Nico estaba a punto de morir. Odiaba, de verdad, odiaba los entrenamientos con Percy y Jason; esos chicos parecían tener una resistencia eterna, no cedían por nada. Lo habían despertado a las 9:00 am, solo habían descansado un momento para almorzar y luego seguir entrenando. Nico agradecía a los Dioses porque ya era hora de la cena.
Luego de una reconfortante ducha Nico se dirigió a la fogata para poder saciar su hambre, tomó un plato y un vaso, caminó hasta que encontró un lugar para poder sentarse y disfrutar del combo de Mc Donalds que había aparecido en su plato y un poco de Coca-Cola. Le dio un mordida a su hamburguesa, valla que amaba el sabor, definitivamente la comida de Mc Donalds era su favorita. Sintió a alguien sentado a lado suyo, volteó y ahí estaba Will Solance sonriéndole. Bum bum, sintió muchas mariposas cadavéricas en su estómago.
-Niño muerte, te he dicho muchas veces que eso no es bueno. Deja de comerlo, órdenes del doctor.
-Deja de fastidiar Solance y no me digas niño muerte.- mordió su hamburguesa con la intención de fastidiar al rubio. Estar con Will le agradaba mucho, luego de esos tres días en la enfermería ellos se habían hecho cercanos y no era raro verlos juntos de vez en cuando ya sea caminando, en la enfermería o en el muelle. Nico se sentía bien en compañía de Will.
-Deberías intentar comer más sano estás en plena etapa de desarrollo, si no te alimentas correctamente no crecerás como deberías y seguirás siendo un emo enano.
-¿A quién le dices emo? Mi estilo es puro rock, causo terror a donde voy, todos me temen por controlar a los muertos y...
El hijo de Apolo soltó una carcajada, cortando así el monólogo del menor. Dejó su plato a un lado del tronco en el que estaban sentados y le sonrió a Nico, el hijo de Hades se sonrojó; agradeció que la luz de la fogata le diera tonalidades rojizas a su piel.
-Cállate y come niño muerte.
Nico obedeció, terminó su hamburguesa y papas y al igual que su compañero dejó sus cubiertos a un lado. El mayor observaba los movimientos de Nico y los describía como torpes y sin orden alguno.
- Y bien, ¿Cómo estuvo el entrenamiento?
- Agotador, en serio creo que esos chicos tienen una resistencia eterna.- Nico se estiró y soltó un suspiro.- El calentamiento fue darle 15 vueltas al lago co-rrien-do, fue espantoso. Luego tuvimos que hacer circuitos de resistencia, fuerza y velocidad, me caí como 20 veces y sin exagerar Solance, después vinieron los combates: cuerpo a cuerpo, con espadas, con lanzas, etcétera. No pararon por nada del mundo, nunca volveré a aceptar una propuesta de entrenamiento con ellos.
-Jajaja, entonces ¿prefieres entrenar conmigo o con ellos?
-Definitivamente contigo, te prefiero mil veces a ti que a ellos.
El hijo de Apolo se estremeció ¿acaso eso fue una propuesta? Se quedó mirando a Nico por un rato, en verdad se veía agotado pero en comparación al Nico de hace tres meses se encontraba muy bien; había ganado peso, ya no tenía tantas ojeras, seguía estando pálido pero no era un pálido enfermizo como antes, Nico había mejorado gracias a él.
-Oye Nico...
-¡Nico! ¡Will! ¿Todo bien chicos?- los mencionados alzaron la vista y frente a ellos estaban Jason Grace y Percy Jackson mirándolos sonrientes. Inconscientemente el hijo de Hades maldijo por la llegada de sus compañeros.
-¿Por qué habría que haber algo mal?
- Es que notamos que Nico se encontraba algo agotado y solo queríamos ver si se encontraba bien.- respondió Jason. A su alrededor los campistas empezaban con sus ofrendas a los dioses y se retiraban a sus cabañas.
-Vamos chicos, tenemos que dar nuestra ofrenda.
Percy tiró al fuego una porción de pastel azul, Jason hizo lo mismo con una porción de pizza, Nico lanzó una hamburguesa y Will un sándwich de jamón y queso. El humo se disipó hasta el cielo, al parecer a los dioses les gustaba el olor de la comida mortal.
-¡Oye Will!- los demás hijos de Apolo le hicieron la mano para que se acercara.
-Me están llamando. Nos vemos luego, chicos. Adiós Nico.
El hijo de Apolo sonrió y se fue. Nico se sintió desanimado de repente, al aparecer Jason lo notó y le dio un pequeño empujón.
