CAPÍTULO 1: COMPORTAMIENTO EXTRAÑO

–¡Marth!

El príncipe volteó ante los llamados del héroe de Hyrule. Se preguntó por unos momentos como para que en esos momentos se le interrumpiera durante el paseo por los jardines con su novia, la princesa del mismo reino.

–Link…–le habló con algo de preocupación sin notar como la castaña miraba con furia al recién llegado–…¿Qué ocurre?

–Algo le pasa a Ike…–el Hyliano ignoró la mirada asesina de Zelda y se concentró en el Alteano.

Este último se aterró al escuchar eso. Muchas cosas pasaron por su mente: un combate salió mal, a Master Hand se le pasó la mano en el escenario final, Jigglypuff lo acosaba nuevamente, se enfermó otra vez, un combate había salido mal…

–Espera…–pensó al sonar por su mente la última idea–…eso ya lo había pensado…

Negó con la cabeza, tratando de recordar el punto principal de toda esa interrupción.

–Bueno, ¿Qué tiene?, ¿está bien?...

–Está de un humor de mil demonios…

El príncipe no pudo evitar dirigirle la misma mirada que su novia le dirigía. Entendía que Link era de corazón noble, pero no podía creer que actuara como los primeros días en los que Ike había llegado a la mansión smash…

FLASHBACK:

–Muy bien combatientes…–la mano empezó tras haberlos reunido a todos en la sala de espera donde los peleadores se preparaban para los próximos combates –…les traigo noticias…

–Ojalá sean de Roy…–le mencionó el rubio al príncipe –…muero por que vea mis nuevos movimientos…

El Alteano rió un poco.

–Yo quiero por fin ponerlo al tanto sobre Zelda y yo…–el muchacho no pudo evitar sonar enamorado al recordar el nombre de la chica que lo hacía soñar.

–Ajá…–El guardián de la princesa le dio un par de codazos–…solo recuerda que si le haces algo a Zelda, aplicaré contigo ese nuevo movimiento que Master llamó "Smash Final"…

El peli azul no pudo evitar reír nervioso ante la amenaza del Hyliano. Sabía que para Link, Zelda era como una hermana, por lo no bromeaba al decirle que aplicaría con el su "Smash Final", que aunque no lo conocía, presentía que si le pasaba algo a Zelda, el sería el primero en el que se le aplicaría.

–sobre su compañero Roy…

Pero, la hermana loca de la mano lo quitó, haciendo que se estrellara contra la pared.

–¡el no volverá!... –una risa loca resonó en los oídos de todos. Marth y Link se encontraban devastados, ¿Cómo que no volvería?

–Dis-Disculpa Crazy… –el príncipe habló tímidamente, realmente le había impactado la noticia –…¿Cómo que Roy no volverá?

–¿Qué parte no entendiste?... –la mano seguía riendo como una maniática –…¿Roy?, ¿no? O ¿volverá?...

–Creo que a lo que el príncipe se refiere es a la razón o razones por lo que Roy no vendrá… –tomó ahora la palabra Lucario, aquel nuevo recluta en la familia de Smash.

Sin embargo, antes de que la risueña mano pudiera responderle al pokemon, fue golpeado de la misma manera que él había atacado a su hermano.

–El punto, es que la verdad no lo sabemos…–comentó sacudiéndose un poco tras haber noqueado a Crazy Hand–…solo nos comentó que había problemas en su hogar…

–¿Problemas en su hogar?... –Marth empezaba a preocuparse.

–o algo así…–comentó sin mayor preocupación el anfitrión–…la verdad, su carta era muy confusa…

El peli azul empezaba a preocuparse, ¿Qué pudo ser tan malo y urgente como para no venir al smash?

No era el único que se lo preguntaba, alrededor todos los personajes susurraban y hacían hipótesis de porqué el marqués no vendría…

Los niños creían que había una clase de feria…

Los héroes temían que hubieran invadido Pherae…

Y los villanos reían y festejaban ante la posibilidad de que el pelirrojo estuviese muerto

Master Hand fue golpeada una vez más por su hermana, dejando una enorme marca en la pared, que el personal de limpieza no agradecería para nada.

–oh vamos…–les habló animado y hasta riendo un poco–…no es tan malo, hasta trajimos a alguien que lo reemplazará para que no sientan un vacio en sus corazoncitos…

Sin embargo, eso no calmó los murmullos, al contrario, los avivó aun más.

El hecho de pensar que alguien nuevo tomaría el lugar de Roy emocionó y aterró a todos a la vez…

¿Quién era?...

¿De dónde venía?...

¿Cómo lucía?...

Eran tantas las incógnitas que ya había perdido la cuenta de todas ellas.

