Por donde comienzo…No diré una de esas maricadas como: "Era una mañana a principios de lo que sería mi primer año como estudiante en la secundaria, ¡que emoción!, pero fue allí cuando lo vi pasar junto con sus amigos con sus 1,70 de alto, su cabello castaño y esos ojos esmeraldas me dejaron prendados de él, pero no contaba con que más adelante iba hacer nombrado como el capitán de futbol americano y yo siendo capitán de atletismo ¡nuestro destino era odiarnos a muerte! ¡Porque la vida es tan cruel! ", No… Era cierto que el desgraciado media 1,70, su cabello era castaño pero nunca iba a reconocer que "sus ojos esmeralda me dejaron prendados", jamás en mi puta vida reconocería algo tan homosexual como que me gustasen los ojos de ese niñato llamado Eren Jaeger, primero muerto o que me cambien mi nombre por Pepito Gutiérrez, me gustaba más el mío, Levi Ackerman, aunque para mi desgracia compartía el mismo apellido con mi prima Mikasa que no es demás decir que es un acosadora en potencia, todas en la secundaria Rose sabíamos que Eren era protegido, vigilado y cuidado las 24 horas de los 7 días de la semana por esa obsesa que es mi prima, de seguro lo vigila en las noches, bueno eso no importa, a pesar de lo obsesa/acosadora que es mi prima, el mocoso tenía otro amigo, para ser sinceros la primera vez que lo vi pensé que era una niña, su nombre es Armin si mal no recuerdo, son un trio singular… Y a todas esas ¿qué mierda me importa su vida? Tenía una propia, sin nada en especial ya que me gusta mantenerla de ese modo, ¿amistades? Por desgracia solo dos… hablando del diablo, ella es una de esas dos persona que solo están en mí, pequeño, círculo social.
-Leviii~- pude sentir como recargaba todo su peso en mi cuerpo en lo que ella llama un abrazo, más bien me estaba ahorcando-
-Hanji, quítate, estas pesada- comencé a forcejear con ella para apartarla de un buen empujón
-Jaja no has cambiado nada desde las vacaciones o no enanín? Creo que… -con eso puso una mano sobre mi cabeza- ¡estas más enano que antes!
La muy bastarda se atrevió a burlase de nuevo con eso… como detestaba que hiciera la misma gracia todos los regresos de vacaciones año tras año por los últimos 5 años, llegue a este país a mis 11 años iniciando la escuela media, cuando deje mi amada Francia para llegar a Estados Unidos jamás pensé que el primer día mi única amiga (por dos años, ya que después se agregó la última persona que le diremos Cejotas por lo pronto) fuese ella quien se burla de mi después de gastarme lo mismo 5 putos años seguidos, recuerdo cuando la vi… Con esos lentes grandes para su cara, esa maraña de pelea de gallos que era al parecer su cabello y esa sonrisa, aunque psicótica, amistosa.
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Bueno niños este será nuevo compañero a partir de ahora, su nombre es Levi Ackerman, es de Francia así que trátenlo bien mientras se acostumbra al nuevo idioma y al nuevo país –vi como la maestra bajo su rostro y leí en sus ojos: "preséntate, no temas" con eso me mostro una pequeña sonrisa-
-Soy Levi Ackerman, tengo 11 años, espero no tener problemas.- Pude ver el desinterés y la incógnita en la cara de muchos, bueno no estoy muy familiarizado con este idioma así que lo último que me esperaba era que…
-JAJAJAJAJAJA si lo vieron? ¡Es tan lindo y habla chistoso!- jure ese día por mi amada Higia que la molería a golpes por atreverse a decir eso, vi como venía corriendo desde el ultimo asiento al final de las filas.
-¡Hola! Mi nombre es Hanji, Hanji Zoe pero puedes decirme Hanji- vi cómo me sonreía con toda la alegría del mundo en sus ojos y su extraña sonrisa.
-Oh vamos, no te enojes Levi.. ¡ahh hasta con el ceño fruncido eres adorable!- A pesar de que la miraba con el mayor odio y rabia del mundo no se iba.
