El mundo he de cambiar

Encerrado una vez mas en lo que puedo llamar "hogar". Un simple cuarto, frío, solitario… no puedo dejar de preguntarme una y otra vez que fue lo que lo que hice mal, saber porque la gente de la aldea me odia tanto. Veo mi brazo y aun sigue sangrando aquel corte que me hicieron. Duele… pero no tanto como lo que siento en estos momentos. ¿Por qué me dejaron solito? ¿Acaso era un mal niño? Me gustaría saber que fue de mis padres. Iruka-sensei es muy bueno conmigo… pero nunca esta cuando lo necesito... el también me termina dejando… ¿acaso soy un estorbo?

… Quiero irme… ya no quiero que me golpeen… ya no quiero estar mas solo… pero tengo miedo… no puedo dejar el único lugar que he conocido… el viejo también ha sido bueno conmigo… pero no lo soporto… hiere demasiado… esas palabras nunca se borraran de mi mente…

-"¡Largate de nuestra aldea, monstruo!"-

El mundo he de cambiar

Para ir a un lugar ideal

En donde no reine el mal

Lo haré con decisión

Un mundo lleno de esplendor es mi ilusión

Ahora tengo ocho años y a pesar de que mi situación no ha cambiado, me he resignado a ello. Pero eso no significa que no haré nada para cambiarlo. Es solo que primero necesito entrar en la academia ninja, de ahí será… ¡mi sueño ser el próximo Hokage! Lo pienso y no es tan mala idea. Al mejor ninja de toda la aldea siempre lo admiran y tratan bien… ¡esa es mi mejor opción! Quizás así obtenga algo de cariño… o por lo menos respeto.

Camino a paso torpe por las calles, deseoso de llegar al lugar donde podrían cumplirse todos mis sueños. Mismos que estaban siendo atacados con cada paso que daba. La gente me veía con odio, y yo lo único que podía hacer era sonreír para evitar demostrar lo que realmente sentía, cuanto me afectaba aquella indiferencia. Llegue corriendo a la academia, aislándome de los demás, y sentándome en un columpio que por ahí se encontraba. Veía como iban llegando mas chicos, tomados de la mano de su madre… sentí un poco de envidia pero a la vez dolor. Como desearía estar en la situación de cualquiera de esos niños…

Una vez que el evento de bienvenida hubiera terminado, me acerque de nuevo, esperando poder colarme entre la multitud, y rogando que así nadie se diera cuenta de mi presencia. Mis ojos nunca se despegaron de Iruka-sensei, llegando con el, sabia que ya nada malo me podía pasar, el problema era alcanzarlo. Corrí por todo el edificio, ansioso por hablarle, de no ser porque me tope con alguien, cayendo de espalda. Me levante, sobándome el golpe, cuando vi contra quien había impactado, quede helado.

Con temor iba mi corazón

Sin poder el futuro esperar

Sin pensar, ningún aliento me podría animar

Quede completamente mudo. Aquel imponente hombre me había dado un gran susto. Podía ver la sonrisa maliciosa en su rostro, y eso para mi solo significaba una cosa. Antes de que pudiera pensarlo más, o peor aun, confirmar mis sospechas, salí corriendo lo más rápido posible. No había manera alguna en que dejaría que esto me pasara. Pero al ser tan solo un niño, no tardo en darme alcance. Mis pequeñas piernas ya me dolían de tanto esquivar a la gente que tenia enfrente, no sabia que hacer.

-"¡No queremos a un monstruo como tu!"-

-"¡Mi hija no estará cerca de ese engendro!"-

Los insultos, cada vez más crueles y más sonoros, finalmente lograron que pequeñas lágrimas salieran de mis ojos. Lo que estuve conteniendo desde que había llegado a la academia, había salido sin más. Me sentía mal, ¿también estaba prohibido que tuviera cualquier tipo de contacto? Podía escuchar nuevos pasos acercarse, seguramente no estarían contentos hasta que me dieran una paliza… otra vez. Adquirí una especie de temor, tanto a la gente, como al hecho de salir al Ichiraku, lugar donde solía comer todo el tiempo.

-"¿Por qué saliste huyendo?"-

Aquella voz. Yo conocía perfectamente a quien pertenecía. Sentí una inmensa alegría y levantando la mirada, lo observe detenidamente, negándome al impulso de correr y abrazarlo. Basto con ver mis lágrimas para que comprendiera todo lo que me había pasado. No pudo hacer más que darme una sonrisa tranquilizadora. Y que de alguna manera agradecía.

-"Vamos, Naruto. No querrás llegar tarde a tu primer día de escuela"-

-"¿Ya no hay nadie afuera?"- pido con temor.

-"Todo esta arreglado. Ya no hay nada de que preocuparse ¿vale?"-

Asiento con lentitud, y me dejo guiar por los pasillos una vez más. Al llegar al aula noto como todos se callan, y comienzan a verme fijamente. Y como si eso no fuera suficiente, también se oyen cuchicheos, donde se que el tema de conversación soy yo. Nada alentador. Por los nervios de tener que pasar entre ellos, comienzo a subir las escaleras y para mi mala suerte, tropiezo, cayendo al suelo de cara. Silencio sepulcral. Que pronto fue sustituido por tremendas carcajadas.

