Disclaimer: Gintama pertenece a Hideaki Sorachi.

Personajes: En general, Umibozu|Kankou/Kouka; Kagura; Kamui. Para este drabble en particular, Umibozu!centric.

Extensión: 340 palabras.

Notas: Lo único que me sale en Gintama son drabbles cutres (?). Me sobre-emocionó la historia de Umibozu y Kouka, así que me dieron ganas de escribir sobre ellos, pero como lo único que me salen son drabbles decidí juntarlos todos en una colección por propósitos prácticos.

De seguro haré 5 o 10 dependiendo de mi inspiración (porque me gustan los múltiplos de 5), dudo que mucho más. Escribiré de todo un poco, me gustó la historia de la familia en general así que bien pueden estar centrados en la pareja, en ellos como familia o en uno en particular.

Casi todos con un poquito de angst porque me es tan natural como respirar.

Advertencias: Spoilers Rakuyou Arc.

[Editado 27/04/2019]

.


Under the umbrella.


I

Sobre instintos.


Podía intentarlo, todavía podía, era de hecho lo único que podía hacer: intentar. Era un idiota, no era quien para negar dicha verdad, pero siempre creyó ser el tipo de idiota que no dañaba a nadie. Sin embargo y tal como iba el dicho; cuando estás muerto no lo sientes, pero es duro para el resto, lo mismo cuando eres idiota. Por supuesto que era el tipo de idiota que dañaba, no había otra manera, que no se diera cuenta era tema diferente.

Era el tipo de idiota que solo sabía luchar, tal como sus instintos le ordenaban. Era el tipo de idiota que no sabía hacer absolutamente nada más que eso: luchar. No sabía ser un padre, no sabía proteger, no sabía coquetear con chicas; porque ¿quién podría negar que sus intentos para conquistar a Kouka rozaron el ridículo?

Repetía, aún así podía intentar.

Podía intentar ser un padre, como intentó proteger a Kouka y como intentó coquetear con ella. Podía intentarlo y, quizás, no fallar en eso —de nuevo—. No le dolía el brazo perdido tanto como el orgullo herido de saber los motivos que habían llevado a Kamui a enfrentarlo, no le dolía tanto como la conciencia de que lo hubiera matado de no ser por Kagura. Le dolía todo eso como le dolía saber que, aún con todos los sacrificios, Kouka había muerto. Saber que la había matado y no arrepentirse de ello como sí de haber fallado en crear una familia.

Porque él no sabía ser un padre, por mucho que intentara. No sabía regresar a Kamui al camino del que se había desviado como no sabía quitar esa mirada impotente de los ojos de Kagura, no podía hacer nada de eso porque solo sabía luchar.

Al menos, dentro de todo se consolaba en la idea que por diez errores podía tener un acierto. Había perdido su brazo protegiéndolos y casi había logrado ser un buen padre por unos dos segundos y algo.

Para tantos años de fallos, dos segundos y tanto era un avance.


Es raro, lo sé, sonaba mejor en mi cabeza.

Nos leemos. Bye.