-Levi… ¿estás seguro que eres niño? ¡Mira tú estatura! Y ese cuerpo tan delgado y visiblemente frágil, pareces una muñeca de porcelana- Listo, firmo su sentencia de muerte, estaba listo para propinarle un buen puñetazo a esa gafas de mierda cuando me vi detenido por la profesora que se puso en medio de ambos.
-ja ja ja tan energética como siempre no Hanji?- vi como la reprendía con la mirada delante de todos- Discúlpala Levi, ella es así con todos, bueno veamos donde te sentaras… -comencé a mirar por todo el aula un puesto disponible pero al parecer ya todos estaban ocupados cuando la bastarda comenzó a hablar con un tono chillón esta vez.
-¡Señorita Ana! A mi lado no hay nadie, ¡deje que Levi sea mi compañero!- al parecer sus ojos de borrego degollado la convencieron.
-Está bien, Levi puedes tomar asiento junto a Hanji al fi…
-¡Yo le enseño!- me jalo de mi brazo hasta llevarme a rastras lo que era la silla más sucia que vi en mi vida.
-¿Eh? ¿Qué ocurre Levi? Siéntate, es una silla-No pensaba ensuciar mi pantalón en esa silla llena de polvo que se ve que desde el principio de la creación estuvo allí.
-¿No entiendes? Sillaaa, Levi sillaaa- y comenzó a hacer mímicas de lo que era una silla y que debía hacer.
-Tch… Sé que es una silla gafas de mierda, está sucia y no me pienso sentar en ella- Descolgué el bolso de mi hombro para sacar un pañuelo y comenzar a quitarle todo rastro de polvo en ella- Listo, ahora está más decente.
-Jajaja a Levi le gusta la limpieza- Lo dijo más como una afirmación que como una pregunta.
-Por supuesto, la suciedad y el desorden me repugnan y no los tolero, si mi bella Higia viera como estaba esta silla se hubiese desmayado…-
-¿Higia? ¿Quién es ella?- Vi un toque de curiosidad en su mirada así que ¿por qué no decirle quien era mi amada Higia?
-Era la diosa de la curación, la limpieza y la sanidad, procede de la mitología griega-
-Oh… Cuéntame más Levi- poso su mentón en sus manos al terminar de apoyar ambos brazos sobre la mesa, jamás lo diría pero llego una pequeña emoción a mi pecho porque nunca nadie se mostró tan interesado como yo en mi preciosa Higia.
-Está bien, te diré más sobre ella…
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Y con eso lo que parecía ser el peor día de mi vida al entrar a la escuela media, nos pasamos buena parte del día hablando de Higia, mis gustos por la limpieza, manera de dejar todo limpio y demás cosas, con el tiempo nos acercamos más y somos lo que somos ahora…
-¡Siempre con la misma mierda todo los años Hanji!- cogí impulso para darle un golpe directo en el hígado pero con años de experiencia logro esquivarlo.
-Jajajaja vamos Levi, es muy temprano para tener esa cara de gato estreñido, además ya nos están llamando para el acto de apertura- me hizo señas de como los demás alumnos comenzaba a reunirse en el salón principal
-De esta no te salvas Zoe, me las pagaras corriendo 52 vueltas a la pista cuando comiencen las actividades deportivas-
-¡El tirano capitán ataca de nuevo! Sigo sin entender cómo fue que ganaste por mayoría de votos, o bueno más bien gracias a esa piernas de muñeca de porcelana que saben correr fue que lo lograste~-
-Maldita, si no fuese porque vamos a llegar tarde, te patearía ahora mismo-
-Agradezco su piedad capitán- grito un poco de más mientras hacia la típica señal militar.
-Mueve tu trasero gafas de mierda, por cierto ¿y Cejotas?-
-Regresa en esta semana, puede que al final de esta-Caminábamos despreocupadamente mientras me decía sobre Erwin, la última persona en mi círculo social gracias a Higia.
-Ya veo… Sigues de vacaciones en Alemania-
-Exacto, espero que me traiga algo bueno e interesante- Conociéndola querría una especie de mutante raro para tenerlo como mascota.
