Bienvenida a Casa
Disclaimer: Todos los personajes pertenecen a la soberana Stephenie Meyer
Nota: este fanfic se sitúa justo cuando Renesmee nace, es un one-shoot, es algo que siento que a Meyer le falto la relación de padre-hija.
Nota2: Es como q un Spoiler para los que no han leído Breaking Dawnn se ubica justamente al final del libro de Jacob
Disfrútenlo
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Jacob POV
-Renesmee.
Desde arriba, hubo un nuevo sonido. El único sonido que me podía tocar en estos momentos. Un frenético golpeteo, unos rápidos latidos…
Un corazón cambiando.
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Edward Pov
Seguía trabajando en el cuerpo de Bella, estaba desesperado no me iba a permitir perderla, no ahora que teníamos una pequeña por la cual seguir fuertes, nuestra pequeña Renesmee, levante la vista y vi su cara, tenia los ojos cerrados y ella comenzaba a temblar al parecer la ponzoña estaba trabajando, acaricie su mejilla, seguía llena de sangre, con la manga de mi camisa comencé a limpiarla, creo que si pudiera llorar lo estaría haciendo en este momento, quería que esto terminara para poder tenerla entre mis brazos nuevamente.
Me acerque a uno de los muebles, saque una manta de ahí y tape el desnudo cuerpo de mi esposa, esperando que la ponzoña hiciera efecto en sus heridas; mi dulce Bella, luchando hasta el final, es por eso que le rece a todos los santos existentes y por haber, que ella lograra sobrevivir, la necesitaba a mi lado, la quería conmigo, no podía permitirme perderla ¿y si no era suficiente la ponzoña? Me incline de nuevo a su cuello con la intención de volver a morderla, una mano me detuvo, era Carlisle
-Edward, tranquilo, la ponzoña ya esta haciendo su trabajo ella estará bien te lo prometo, es tiempo de esperar los resultados- vi los ojos de mi padre, tratando de confortarme, como agradecía al cielo haberme puesto a este maravilloso ser en mi camino.
- Pero si no, Carlisle tengo miedo…
-Edward, tranquilo todo esta bien… ella saldrá de esta ya sabemos lo terca que es- escuche la voz de mi querida hermana Alice- hay alguien que desea verte Edward deberías bajar… deja que me haga cargo de Bella no queremos que despierte y este así- dijo sonriéndome
Dude un instante, un nombre apareció en mi mente: Renesmee ella era mi hija la mitad de Bella y mía, nuestra pequeña niña. Observe a Bella, que comenzaba a agitarse del dolor, pero no sufría, la morfina estaba haciendo efecto también. Sujete una de sus manos y la bese y me acerque lentamente a sus labios y deposite un beso en ellos acaricie su mejilla y me decidí a bajar.
Baje a velocidad normal, no había prisa, tenia que calmarme no quería que mi pequeña me viera o me sintiera preocupado, llegue a la sala y lo que vi me sorprendió tanto Rosalie sostenía a mi pequeña, quien dormía, mientras que Jacob permanecía sentado a su lado observando a Renesmee dormir, esto no me gustaba para nada, el perro se había imprimado de MI pequeña, decidí no molestarme, no era tiempo de arreglar este asunto, aunque después de todo el había hecho bastante por nosotros y yo entendería que esto tendría solución pronto. Los pensamientos de Rosalie me hacían sentir lastima por ella, sentía a Renesmee suya, pero claro ella tenia bien en mente que en cuanto Bella despertara ella solo seria su tía. Volteo al sentirme llegar.
-Rosalie… ¿Puedo sostener a Renesmee?
Me miro dudando, era sorprenderte como Rosalie se apropiaba de todo muy rápidamente.
-Claro después de todo tu eres su padre.
