaba, por muy buen cocinero que fuera, de que mantenerme era un gasto casi innecesario que casi no se podía costear, lo que me costo pagar la puta universidad en la que mi abuelo me obligo a entrar porque mi padre fue a esa misma universidad, y porque él fuera yo debía ir, muy bonito. Aunque para los años que le quedan al viejo por delante, mejor no digo nada e intento alegrarle un poco esa cara de viejo amargo que tiene, al cruzar por recepción y coger mis llaves de mi nuevo cuarto miro a la guía, parecía ser rusa por su accento al hablar, tenía el pelo castaño oscuro recogido en un moño alto, alta, de piel clara, con ojos marrones avellana y un poco gorda. Nos llevo por las instalaciones hasta llegar a un edificio de dos plantas, una era la de abajo, para las chicas que eran las que tardaban más a vestirse, y la de arriba la de los chicos.

Subimos los chicos las escaleras con desden, sin mucha importancia de cuantas había. Al llegar arriba la sargento rusa hablo claramente con voz grave:

─Parra empezarr, es posible que muchos de vosotrros tengáis compañerros de cuarrto. No os hemos avisado parra que no haiga quejas, cuando los que veáis que teneís compañerros, id al despacho del dirrector Shiusu y él os darra instrruciones sobrre vuestrros compañerros, ahorra sin más prreguntas estúpidas, id a vuestrros, rrespectivos aposentos, el rresto del dia se os darra librre, adiós y rrecordad que mañana empiezan las clases a las 08:00 en punto-sin nada más que decir se fue.

Genial, todo el día libre para desempaquetar cosas e ir con mis amigos, si, los tengo y aunque no me había cruzado con ellos, era por el simple hecho de que habían tres edificios por cada curso, A,B y C de mi categoría, yo era del C, y si no tenía mal entendido, Usupp, uno de mis amigos también estaba en el C, pero no le había visto…Da igual fui a mi habitación, la 208, y para mi suerte no debería compartirla con nadie. Había solo una cama, en el lado derecho, un escritorio en el mismo sitio enfrente de la cama, un armario a la izquierda y un cuarto de baño a la derecha. La habitación era de un color gris, y en el fondo de la habitación había una ventana que daba directamente hacía la fuente del centro, sonreí mientras abria la ventana para inhalar aire fresco, sí, ese curso no iba a estar mal después de todo en mi agradable soledad…

─¿Qué estas haciendo aquí?-pregunto una voz detrás de mí.

Me gire con el ceño fruncido, creía que había cerrado la puerta y solo con las llaves se podía abrir.

─Esta es mi habitación-deje claro al intruso enseñándole las llaves- ¿Ves? La 208.

El sujeto busco en su bolsillo y me enseño una llave también con el numero 208.

─Curioso, yo también la tengo-contesto mientras se quitaba la mochila de los hombros.

Iba a reprocharle, pero me quede estupefacto. Era un chico de pelo verde, cortito y un poco alborotado, de una extraña piel morena que incitaba a tocarla para comprobar si era tan suave como parecía ser a primera vista. Delgado pero musculoso a la vez, y esa camisa de tiras azul oscuro dejaba ver sus hombros anchos, demostrando que no era un debilucho, de brillantes ojos negros cual noche oscura iluminada por estrellas, que me miraban como si quisieran absorberme. Pero mi fantasia se acabo cuando, se quito una gorra negra con un espiral rojo, y pude ver, sin duda alguna, la cosa más extraña que nunca había visto, tenía unas alargadas y felpudas orejas de pelaje verde con las puntas negras alzadas similares a las de un perro o incluso un lobo en la izquierda llevaba tres pendientes dorados que tintineaban cuando las movió poniéndolas en alerta. Luego mi vista fue a su trasero, del pantalón negro surgió una cola larga y espesa también verde como el pelo y las orejas, con la punta y un poco más arriba negras, ahora más que un lobo se asimilaba mucho a una especie de zorro verde. Le mire con pavor en los ojos y este lo detecto en seguida e intento calmarme.

