El ordenador hacia el típico ruido cuando llevaba mucho tiempo encendido y empezaba a recalentarse, aún así Fitz quería ver todas y cada una de las fotos que Jemma había hecho en aquel planeta azul. Se había llevado una decepción al ver la foto con ese tal Will, pero había descubierto los audios que Jemma había grabado para él y tenía mucha curiosidad.

El tercer archivo que Fit abrió esa noche, no era un audio, sino un video.

Jemma salía en la pantalla, en aquel planeta, con la cara sucia y magullada. Fitz no podía seguir mirándola sin entrarle ganas de pegar a alguien. Subió el volumen de la pantalla y escuchó.

"Fitz, si no encuentro agua pronto, no sé si podré sobrevivir. Parece… parece una tontería pero… estando aquí sola he tenido tiempo para pensar. ¿Recuerdas… recuerdas cuando nos conocimos? Yo si. Eras tan callado y tímido, y tan increíblemente inteligente. Guapo. Era una sensación rara ¿no? El no querer estar sin alguien. Debías de estar muy cansado de que yo te siguiese a todos lados."

-No.- dijo Fitz.- Nunca estaría cansado de tenerte a mi lado.

Él siempre creyó que Jemma nunca había sentido nada por él, que siempre se lo había inventado, pero ahora, ahora sabía que Jemma se había sentido atraída por él desde el principio, como él se sintió atraído por ella. Los dos habían sido tan ciegos como para no darse cuenta de lo que sentía el otro.

"A veces me imagino dónde hubiésemos ido a cenar. Probablemente hubiese sido un restaurante caro porque te conozco. Y… a lo mejor después de eso… Siempre he tenido una idea sobre nuestro futuro… Hay una pequeña cabaña en Perthshire que vi un día cuando era pequeña conduciendo con mis padres. No sé por qué pero la encontré tan acogedora que ahora no puedo evitar pensar sobre nosotros dos en ese lugar donde podríamos… podríamos… Pero supongo que ya no importa. Tengo que conservar la batería Fitz, no sé cuando la necesitaré pero te prometo que hablaré contigo por mi cuenta ¿vale? Es extraño lo mucho que necesito hablar contigo cuando estas más lejos de mi. Te veré pronto, siempre estaré contigo, Fitz."

Fitz se limpió las lágrimas que le caían por la cara. Jemma quería vivir con él en Escocia. En su país natal. Nunca lo hubiese imaginado. Se levantó de la silla y se fue a al pasillo a buscar a Jemma. No sabía dónde estaba pero tenía una idea de lo que ella quería hacer en ese momento. Fue a una de las pocas ventanas que tenía la base y como si Fitz tuviera un poder especial en encontrarla, ahí estaba Jemma.

-Hola.

- Ah, hola Fitz. Esta es una de las pocas ventanas que tiene la base y quería…

-…ver el amanecer. Ya.

Jemma sonrió tímidamente y siguió mirando por la ventana.

Tengo novedades.

¿Si?

No quiero hacerte ilusiones pero creo que podemos salvarle.

Fitz…

Jemma le miró con alivio en sus ojos.

Y… bueno la tarjeta SIM de tu móvil ya funciona y… he visto los videos.

Oh.

¿Conque Perthshire eh?

Sí.

Esta en Escocia.

Dijo Fitz con una sonrisa en la cara.

Ya sé que está en Esocia, Fitz. Siempre me gustó.

Cuándo… cuándo dijistes esas cosas… bueno estabas cansada y deshidratada, entiendo que no quisieras decir lo que yo entendí…

Tenía la mente tan clara como nunca la he tenido cuando dije esas cosas.

Jemma podría decirle a Fitz que le quería veinte veces en la cara, y él seguiría sin creérselo.

¿Qué crees que deberíamos hacer?- le preguntó Jemma.

Bueno, por ahora, veamos el amanecer juntos.

El sol comenzó a salir por el horizonte y Jemma se dio cuenta de que era la primera vez que veía el Sol desde hacía 6 meses. Y ahora estaba viéndolo con Fitz. De algún modo sintió que era como tenía que haber sido siempre, ella y Fitz juntos como siempre lo habían estado.