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Después de tener una pequeña pelea con Hanji logramos llegar a tiempo al escenario donde presentarían los nuevos profesores, los viejos, la institución y al final los clubs deportivos donde Hanji era quien me precedía si no podía cumplir con mis funciones de capitán del equipo de atletismo, después de ignorar prácticamente todo lo dicho por el director comencé a pasear la mirada en la cara de los nuevos estudiantes de la educación media, se verían más entusiasmados si solo el director no hablase la misma basura todos los años, cuando por fin dejo de hablar comenzó a presentar a los respectivos clubs, primero voleibol seguido de baloncesto para pasar al de tenis y seguir con el mío, todos los capitanes pasamos al frente para que nos conocieran los nuevos pero lo que nadie esperaba lo que ocurrió esa mañana.
-Y por último tenemos al club de futbol americano con su capitán Reiner Braun y su sucesor Bertholdt Fubar, recíbanlos con un fuerte aplauso-
Claro lo que faltaba un mastodonte de 1.85 pesando 95 kilos siendo capitán de un club de idiotas violentos corriendo y golpeándose unos a otros para atrapar un balón y llevarlo a una línea, que deporte más estúpido y ni hablar del capitán era un narcisista que solo tenía un balón de cuero por cerebro, jamás perdonare el día que me jugaron una broma pesada acosta de mi orgullo para humillarme delante de todo el mundo en la institución.
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-Levi, está por iniciar la carrera será mejor que te pongas el uniforme antes de que te llamen a la línea de salida- vi como Hanji asomaba su cabeza por los vestidores de hombres.
-Está bien, diles que enseguida voy- Con un leve gesto asintiendo su cabeza salió para cumplir con lo que le dije.
-Bueno Levi, será mejor que ganes si quieres demostrar el respeto que sientes por correr y así otros puedan apreciarlo- comencé a despojarme de mi uniforme colegial para ponerme el respectivo del club de atletismo pero fue el peor error que puede haber hecho en toda la mañana.
-¿Pero qué?... No, no puede ser… Esta debe de ser una maldita broma-Y para confirmar mis dudas me mire en el espejo del baño, mostraba en todo su esplendor que mi uniforme que era blanco como la misma pureza en si ahora era de un vil y vulgar rosa.
-Malditos, cuando me entere de quienes fueron la pagaran hasta las últimas consecuencias- Antes de poder resolver mi rosado problema escuche como mi nombre era llamado desde las gradas por los altavoces.
-Mierda, mierda, mierda y más mierda…Tengo que salir- Y con lo poco que me quedaba de dignidad emprendí paso hacia la pista, solo para recibir las múltiples risas de mis espectadores y una Hanji sumamente sorprendida por mi ropa.
-¡Levi! ¿Pero que le paso a tu uniforme?
-No lose, pero cuando encuentre al responsable yo...-Fui acallado por una serie de silbidos y comentarios nada decentes hacia mi persona por la cara más detestable que me tope en mi existencia.
-Vamos amor, ¡modélanos con tu uniforme y esas piernas!
Gire mi cabeza para ver el propietario de esa palabras y no era nada más ni nada menos que el hijo de puta de Reiner.
-Sabía que esta mierda fue planeada por ese hijo de puta y ese maldito equipo- Escupí cada palabra como si todas las letras fuesen a asesinarlo delante de todos.
-jajajaja lindo color, ¡te queda con esa figura de marica que tienes!- El muy infeliz lo estaba gritando desde la grada del frente mientas su sequito le hacía barras, no soportaba mucho más pero gracias a Higia que Hanji me detuvo.
-Levi, sabes que puedes ser expulsado de la carrera si vas y le partes la cara, demuéstrales cuanto vales y lo importante que es esto para ti que ni aunque te pusieran una falda a juego con el color dejaras de ser Levi Ackerman el capitán del equipo de atletismo- Tenía razón y en su mirada se veía que también quería venganza más tarde, después la planearíamos con más tiempo.
-Gracias, me ayudaras con la venganza- Sabia que no era una pregunta fue una total afirmación y la confirmación fue cuando vi su cara desfigurada en una macabra sonrisa.
-Por supuesto Levi ¡ahora ves y gana ese trofeo!