Tenía que admitirlo, el también tenía algo de miedo sobre quién era, si era un héroe, un villano u otro niño, así también como su historia y que tan amistoso sería…

La mano loca volvió a recibir un golpe de su hermana. Realmente a los conserjes no les iba a gustar ese desastre.

–Ya me tienes harta…–en lo que se volvía a sacudir llenaron la estancia unas cuantas risitas "discretas" de parte de todos los jugadores. Cuando acabó aclaró su garganta y continuó–…como dijo esta lunática…–se hizo a un lado para evitar el tercer golpe de su hermana, haciendo que este último quedara estampado en la pared. Las risas volvieron a inundar el lugar, hasta que Master Hand les indicó a todos que se callaran–…como les decía, es cierto, encontramos a otro combatiente que puede tomar su lugar en lo que nuestro compañero Roy regresa…–la mano sacó un megáfono, aclaró nuevamente su garganta y continuó–Démosle una cálida bienvenida a Ike…

La puerta se abrió, revelando un peli azul de ojos zafiro, alto, piel blanca y de musculosa complexión. Sus botas lucían viejas, así como su gabardina y capa, que estaban rasgadas. Muchos ahogaron un gritillo al notar la pesada arma que cargaba con una mano apoyada en su hombro derecho.

–El es un mercenario de Crimea…–la mano continuó con la descripción del recién llegado–…líder de la banda "los mercenarios de Greil" y el héroe de la Guerra del Rey Loco…

Marth se relajó un poco al saber que era un héroe, pero tenía que admitir que la fría mirada del mercenario causó que la piel se le pusiera de gallina. Tanía una expresión de estar enojado todo el tiempo, o por lo menos de no tener sentimientos…

–Quiero que por favor todos sean amables con él y que lo hagan sentir como en casa…

Dicho esto, la mano se llevó a su hermana de ahí, dejándolos solos con el nuev, quién se sentó cruzando los brazos en uno de esos asientos cómodos pero sin forma, de los cuales era difícil no quedarse atrapado, y de eso el mercenario no se salvó.

Ser amable era sencillo, por lo menos para él, no podía hablar igual de Ganondorf, Bowser y Wolf, y si mal no recordaba, lo que seguía era…

–¡Oye tú!...

Sí…como si fuera una vil prisión, los más rudos querían poner a prueba a los recién llegados, aunque solo fueran niños, como el caso de Toon Link o Lucas.

Sin embargo, el peli azul no respondió a los llamados de Bowser, se dedicó a mirar a la nada.

El enorme dinosaurio se acercó amenazadoramente al de ojos zafiro y lo tomó del cuello de la gabardina y lo levantó en el aire. Sin embargo, y a pesar de los varios gritillos de horror que lograron escapar de la boca de varios peleadores, su mirada seguía fría, pero frunciendo el ceño al enorme villano.

–Pues, ¡no te quedes ahí pedazo de princesa!… –lo sacudió un poco. Tanto el Hyliano como el Alteano estaban preparados por si la situación se salía de su control para noquear a ambos–…¡Di algo!...

El joven le vio con sus penetrantes ojos de una manera muy dura. Podrían llegar a parecer dos zafiros a punto de dar un golpe fuerte a algún rival.

–Bájame…–su voz era muy profunda, y no se escuchaba nada contento–…ahora…

–¿oh que?... –Bowser le apretó un poco más, mirándolo desafiante, como queriendo provocar aún más esos orbes azules, que parecían apunto de atravesarle y volverse rojos.

–O juro por lo que más amas que te quebraré cada una de tus inútiles escamas, lagartija asquerosa…

Esa última frase hizo que el rey Koopa lo estampara contra la pared, a lo que él mercenario respondió con un gruñido de dolor.

–¡¿Te crees muy graciosito o que, debilucho?!... –Marth tomó con fuerza la Falchion y Link la espada maestra, listos a defender al peli azul.

–Al menos…–respondió entre jadeos y gruñidos de dolor–…no necesito golpear a los nuevos para infundir respeto…

Ese último comentario provocó que el dinosaurio cerrara un puño y lo dirigiera directamente a la cara del nuevo…

Si no fuera que este último logró soltarse y tomar su espada, listo para el combate.

El rey gruñó intentando intimidar a su rival y se acercó pesadamente hacia él. Ike entonces lanzó su espada al aire, el Koopa quiso aprovechar para tomarle, sin embargo solo cayó en la trampa del peli azul, pues saltó tomando su arma, y cayendo con gran rapidez hacia el villano, ocasionándole un daño considerable.

El dinosaurio gruñó cayendo a unos pasos del muchacho, quién le dedico una sonrisa burlona.

–¡¿Te crees muy listo no?!... –se levantó viéndole o odio–…¡Veamos si sonríes igual si golpeo ese feo rostro tuyo!...

