Bueno, debo aclarar que no soy muy fanatica de la pareja Naruhian, pero hize un drabble y ya está. Quería colgarlo y aquí lo tienen, espero que les guste. Va especialmente dedicado a aquellas personas que me vienen leyendo desde hace tiempo, y que les gusta también la pareja Naruhina aparte de mi favorita el Shikatema.

Los personajes son de Masashi, pero intentaré emborracharle, casarme con él y manipularlo hasta hacer en la serie lo que quiera yo. Deséenme suerte con mi plan, jaja.

Palabras: 449
Pareja: Naruhina
Lugar: Almacén (UA)

Prohibido

-N-No puedo creer q-que esté a-aquí.

Por primera vez en esa tarde de locuras, la voz de Hinata sonó completamente asustada y casi inaudible. A su lado, y muy pegado a ella, Naruto intentaba ver por encima de la puerta de ese pequeño almacén.

-¿Sigue ahí?

Ella asintió mientras veía por la rendija inferior entre la puerta y el suelo.

Naruto se dejó caer sentado en el amplificador en el cual había permanecido subido intentando ver por encima de aquellas paredes bajas y tan poco íntimas.

-G-gracias Naruto-k-kun por… ayudar a es-esconderme.

Era peculiar la manera en la que habían acabado en un cuarto que apenas tenía espacio para ellos y que enteramente estaba ocupado por instrumentos.

Él sabía que Hinata no había pedido permiso a su padre para estar allí, en una fiesta, en un local que en su familia estaba catalogado como: prohibido.

Había disfrutado de dos buenas horas con una música escandalosa pero animada y extrañamente adictiva y sin saber cómo, ella misma había acabado sintiendo la tensión y el frenesí que movía a sus demás amigos.

Contagiada por ese ánimo había acabado sonriendo divertida, pero todo aquello se terminó cuando por un chivatazo de una de sus amigas, se enteró de que Neji Hyuuga, nada más y nada menos que él, ahora estaba en el mismo local.

Su mundo había caído encima de ella de golpe al saber que para una vez que se desmelenaba; por supuesto con el límite que ella podía permitirse, Neji estaba allí.

Sintió el pánico del que había estado huyendo por mucho tiempo, ese que había esquivado negándose a la diversión propia de alguien de su edad, pero ahora…

Naruto rápidamente actuó, le había arrastrado a una sala constituida por cuatro paredes, las cuales dejaban veinticinco centímetros entre el borde de la pared y el techo.

Y allí estaban, frente con frente, extasiados por el peligro de verse descubiertos.

-Me gusta ayudar a la gente a huir de la autoridad, en este caso, Neji.

Ella sonrió mientras recordaba que Naruto era así, espontáneo e inconsciente en algunos casos, pero igualmente tierno y generoso.

Dudando en si hacerlo o no, ella se mordió el labio intentando buscar una respuesta.

Recordando lo amable que era él, comprendió que enfadarse era una reacción muy improbable. Decidida pero aún vacilando, se acercó ha él.

Naruto aún más confundido, sintió como los fríos labios de ella se posaban en la comisura izquierda de los de él.

Ella se giró y sin mirarle, abrió la puerta, dejando únicamente de despedida y agradecimiento una palabra:

-Gracias.

Hinata ya había partido hacia el castigo que suponía estar en ese local y ser descubierta, pero había merecido la pena.

FIN

¿Reviews? Si les gusta no duden en dejar comentarios, me alegraría mucho.