Tome a mi niña entre mis brazos, no pude evitar sonreír, estaba tan pequeña, dormida, alejada de todo, era mía y de Bella, tenia muchas facciones mías pero claro también ahí estaba la mitad de Bella, podía ver sus sueños a través de sus pensamientos eran colores pasteles nada en concreto, la simple inocencia de sus sueños, comenzó a despertarse, el color de sus ojos me dejo sin aliento eran los hermosos ojos de Bella, chocolates, profundos y traviesos, era mi Bella, le sonreí a la pequeña, quien me correspondió la sonrisa con su tira de dientitos perfectos y blancos, levantó una de sus manitas intentando alcanzar mi cara, la acerque mas a mi, cuando toco mi barbilla, ella me mostró lo que tenia en la mente, sonreí mas abiertamente, Renesmee tenia un don.
-Hola Renesmee, lo puedo ver a través de tus pensamientos mi vida- me volvió a sonreír- exacto solo tienes que pensarlo y lo veré- me mostró la única imagen que tenia de Bella, llena de sangre, batallando para respirar y abrazándola y sonriéndole, ella estaba haciéndome preguntas mudas que para mi era sencillo responder- si ella es tu mama, ahorita esta curándose Renesmee, pero ella estará muy pronto con nosotros te lo prometo bebe.
Me aleje de la sala sintiendo los pensamientos posesivos de Jacob hacia mi hija.
-Jacob tu y yo tendremos que hablar después, y tranquilo es mi hija te lo recuerdo
- de acuerdo Edward, siento lo de los pensamientos.
- tranquilo te entiendo.
Subí con Renesmee en brazos hasta mi habitación, me senté en la cama, ahora era yo quien tenia recuerdos de esta cama, de la terquedad de Bella, su ultima petición como humana me había sacado de quicio, tenia tanto miedo herirla, pero si no hubiera cedido no tendría a este tesorito en mis brazos el mejor regalo que pudo darme Bella. Baje la vista y vi a Renesmee observarme con tanta atención, su mente, eran miles de preguntas, era una bebe demasiado avanzada para sus horas de nacida, le sonreí, insisto si pudiera llorar lo estaría haciendo nuevamente de felicidad, ¿Cómo era posible que esta pequeña se había ganado tan rápido mi corazón?, era tan tierna, tan frágil, tan calientita como su madre, ellas eran todo para mi, nunca me sentí un hombre o mas bien un vampiro tan completo como hoy, creer que mi vida era vacía hace tiempo y tan solo hacia aproximadamente 4 años mi vació se fue llenando poco a poco, los mismos que he pasado al lado de Bella.
Renesmee extendía su manita de nuevo, ella no creía posible estar con nosotros, me toco la cara sintiendo si su padre era real, la levante hasta que la tuve a la altura de mi cara, me observo con esos ojos achocolatados de Bella, no pude evitar no sonreír, era la misma mirada curiosa de Bella, solo que en versión bebe, sus manitas tocaban mi rostro, mis cejas, mi nariz, mis ojos, mi boca.
-si mi amor, soy real, estas aquí en este mundo con nosotros eres tan querida, Renesmee, nunca estarás sola, nos tienes a todos contigo mi amor, y tu mama te prometo no tardara en venir a tu lado, ella es la que mas te desea y te adora como yo.
Renesmee sonrió, pero bostezo, sonreí, era una copia de mi adorada Bella. Me recosté hasta el comienzo de la cama, acomode mi cabeza en las almohadas mientras que a Renesmee la acosté en mi pecho, bocabajo, y comencé a acariciar su pequeña espalda mientras que le tarareaba una de las tantas canciones que compuse en su honor, mientras ella estaba en el vientre de su madre, su respiración se fue haciendo acompasada, mientras yo continuaba tarareándole su canción, hasta que se quedo dormida. Mientras que yo cerré los ojos relajándome con su respiración y afuera escuchaba el repiqueteo de la lluvia golpear la ventana.
-Bienvenida a casa Renesmee
Fin
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¿Que les pareció? Bueno en realidad es algo que tenia pensado escribir hace tiempo, pero la flojera jaja no se crean, espero que les guste, tengo mas historias por escribir!!
Bella Richart