Y el combate se reanudo. Tanro Ike como Bowser tenían golpes muy poderosos, haciendo que poco a poco la batalla fuese siendo más equilibrada con el paso del rato. Cada vez era más difícil levantarse y dar un golpe certero al enemigo, pero ninguno de los dos pensaba rendirse ante el rival.

Llegó un punto en la batalla que ambos lucían cansados, e inclusive lucían rojos y que sus extremidades no los soportarían mucho. Marth estaba realmente sorprendido, no solo por el valor y el atrevimiento de ese novato en retar así a un veterano malvado, sino que haya resistido lo suficiente como para llegar a un alto nivel de daño sin caer rendido en el piso o estampado en la pared nuevamente.

El mercenario aprovechó un momento de distracción del Koopa para tomarlo del cuello, y le dio un par de golpes con la empuñadura de su espada en la cabeza. Al detenerse, acercó sus rostros, perlados en sudor y jadeantes, viéndole con la misma furia que el villano le dirigía.

–No vuelvas…–dijo entre jadeos–…a faltarme el respeto…en tu vida…

Entonces lo lanzó al piso y lo pisó con fuerza, ocasionando que el rey gritara de dolor, lanzándolo después en ese hueco que fue ocasionado por las manos.

Ike solo jadeo triunfante, observando como el resto de los luchadores le veía entre asombrados y horrorizados. El príncipe estaba atónito de lo que acababa de ver, inclusive Link estaba sorprendido. Al ver como el mercenario se disponía a dejar el recinto, decidieron seguirle por si necesitaba algo.

–Eso fue realmente increíble…–le felicitó el Alteano, dirigiéndole una sonrisa a pesar de que el aludido no le dirigió ni la mirada ni la palabra y seguía con su camino.

–¿Quién te enseñó a luchar así?... –fue ahora el héroe del crepúsculo quién intentó socializar con el recién llegado. Sin embargo no tuvo éxito alguno.

El peli azul notó entonces que el joven estaba lleno de golpes y quemaduras, por lo que pensó que sería cortes de su parte el ofrecerle medicinas, atención médica, e inclusive llevarlo a su alcoba a descansar.

–Veo que tienes muchas quemaduras…–Ike le dio a entender con la mirada que no dijera cosas obvias y que le dejara tranquilo, sin embargo, el Alteano ignoró ese último mensaje–…¿Necesitas que te ayude con algo?...

–Déjenme en paz…–le habló con seriedad y frunciéndole el ceño como lo hizo con el Koopa, cosa que tanto el príncipe como su amigo no esperaban–…¿quedó claro?...

–P-Pero…

–¿No quieres que te ayudemos?... –Link le habló con preocupación–…estas herido…

–He tenido peores heridas en mi vida…–le frunció aun más el ceño y tuvo que controlar su voz para no gritarles, pues sabía reconocer que no eran igual a quién se acababa de enfrentar–…Déjenme en paz…

Y sin esperar respuesta de ambos, se alejó por el pasillo donde se encontraban las habitaciones, dejando realmente impresionados a aquellos quienes deseaban ser amigos de él…

FLASHBACK

Tenía que admitir que fue difícil llegar a entablar una amistad con el joven mercenario, por su constante frialdad y distanciamiento hacia los demás, pero llegando a conocerlo, supo que era un joven noble, sincero y fiel. Así mismo, como ya lo había visto contra Bowser, un gran espadachín, y bastante terco, tenía que añadir.

–Link…–Marth tuvo que calmarse para no ofender a su amigo–…tu sabes que Ike es frío y terco a veces, pero no quiere decir que…

–No, no, no, no, no, no Marth…–el Hyliano interrumpió al Alteano–…esto es diferente…

El príncipe frunció levemente el ceño, confundido.

–Explícate…

–Pues…verás…

FLASHBACK (LINK P.O.V):

Estábamos en medio de un combate, éramos él y yo, tres vidas en final destination…

Nos quedaba solo una vida a ambos, y teníamos ya un alto porcentaje de daño…

Desde el inicio de la pelea, lo noté extraño, como si estuviera distraído, triste, o inclusive asustado…

Decidí hablar con él cuando terminara esto…

Al final, lo mandé a volar con una estocada en el pecho, la verdad estaba contento, pues podría hablar con él…

Cuando reaparecimos en la sala de espera, me acerqué para felicitarlo por que al final de cuentas fue un buen combate…

Ni si quiera tomó mi mano, solo cerró sus puños y me vio con furia…

Retiré mi mano, y entonces decidí preguntarle…

–¿Por qué no me dejas tranquilo elfo?... –esa fue mi respuesta–…no eres mi niñero, no necesito explicarte porque gano o no un combate…

Tomó su espada y me dejó ahí solo y confundido…

FLASHBACK

El relato del rubio dejó al príncipe atónito.