Ese día les deje en claro quién era Levi Ackerman, corrí como si el mismísimo diablo me hubiese poseído y deje a todos mis rivales detrás con mucha ventaja, pero la mayor satisfacción fue cuando vi a Reiner con el ceño fruncido y frustrado ya que pensó que su estúpida bromita me haría perder mi oportunidad de ganar el primer trofeo del equipo de atletismo en mucho tiempo, y tampoco olvidare su cara de odio y furia a flor de piel mientras alzaba el trofeo y le enseñaba el dedo medio con un claro mensaje: "ya sabes qué hacer con él, metértelo bien profundo", fui reprendido por hacerlo en medio de la entrega pero valió la pena cada maldito segundo y con eso mi venganza más adelante.
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Cuando iba a ponerse en su lugar intencionalmente me tropezó el hombre provocando que me inclinara adelante para no caerme en medio de los nuevos que se encontraban en la primera fila.
-Tch… bastardo por poco caigo encima de los nuevos-
-¿Y qué me importa? Con ese cuerpo de mujer no le harías ningún daño- me mira de manera superior y con odio en cada centímetro de sus ojos pero no crea que ganara tan fácil.
-Lo dice quien casi por mi culpa no logra despertar después de una pelea aquel otoño en la casa de Marco…"¡oh, Reiner! ¡Mira tú cara! Terroncito de azúcar, como te la dejaron, mi pobre corazón, el hijito de mamá esta todo lastimado, ¡mi lindo bebe!"- con clara burla en mi tono de voz le recordé como fue a buscarlo después de casi matarlo a golpes en la casa de Marco, pobre la sangre era difícil de quitar del piso.
-¡Maldito con mi madre no te metas!- El muy animal alzo la voz como para ser percibida por los oídos del director quien detuvo su discurso para darnos la mirada de siempre por nuestras constantes rivalidades "siguen y los expulso de los equipos" al parecer el sesos de cuero lo entendió.
-Vaya tan idiota e impulsivo como siempre, a este paso solo lograras que te expulsen imbécil- Solo lo miraba por el rabillo del ojo mientras lo miraba con el mismo odio que el hacia mí.
-No lo hará, soy quien más victorias le ha conseguido a la institución en comparación tu miserable equipo solo unas cuantas victorias- Por mucho que mi sangre hirviera, era cierto, el equipo de atletismo no tenía victorias desde hace varios años y el número de integrantes era reducido a pesar de que eso comenzó a cambiar cuando gane el trofeo y me nombraron capitán nadie contradecía lo que decía Reiner la mayoría de trofeos eran traídos por el equipo de futbol americano pero no me quedaría con los brazos cruzados…
-Dime Reiner… ¿Cómo esta Annie?- Le di justo en el clavo cuando vi que dirigió su total atención a mí y sus puños eran cerrados con fuerza, mi mirada de burla y sonrisa no ayudaban mucho con la situación, espere un puño que jamás llego pero nadie espero que hiciera algo como lo que hizo…
-¡SE FUE DE LA INSTUTICION POR TU PUTA CULPA!- El mastodonte capto la atención de todos los presentes mientras nos veían con los ojos abiertos pero él quería más atención como siempre, de un solo empujón sentí el evidente vacío pero no sentí el duro concreto en mi caída, en debes de eso sentí otra cosa, alguien para ser exactos.
-Reiner Braus, ¡queda suspendido por 2 semanas y quedan retirado de su cargo como capitán del equipo de futbol americano!- Bramo más que enojado el director, pero aunque fue apenas perceptible para mis oídos puede notar como se removían debajo de mí, fue cuando lo vi, por primera vez de frente.
-Uhm… Creo que debería pararse, por favor- Cuando mi vista dejo de darme vueltas puede notarlo, era el mocoso que mi prima siempre acosaba, Eren Jaeger…
-Es enserio… parece por favor-¿Estaba sonrojado? Pero ¿porque? Alce mi vista y solo puede ver caras incrédulas, admiradas y una que otra riendo de forma muy inusual podría decir escalofriante.
