In distans

Nadie me ve, nadie me ve. Es de noche y nadie me ve. Yo me uno a la noche, yo soy una parte importante de la noche. Yo uso a la noche como si fuera mi prenda y una vez que me cubre, ninguna vergüenza tengo al moverme con ella a cuestas. Los miro frente a la Iglesia, haciendo guarda como chiquillos y repartiéndose almendras para pasar el rato. No me ven, no me ven, no me pueden ver. Y pierdo interés en ellos, porque ahora debo ver hacia adelante, hacia adelante, Teresa. Uno con la noche, uno con la noche. Destrozar, destrozar. Acabar el trabajo. Hacer que te sientas orgullosa de mí, desde el fondo de mi corazón, en el que habitas.