Estaba de acuerdo que le había molestado el perder el combate, pero, no entendía el resto de los síntomas…

Siempre estaba concentrado, recibía una felicitación a pesar de haber perdido, y nunca le llamaba a Link de semejante manera…

–¿Ahora entiendes Marth?... –vio a los azules ojos de su amigo, con la misma preocupación que expresaba su rostro. Algo le pasaba a Ike, y era grave, jamás se había comportado así.

Volteó a ver a su novia, lucía muy preocupada, sin embargo le sonrió y asintió ligeramente con la cabeza. El peli azul le correspondió la sonrisa y se dirigió con Link al interior de mansión.

–Y dime…–le habló después de un rato–…¿sabes a donde se fue?...

–Pues no estaba en el comedor, cocina, sala o entrenando…–le respondió–…le pregunté a Lucario y dijo que sentía su aura cerca, y estábamos en el pasillo de las habitaciones, por lo que me imagino que está en su cuarto…

Marth asintió ligeramente y se dirigió hacia la alcoba de su amigo.

Llegando ahí tocó esa enorme puerta blanca, sin obtener respuesta.

–Ike…–volvió a tocar–…sabemos que estás ahí, ábrenos…

–¡Lárguense!... –fue lo único que se escuchó después de unos momentos, seguido de un golpe en la misma, no muy fuerte, de seguro el peli azul había lanzado una almohada.

–Ike, por favor…–le habló con preocupación–...no te pongas así…

–Solo queremos ayudarte viejo…–Link se acercó a la puerta y le habló de la misma manera que le hablaba el noble.

–¡Pues váyanse!... –fue la respuesta que obtuvieron–…los veré cuando se me de la gana…

No le dejaban alternativa…Era algo que realmente no querían hacer…

Pero, no podían forzar a su amigo a hablar si él no quería…

Se vieron a los ojos y asintieron levemente con la cabeza, alejándose de la alcoba de su amigo, decidiendo que hablarían con él durante el almuerzo, pues hoy servían su comida favorita: carne con chile, y tenían la esperanza de que le mejoraran el ánimo, y les confesara sus dolencias…

Si eso no funcionaba, le dejarían dormir, pues no era la primera vez que estaba malhumorado (aunque claro que no a tal grado), que con dormir un par de horas se le bajaba o inclusive, desaparecía.

Para eso último, pidieron ayuda a la pequeña pokemon Jigglypuff, quien accedió, aun después de que se le dijo que no se podía quedar en la habitación del mercenario después que este quedara dormido, por cuestiones anteriormente vividas por el mismo, pues la pequeña rosada, sintió una atracción poco normal por el chico y, a pesar de que Mario la dio por curada, querían evitar que la pequeña volviera a sus viejos hábitos y el humor del mercenario empeoraba.

La verdad, ambos deseaban y rogaban a sus deidades de no tener que llegar a medidas tan desesperadas, pero si el peli azul se ponía roñoso no tendrían opción…

Sabían que después se los echaría en cara, pero no era algo que realmente les molestara, pues muy en el fondo sabían que él estaba consciente que lo hacían porque estaban preocupados, pues eran amigos, y querían lo mejor para él.

Releyó la carta una vez más, realmente le asustaba todo en ella…

Las palabras, la redacción, el contenido…

Pero sobre todo, y lo que más le hacía perder la cordura, era aquel que le enviaba el escrito…

Una carta de alguien quién murió en sus brazos hace poco más de un año…

Debía de ser una pesadilla…

Si…

De seguro eso era…

–Es decir, los muertos no pueden escribir cartas tan detalladas…

Pensó eso unos momentos, logrando relajarse un poco…

Tal vez era real, pero no de esa persona, su lógica le decía que uno de los dos "amigos" que tenía le habían enviado esa broma de tan asqueroso gusto…

Es decir, nadie más en la mansión smash conocía sobre esa persona…

Aquella persona con la que siempre soñó superar y derrotar algún día, siendo más fuerte que él, pero que por cosas de la vida y crueldades de sus deidades, jamás lograría, o por lo menos no sería posible comprobarlo…

De aquella persona que se encontraba bajo tierra, siendo comido de seguro por los gusanos…

Aquella persona, que le había regalado la vida…

Hablaba de su padre…

Hsshahashashassa volví con otra historia (?)

Y esque no pude resistirlo uwu desperté ayer con tres ideas para otros fics :v pero sin inspiración para los viejos T-T espero se arregle mi cerebro pronto uwu

Shashhjashjas ¿Qué le pasara a Ike? DX!

¿Quién era el último?

¿Qué tanto le hizo Jigglypuff a Ike al acosarlo? (?)

¿Bowser algún día entenderá?

¿Voy a cerrar el hocico y a escribir el siguiente capítulo?

Descubran esto y más en el siguiente capítulo :B

Ya pues, me pase .-.

En fin, espero les haya gustado, les invito a dejar review y a leer mis otras historias.

Nos leemos :D