WE DON'T CARE WHAT THEY SAY

CAPITULO I

REENCUENTRO

Han transcurrido 3 años desde los eventos ocurridos en china y 2 años desde el incidente bioterrorista que asolo a Nueva York, afortunadamente la situación en la gran manzana pudo estabilizarse, la vacuna pudo erradicar todo indicio del virus usado por Glenn Arias y en cuestión de meses, esto gracias a los esfuerzos de la B.S.A.A. la F.O.S. y la gente de Terra Save se encargaron de proporcionar la vacuna así como ayudar a los civiles.

Tras concluir las labores de ayuda en la ciudad, las nuevas oficinas fueron reacondicionadas, ubicándose ahora en mero corazón de Manhattan.

Moira Burton estaba sumida en un sueño placentero cuando de repente la alarma de su despertador comenzó a sonar insistentemente, tomo el aparato y vio la hora.

-mierda, mierda… ya son las 7:30 de la mañana.

Se levantó rápidamente de la cama y se dirigió al baño para darse una ducha de solo 5 minutos y al igual que la ducha se vistió tan rápido como fue posible, apenas si pudo desayunar una taza de café y unas rebanadas de pan tostado algo quemado, iba a tomar las llaves de su auto y cuando iba a ponerlo en marcha comenzó a fallar

-Porque me haces esto, estúpido pedazo de basura. –dijo molesta.

Ante el desperfecto de su auto, Moira opto por llamar a un taxi. Faltaban 5 minutos para las 8, por lo que le pidió al conductor que acelerara la marcha. Llego a las oficinas centrales y al abrirse las puertas del ascensor se encontró con una de sus amigas del trbjo

-Parece que a alguien se le hizo tarde. –dijo aquella chica.

-Lo siento Shyla, me quede dormida y mi auto se averió. –dijo Moira.

-Descuida Moira, tienes suerte que la jefa aun no haya llegado todavía. –le dijo la chica.

-¿Ginger aún no llega aun?... qué raro, ella siempre llega media hora antes. –dijo Moira.

-Parece que está atrapada en el tráfico. –contesto Shyla.

-Que bien, al menos tendré tiempo de cambiare la blusa que llevo puesta, solo espero que la mancha de café no se impregne.

-Muy bien, yo te cubro mientras te cambias.

-Gracias Shyla, que amable de tu parte.

-No hay de que amiga. –le dijo la chica

Luego de cambiarse, Moira se dirigió a su cubículo y comenzó a realizar su trabajo cotidiano el cual consistía en llenar informes de incidentes y labores de contingencia realizados tanto dentro como fuera del país.

Desde lo acontecido en la isla, Moira se mostró más comprometida en cada misión en la que le era asignada convirtiéndola en una de las mejores de la división de Nueva York.

El día para Moira transcurrió de forma normal y Mientras revisaba llenaba unos informes, miro por un momento las cicatrices de su muñeca izquierda y por breves momentos los recuerdos de aquella pesadilla comenzaron a rondaban por su mente.

-Me asegurare de que nadie viva el infierno que yo viví. –pensó mientras miraba sus cicatrices.

Estaba sumida en sus pensamientos que no se fijó de la presencia de una de las asistentes de su jefa quien le dijo en tono serio:

-Señorita Burton… la jefa quiere verla en su oficina en este instante.

Moira se dirigió de inmediato a la oficina de su jefa que llevaba por nombre Ginger Connors.

Al abrir la puerta, vio a su jefa sentada en su escritorio y también noto la presencia de un joven de la misma edad de Moira quien tenía un parche en la nariz.

-Esto tiene que ser una puta broma. –pensó Moira.

-Por favor toma asiento, Burton. –le dijo la jefa.

-Gracias, pero estoy mejor de pie. –dijo con cierta molestia ante la presencia de aquel joven con el parche.

-Bueno supongo ya sabrás el motivo por el cual te he mandado a llamar. –dijo la jefa.

-Si lo sé y como se lo dije a su asistente el pasado viernes, de ninguna manera pienso disculparme con Kevin aquí presente. –dijo Moira.

-Bueno en vista de tu postura con tu compañero de trabajo, creo que voy a tomar algunas represarías, en primer lugar te iras suspendida por 6 meses con la mitad de sueldo ya que la otra mitad será para pagar los gastos del hospital de Kevin.

-Pero esto es una puta injusticia…-reclamo Moira. –y que no piensa sancionar al imbécil de Kevin por sus mensajes misóginos y de acoso hacía varias compañeras de la agencia.

-Cómo puedes acusarme de semejante cosa sin pruebas, Burton. –dijo Kevin con una mirada lasciva y burlona.

-Además de patán, resultaste ser un cobarde. –le dijo Moira.

Los ánimos comenzaron a subir de tono entre Moira y su compañero, pero la jefa interviene.