-Vamos chicos, las arpías nos destruirán si no vamos a nuestras cabañas ahora. - Jason pasó su brazo por los hombros de ambos y los obligó a caminar al mismo ritmo que él. Percy empezó a reír junto al rubio, Nico sonrió levemente, esos chicos se habían convertido en sus hermanos mayores. A pesar de sus sentimientos anteriores por Percy ellos estaban en buenos términos ahora, de hecho su relación había mejorado bastante y ya no era incómodo para él estar con Percy.
El hijo de Hades paseó por su vista por el campamento, habían chicos corriendo por todas partes, parejas caminando tranquilamente, el ambiente era como el de un campamento de verano normal. Siguió pasando su vista hasta que vio algo que andaba mal:
Los gemelos Stoll saliendo de la cabaña de Hécate.
Travis y Connor traían en sus manos unas pequeñas botellas con líquidos de colores. Nico hubiera deseado que Jason no tuviera ese sentido de justicia que lo identificaba y hubieran podido pasar una buena noche.
-¿Qué creen que hacen chicos?
Los gemelos dieron un pequeño brinco y voltearon a ver a Jason.
-¡Ah! Jason ¿cómo estás viejo?- dijo Connor como si no pasara nada. Enserio que esos chicos eran hijos de Hermes, eran expertos en este tipo de cosas.
- No cambies de tema, ¿qué hacían en una cabaña ajena?
-Vamos chicos, ¿nos conocen verdad? Nunca haríamos algo para dañar a alguien. ¿Cierto Travis?
-Cierto Connor.
-Por Zeus, ¿Quiénes inundaron la cabaña de Ares? ¿Quiénes lanzaron bombas apestosas a los de Afrodita? - añadió Percy. Los hermanos desviaron la mirada y empezaron a silbar.
-¿Qué sucede chicos?- Lou Ellen, líder de la cabaña de Hécate, llegó caminando hacia los chicos.
Lou paseo la mirada sobre los presentes y se detuvo al ver las manos llenas de los Stoll. Nico presintió una pelea.
-¿Qué diablos hacen Stoll's? Devuélvanme esas pócimas ahora.
-Querida Lou, no te enojes solo estábamos jugando.
-Ustedes siempre están jugando Stoll- dijo sarcásticamente.- por eso siempre causan desastres y accidentes. Devuelvan eso ahora mismo si no quieren que Quirón se entere.
Estiró su mano tratando de arrebatarles los recipientes. Travis reaccionó rápidamente y los cambió de mano.
-Vamos nena, solo déjanos jugar un rato. Esto se ve muy interesante.
Sostuvo una de las botellitas y la apreció su color era entre un azul y un morado. La hija de Hécate les dio un fuerte puñetazo a ambos hermanos en el estómago, los Stolls soltaron los recipientes para agarrarse el estómago, Lou solo alcanzó a sostener tres de ellos, los cuatro restantes cayeron a los pies de los hijos de los tres grandes.
-Diablos Lou, mi estómago.- Connor se quejaba tirado en el suelo. A pesar de que su fuerte era la magia, Lou tenía unos buenos ganchos.
Lou miró horrorizada a los chicos, las pociones se habían mezclado y habían caído en sus pies. Se acercó a ellos y los examinó preocupada.
-Chicos ¿se sienten bien?
-Sí, ¿deberíamos sentirnos mal?- contestó Percy.
-La verdad no lo sé, no tengo idea de lo que hacen. Mis hermanos y yo las conseguimos como recompensa en una misión, todavía no las probaríamos hasta que hayamos hecho exámenes con ayuda de Marcus y Annabeth.
Volteó a ver a los gemelos que ya se estaban levantando del suelo.
-Pero estos imbéciles lo han arruinado. No le notificaré sobre esto a Quirón porque se vería afectada toda su cabaña, pero tomaré las medidas necesarias. Jason, Percy, Nico cualquier cosa que sientan rara en ustedes por favor díganme enseguida.
-No te preocupes Lou, cualquier cosa te diremos. Pasa una buena noche. Adiós chicos.
Jason se despidió y se dirigió a su cabaña., Percy se acercó a los Stolls que se encontraban en un hechizo inmovilizador.
-Que los Dioses se apiaden de su alma chicos.
Se alejó riendo y se despidió de Nico con un movimiento de mano. Nico le sonrió a Lou y miró con pena a los gemelos, esos chicos iban a pasar una mala noche. Se dirigió a su cabaña, se dio una ducha y se acostó en su cama-ataúd, a pesar de la decoración tipo Drácula de su cabaña las camas eran cómodas y era fácil dormirse rápido, y bueno... eso hizo.
Esa noche Nico pasó una muy buena noche, sin la presencia de alguna pesadilla o algo por el estilo.
Voten y comenten por favor
Espero que les guste este fanfic inspirado en Los Héores del Olimpo de Rick Riordan.
Bye, bye F*kers
Shary-san fuera.