─Oye, antes de que grites, escúchame…

Se acerco a mi con cuidado pero yo no quise hacerle caso y lo empuje, corrí hacia afuera y grite como un loco echándome lo más atrás posible.

─¡APARTATE DE MI MONSTRUO!

El chico de pelo verde salio de la habitación con la gorra ocultando las orejas, y la cola tambien había desparecido, oculta seguramente en el pantalón, se acerco a mi y me hizo una señal de que me tranquilizara, pero otra vez sin hacerle caso grite, y cuando se me acerco mucho para decirme ya enfadado que no gritara, ya que habíamos llamado la atención de los demás, me eche más hacia atrás. No me di cuenta, cuando mi cuerpo perdió el equilibrio y me caí hacia atrás cerre los ojos esperando lo peor, tragando saliva. Sentia mi cuerpo irse cada vez más hacia atrás, dios que me iba a morir de la peor forma posible en mi primer dia de universidad…Espere el golpe pero aterrize en algo blando, cuando abri los ojos, vi al chico de pelo verde tirado de cara al suelo y yo montado a sus espaldas, su expresión era de dolor, por lo visto había recibido el golpe que yo me debería haber pegado. Sin entender porque, vi sus musculos de su espalda tensarse cuando le acaricie sin querer los homrbos, y algo dentro de mí se volcó, tembló hasta la ultima cifra de moléculas de mi ser. Mis mejillas tomaron un ligero y para mi suerte disimulado sonrojo al ver esa expresión en su rostro y al ver la posición que teníamos daría mal que pensar, cuando aquellos ojos negros se abrieron me miraron de manera intensa y yo, casi, casi me hubiera lanzado a devorarle los labios delgados entreabiertos que dejaban ver, finos y blancos colmillos. Pero su voz me devolvió a la realidad.

─¡Oye maldito Cejirrizo quítate de encima!- me grito con una vena en la frente.

Yo frunci el ceño levantándome sin molestarme a ayudarlo a levantarlo. De repente todos esos pensamientos me parecieron una porquería y una perdida de tiempo inútil intentar discutir con ese bicho raro, me encamine al despacho del director para buscar una explicación de lo que estaba ocurriendo allí, porque enserio, me estaba volviendo loco. Cruce todo lo que era el campus en si, empujando a todo el que me molestaba, hasta que una mano en el hombro me detuvo, me gire dispuesto a gritarle al que me paro, pero me di cuenta de que era Usupp.

─Hey, rubiales, ¿A dónde vas que parece que el diablo va detrás de ti?

─Usupp, me alegro de verte en serio, pero ahora no tengo tiempo-respondi empezando a caminar rápido otra vez seguido de Usupp.

─No te entiendo…

Me gire y le mire seriamente a los ojos.

─¿Me juras que no gritaras ni me llamaras loco ni mentiroso?

─Lo juro por mi honor de justiciero-dijo cerrando los ojos y levantando una mano mientras la otra se tocaba el pecho en signo honorable.

Suspire y mire hacia atas por si me seguían.

─Voy al despacho de Shiusu, adivina, me ha tocado una habitación y de repente aparece un tio con orejas y cola de perro, o lobo o un zorro mutante de color verde-explique.

Usupp empezó a reírse en mi cara.

─¿SOLO ES ESO? JAJAJA, Sanji, por favor, yo también iba porque tengo un compañero de cuarto como tú, algo especial.

─¿A que te refieres?-pregunte con cara de fastidio.

Usupp negó con la cabeza sonriendo mientras me pasaba un brazo alrededor del cuello.

─Sanji, Sanji, Sanji…Me refiero a que te ha tocado como compañero de cuarto un semihombre a lo que muchos denominan OkamiKitsune-Otoko, o un Okami-Otoko o Kitsune-Otoko pero un Inu-Otoko no puede ser, ese ya esta con Frankky-dijo sonriendo.