-ya basta… Kevin es mejor que te retires, aún tengo que hablar con Burton. –dijo la jefa.

Pero antes de que aquel joven arrogante abandonara la oficina, de forma discreta y burlona le guiño el ojo a Moira, quien no podía ocultar su enojo.

-Esto es mierda Ginger, porque tengo que ser yo la mala del cuento mientras ese bastardo está ahí como si nada. –dijo Moira.

-Si de algo te sirve, ya abrí una investigación detallada sobre este asunto y no hubiera llegado a estas instancias si no le hubieras roto la nariz de un puñetazo… -le dijo la jefa. –Eres sin duda el mejor elemento de la agencia pero como tu jefa y amiga te digo que debes controlar un poco tu temperamento, recuerda que la familia de Kevin tiene amigos poderosos, como vez estoy atada de manos en estos momentos y hasta entonces tendrás que irte por 6 meses hasta que no se aclare este asunto.

-Supongo que no tengo elección… Bueno al menos tendré vacaciones luego de mucho tiempo. –dijo Moira con resignación.

-Lo lamento de verdad Moira. –dijo la jefa.

-Descuida Ginger, solo me gustaría terminar los informes que tengo pendientes, espero no haya problema con eso.

-Por supuesto que no, Moira… sabes a pesar de ser algo malgeniada y rebelde, tu profesionalismo en el trabajo es digno de admirar, cualquiera en tu lugar se hubiera marchado enseguida.

-Digamos que aprendí de los mejores… dijo Moira. –Por cierto puedo pedirte un último favor.

-Claro Moira, de que se trata.

-Ni una palabra de esto a Claire ni a mi padre, por favor.

-No te preocupes, todo esto se está tratando de manera confidencial.

-Bien, entonces nos vemos dentro de 6 meses. –dijo Moira, tras despedirse de su jefa.

-Buena suerte Moira y cuídate.

A pesar de haber sido suspendida, Moría permaneció en su cubículo llenando los informes pendientes que tenía, el reloj marcaba casi las 9 de la noche, la mayoría del personal se había marchado hace horas, se sentía un poco estresada por lo que decidió irse a tomar un trago a una modesta taberna que solía frecuentar cada viernes luego del trabajo, el lugar era sombrío pero bastante agradable aunque esa noche no había muchos clientes en el lugar debido a que era inicio de semana.

-Moira, pero que sorpresa verte por aquí y en un lunes. -Le dijo sorprendida la camarera de nombre Tiffany.

-Tuve un día bastante pesado y quise venir a relajarme. -le respondió Moira.

-Oh ya veo... ¿te sirvo lo de siempre? -le pregunto

-Esta vez me gustaría tomar algo un poco mas fuerte, tráeme un poco de Jack Daniels.

-Buena elección, Burton... ¿y ahora que estas festejando? -le pregunto la chica.

-Digamos que mis vacaciones forzadas. -contesto.

-¿no entiendo a que te refieres con eso? -pregunto Tiffany.

Fue entonces que Moira le conto lo sucedido a la chica.

-En verdad estoy sin palabras Moira, no puedo creer la injusticia de la que fuiste objeto... ese tal Kevin es un verdadero hijo de puta -dijo la joven camarera con molestia.

-No tienes idea de la impotencia que sentí en ese momento, quería volverle a romper lo que le quedaba de cara a ese bastardo. -dijo Moira.

-Bueno al menos lograste desquitarte de el. -le dijo Tiffany

-Lo hice por todas las compañeras y amigas del trabajo que han sido victimas de sus insinuaciones y mas aun cuando intento tocarme el trasero la semana pasada, cosa que no le soporte y la verdad fue muy gratificante el golpear su estúpido rostro. -dijo Moira.

-Bien hecho Moira, pero ¿y ahora que harás en los siguientes 6 meses que dure tu suspensión? -le pregunto Tiffany.

-Lo primero será buscarme un trabajo lo antes posible, las cuentas no se pagaran por si solas y con la mitad de mi salario será bastante difícil, pero lo peor es que mi auto se averió esta mañana. -dijo Moira.

-Rayos Moira, definitivamente hoy no fue tu día.

-Si lo se... mi vida es una mierda. -dijo con desanimo.

-No te desanimes, eres la chica mas ruda que conozco y se que saldrás de esta. -le dijo Tiffany tratando de animarla.

-En eso tienes razón, no cabe duda que tu si sabes como levantar el animo. -dijo Moira, tras darle un buen trago a su whisky.

-Por cierto ¿en donde esta el resto de tus amigos? -le pregunto.

-Shyla y Edward fueron a con motivo de su primer año de novios y respecto al buen Jimmy el fue asignado a una misión a Escocia. -contesto.

-oh ya entiendo, ojala y Jimmy este con bien. -dijo un poco preocupada.