-Umh…- Fue cuando comprendí la situación, más bien mi pobre trasero que sentía algo duro y demasiado inusual debajo de él, baje la mirada para encontrarme con todo el panorama, número uno este niñato estaba duro debajo de mí, numero dos yo estaba encima de el en toda su evidente erección y número tres la posición no ayudaba, conmigo encima y el debajo pareciera que lo estuviese cabalgando cual puta en celo.
-Maldición…Deja esa expresión idiota, ¿acaso tienes 15 años?- pose mi mirada directamente en la de él.
-Sí, los tengo y usted está encima de mí, si fuese tan amable de bajarse de mis piernas se lo agradecería- No le di más paso por que no quería seguir con la conversación, me puse en pie para darme cuenta de la presión y el aura de odio infinito que desbordaba de mi querida prima Mikasa.
-¿Qué? Fue un accidente, deja esa expresión, terminaras vieja y arrugada sin mencionar sola- Antes de que me hablara o refutara algo al respecto me fui de allí para encontrarme con Hanji.
-¡Levi! ¿Te encuentras bien? Jajaja sí que fue una dura caída.. JAJAJA que digo ¡si aterrizaste en ese chico! Debiste de ver su expresión, valió oro, estaba entre confusión, vergüenza y desconcierto- Mientras la lunática se reía mientras se sujetaba el estómago, el director me llamo.
-Levi Ackerman, a mi oficina ahora- Se notaba que ardía en furia con un suspiro de resignación emprendí paso a la dicha oficina del director que conocía tan bien.
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-Hola Marta, ¿Cómo te trata el viejo?- Salude a la ayudante del director quien ya me conocía muy bien.
-No me quejo, sabes cómo es Kaney, bueno pero a veces es duro- Era una señora agradable que llevaba mucho tiempo en ese puesto, ese malvado de Kaney ya debería jubilarla.
-Si tienes alguna queja házmela saber hare que lo reprendan- Con un guiño en el ojo entre a la oficina de Kaney… Ackerman cabe de decir, es mi tío, desde que mi madre murió él ha cuidado de mí, supongamos que le debo casi todo en mi vida pero eso no quiere decir que lo obedezca, al entrar en la oficina de un lado estaba Reiner con cara de querer matar hasta un bebe si le hablaban, no puede evitar dejar escapar una pequeña risa al recordar que no sería más el capital de su adorado y estúpido equipo, después de darnos mutuamente una mirada de odio y desprecio tome asiento delante de Kaney.
-Hola, Kaney- Deje descansar mi cuerpo en esa silla, algo cómoda ya que se me era costumbre estar en ella.
-Levi.. Lo hemos hablado muchas veces, estamos en la escuela-Me miraba como solo el sabia... como un Ackerman.
-Está bien… Hola director Ackerman-
-Respecto a tu pequeña pelea- ironizo en el pequeña cabe destacar- con Reiner no serás revocado de tu cargo ya que a simple vista fuiste la "victima" pero dado a tu historial sé que lo incitaste por lo que también recibirás un castigo, como Reiner tiene que decidir quién será su sucesor, tu quedaras momentáneamente a cargo del equipo de futbol americano.
-¡¿Qué?! ¡Cómo me puede dejar a cargo de bestias que solo quieren coger un puto balón!- Totalmente indignado me levante de la silla para encararlo
-¡No me hagas considerar quitarte de tu puesto también! Quedaras a cargo y esa es mi última palabra-Al ser ambos Ackerman sabíamos que esta discusión no tendrá pie ni cabeza o aceptaba el cargo o me despido de mi puesto, sin más remedio regrese a mi asiento mientras me cruzaba de brazos.
-Tch.. está bien pero los entrenare a mi manera-Mire por el rabillo del ojo a Reiner quien se encontraba también en total desacuerdo con la decisión de mi torpe y estúpido tío.
-Como veas más conveniente, ahora se pueden retirar los dos, sin peleas o ningún volverá a participar en los equipos de lo que queda del año escolar-
Salí de esa oficina primero sin no antes mirar a mi rival con todo el odio que mi cuerpo podría producir en esos momentos.
Vaya primer día, y apenas es el comienzo de esta historia y de cómo por esa estúpida acción de Kaney termine por poner en duda la mayor oportunidad de mi vida.