Parpadee sin entender.

─¿De que me hablas?

─Ay…Ven.

Usupp me llevo al despacho del señor Shiusu, en el cual había muchos más estudiantes, entre ellos, Frankky y Vivi, mis amigos de la infancia con los que empece a charlar y recordar buenos tiempos, Usupp fue el que nos explico de que iba ese rollo del compañero de cuarto.

─Vereis, el director Shiusu tiene un contrato con una organización en la que, da a entender que todos los semihombres jóvenes tienen derecho a estudiar en las mismas condiciones que las personas normales como nosotros.

─Veo que estas informado, Usupp-kun-hablo la voz varonil del director Shiusu, llamando la atención de todos-Bien, si no te importa, déjame acabar a mi.

Todos los que estaban en el despacho se pusieron firmes, no como militares pero si formalmente. El director Shiusu era un hombre joven de unos 30 años, con un poco de barba, de pelo azul y ojos profundos y grises. Siempre con una sonrisa amable que daba a entender a todos que podían tenerle la confianza que quisieran, que él se mostraba como un mentor paciente y amigable e incluso como un padre.

─Vereis, como ha dicho Usupp, tengo un contrato con una organización de semihombres. Como sabréis, en los últimos cincuenta años humanos normales con vidas normales, han mutado misteriosamente, llamándolos semihombres, y estos han ido reproduciéndose de modo natural, pensando que sus hijos no heredarían lo que les hizo mutar, pero por ese herror de calculo, muchos están siendo capturados y utilizados como cobayas para experimentos. Es por eso, que llegue a un acuerdo con los de los derechos humanos, porque eso son, humanos, para que los jóvenes y las nuevas y futuras generaciones, tengan un derecho a vivir como vosotros en igualdad de condiciones, por supuesto, ellos no pueden mostrarse como son a excepción de los profesores y vosotros, sus compañeros de habitación-nos miro a todos con un eje de tristeza-No os pido que os hagáis intimos amigos, solo que les brindeis vuestro apoyo y les hagáis sentir que no son despojos, como muchos otros adultos y de vuestra edad les han hecho sentir, estos chicos y chicas semihombres, han vivido una vida de absoluta marginación social, por favor…solo os pido que los respecteis como son y les deis una oportunidad…una oportunidad de sentirse bien como en una familia que muchos de ellos no tienen o no conocen.

Todos nos miramos, sin saber que responder, pero, poco a poco asintieron de acuerdo con el director Shiusu. Salimos todos de vuelta a nuestras habitaciones, me despedi de Vivi y Frankky mientras hablaba sobre ese tema con Usupp.

─Sabes, yo tengo a un Saru-Otoko de compañero-sonrio Usupp-Es un chico raro pero es muy gracioso y amistoso.

─Pues yo tengo un marimo parecido a un perro o un lobo o un zorro mutante.

─Ja, como las tortugas ninja.

Sonrei ante el comentario, si, solo le faltaban las espadas.

Cada uno nos fuimos a nuestro cuarto, cuando llegue ya habían puesto las dos camas, y mi nuevo compañero animal estaba tumbado en el lado izquierdo escuchando música de su Mp4 mostrando sus orejas y su cola. Cerre la puerta sin mirarle y empece a ordenar mi maleta para colocar mis cosas, mire su mochila de deporte, parecía que hay llevaba todo lo necesario, porque no habían más maletas.

─¿Cómo te llamas marimo?-pregunte sin interés, pero al menos el nombre debía saberlo.

Otra vez, caí hechizado por sus oscuros ojos negros que se abrieron elegantemente mirándome como si de fuego se tratase.

─Roronoa Zoro, Cejirrizo, ¿y tú?

─Kuroashi Sanji, bola de moh-conteste la pulla.

─Bonito nombre pata de cerdo-sonrió diabólicamente sensual cerrando los ojos.

Sí, ese iba a ser un curso para recordar…

TBC….