-Por la expresión de tu rostro veo que te agrada y mucho. -dijo Moira.

-Y no sabes cuanto, desde que me lo presentaste en aquella fiesta del mes pasado me agrado mucho su amabilidad y su trato conmigo.

-De hecho a el le agradas también como no te imaginas, Sabias que durante los almuerzos siempre habla de ti. -dijo Moira.

-¿En serio? -pregunto la chica con asombro.

-Por supuesto amiga, de hecho recuerdas aquella pequeña pulsera que le regalaste, pues déjame decirte que la convirtió en su amuleto de buena suerte. -le contesto.

-Que tierno... en verdad no se como agradecerte el que me lo hayas presentado, Moira... -Dijo Tiffany. -Y hablando de cosas del corazón, ¿que hay de ti?...¿aun no tienes algún admirador o prospecto por ahí?

-Nada de eso por el momento... -dijo Moira. -La mayoría de los muchachos de la oficina me consideran demasiado ruda, temperamental y mal hablada, será por que no soy como las chicas a las que están acostumbradas a frecuentar, yo les digo sus verdades y si se molestan o no me importa una mierda, ese es mi estilo.

-Pero a pesar de lo te dicen, Shyla, Edward, Jimmy y yo sabemos que en el fondo eres buena persona. -le dijo Tiffany.

-Gracias amiga, en verdad no sabes como me reconfortan tus palabras en este momento. -dijo Moira.

Moira permaneció por un par de horas mas en la taberna hasta la hora del cierre y tras despedirse de su amiga, camino hacia la avenida principal para tomar un taxi, pero en ese momento un par de sujetos comenzaron a seguirla y a medida que aceleraba el paso, también lo hacían aquellos tipos.

Pero cuando parecía que Moira perdería a esos tipos, otro de ellos aparece enfrente de ella interceptándola.

-Hola preciosa, ¿por que tan sola? -le dijo aquel sujeto.

-Aléjate de mi, pedazo de mierda. -le dijo Moira.

al poco rato los otros 2 sujetos que la seguían llegan y la rodean junto con el otro sujeto.

-Muy bien muchachos, vamos a divertirnos un poco con ella. -dijo uno de los maleantes.

Moira soltó unos cuantos golpes a 2 de ellos, pero desafortunadamente el otro maleante logra someterla del cuello con un brazo.

-Suéltenme malditos desgraciados. -decía Moira, quien forcejeaba de forma desesperada.

el horror para Moira no parecía conocer limites cuando uno de ellos comenzó a acariciarle las piernas.

-No por favor... -decía Moira mientras las lagrimas brotaban de sus ojos.

-Muy bien pequeña zorra, ahora mismo veras lo que te tenemos preparado. -dijo el otro de los maleantes.

Todo parecía perdido para Moira cuando de repente una voz irrumpe a los maleantes.

-Oigan ustedes... esa no es la forma de tratar a una dama, así que mejor quítenle sus sucias manos de encima. -dijo un sujeto que llevaba un casco de motociclista y una pañoleta que cubría su rostro.

-Esto no te incumbe, imbécil... así que mejor date la media vuelta o abstente a las consecuencias. -dijo uno de los maleantes, quien desenfunda una navaja.

-Inténtalo si puedes, malnacido.

El maleante con la navaja se abalanza sobre aquel justiciero misterioso, pero este logra darle un fuerte puñetazo en la nariz, seguida de una serie de golpes, dejando mas que aturdido al villano.

los otros 2 maleantes al ver que su compañero había sido vencido deciden atacar al justiciero con una barreta y una navaja en mano, pero rápidamente el justiciero misterioso derrota al maleante de la barreta fácilmente, mientras que el otro intentaba atacarlo con la navaja, pero solo basto de un cabezazo con su casco para dejarlo fuera de combate.

De repente uno de los maleantes saca una pistola y amenaza con disparar al justiciero, pero de forma mas que sorprendente el justiciero logra desarmar al maleante con un rápido movimiento que dejo atónitos a los 3 maleantes incluso a la propia Moira, quien miraba atónita también.

-No deberías jugar con armas. -dijo el justiciero, quien logra darle un fuerte rodillazo en el abdomen, seguida de un golpe en el rostro.

luego de aquella paliza, los 3 maleantes optaron por huir despavoridos de la escena. Enseguida el Justiciero va en auxilio de Moira.

-Gracias por salvarme, sea quien seas. -dijo Moira.

-Suerte que pasaba por aquí y por lo visto sigues teniendo el mismo corte de cabello,

Aquel justiciero se quita el casco y la pañoleta del rostro, Moira se llevo una grata sorpresa al ver de quien se trataba.

-!Jake!

-Hola Bombón, cuanto tiempo sin verte.

CONTINUARA...