-"Esa fue buena"-

-"jajajajajaja… no creo… jajajajaja eso fue genial"-

Quede impresionado, ¿se reían?, pero no sabia decir si era bueno o malo en mi caso. Incluso un pequeño perrito que andaba por ahí, comenzó a ladrar contento y meneando la cola. Iruka-sensei solo veía la escena con molestia. Tal parecía que odiaba que su clase fuera interrumpida. A duras penas encontré un asiento vacío, y sintiéndome de alguna manera mejor al ver que ellos ahora se reían en vez de mirarme con odio.

-"¿Cómo te llamas?"-

Mire a todos lados, no podía creer lo que estaba oyendo.

-"¿Te refieres a mi, datte bayo?"- pedí señalándome con un dedo.

-"Claro, pues que esperabas"-

-"Soy Naruto"-

-"¿Naruto? He escuchado tu nombre de mi padre… oye eres muy gracioso. Por cierto ¿no estas lastimado?"-

-"¿Eso crees?... ¿te preocupe?, daijoubu, estoy bien"- me entro la risa nerviosa.

-"Que bueno. Contigo cerca no será aburrido estar en la academia"-

-"¿Y tu como te llamas?"-

-"Hyuuga Hinata"-

-"Tengo el presentimiento de que nos llevaremos bien"-

Cuando se enteraron de que hablaba todos los días con ella, su padre se presento, reclamando furioso. Yo me entere de mala manera. Me sentí muy mal al verla llorar. Intente acercarme, pero mi sensei me vio antes, y afortunadamente me indico no acercarme hasta que se fuera el señor Hyuuga. Para cuando corrí hacia ellos, preguntando por mi amiga, ella se alejo, en sus ojos podía ver tristeza.

-"¿Por qué se va?"-

-"Naruto… ella se alejo por el bien de ambos"-

-"No entiendo… Hinata-chan es mi amiga"-

-"Lo se…"- parecía buscar las palabras adecuadas –"Pero si los ven juntos de nuevo, Hiashi-sama se molestara en verdad, y podría hacerte mucho daño. Ella solo quiere protegerte porque te aprecia"-

-"Pero… ahora estaré de nuevo solito…"-

-"Nunca has estado solo, Naruto, pero debes buscar otra compañía, por lo menos hasta que se calmen las cosas, no podrás hablar con Hinata"-

Una vez más fui rechazado. Todo indicaba que ella era la única que se había molestado en conocerme. Quizás no era tan genial como me había hecho creer. Al curso seguía entrando gente. Y yo cada vez estaba quedando mas aislado, cosa que no fue inadvertida por mi sensei. Siempre que lo miraba, mis ojos parecían preguntar cuando podría hablar de nuevo con Hinata-chan.

Para distraerme, me salí de la clase ante la mirada de un furioso Iruka-sensei. Aunque no había mucho que reclamarme, podíamos salir a receso inmediatamente yo estaba en el patio. Me dirigí a mi columpio, viendo desde ahí a un grupo de niñas, escuchando atentamente a su instructora. Ahí se encontraba Hinata. Pensé en correr para saludarla, pero lo olvide al ver como una niña rubia se acercaba a ella. Y una tercera se unía al grupo, se veía tímida… igual de temerosa que yo… extrañamente me sentía feliz por eso.

-"¿Podria quedarme con ustedes?..."-

-"Hola… ¿a que tienes miedo?"- pide la ojiblanca.

-"Desde hace rato, esas niñas me están molestando…"- exclama señalando un grupito a su derecha.

-"Y sigue siendo por tu frente ¿o me equivoco?"- pregunta la rubia, molestia evidente.

-"Si… y ya no se que hacer…"-

-"Sakura… no puedes huir toda la vida. Mira, por ahora nos quedaremos las tres juntas, y así, si te molestan yo me encargo de ellas. ¿Te parece?"-

-"Arigatou… Ino-chan"-

Pero un día te conocí

Y encontré motivo para vivir

Con tu ternura e ingenuidad

Conocí la verdad, brotando en mí un anhelo

Escuchaba jadeos, pero no ubicaba de donde provenían. Aunque vi como se movían unos arbustos. Armándome de valor, me acerque, espiando cautelosamente como un buen ninja. Lo que encontré, me dejo perplejo. Aquella niña del otro día, no hacia más que proteger su cabeza, estaban agrediéndola como solían hacer conmigo. Tenia que hacer algo, y pronto. Llamar a los profesores no serviría, tardarían demasiado, así que me arriesgue.

-"Oigan, déjenla en paz"-

-"¿Qué quieres, bakemono?"-

"Suéltala, ella no les ha hecho nada"-

La niña me observa con atención. Una mirada esperanzada.

-"No lo retes…"- oí que murmuraba una –"Ese es el niño del que hablan todos los adultos"-

-"A mi no me intimida"-

La mas grande del grupo se acerca de manera amenazadora y yo realmente no sabia como defenderme. Lo único que se me ocurrió fue colocar mis manos frente a mí, evitando que me alcanzara. Ella cayó de espaldas, sorprendida, y cuando me acerque para ver si no le había hecho daño, me miro con horror.

-"¡Ahhh! ¡Me toco! ¡Ese engendro me toco!"-

Sin comprender lo que había pasado, solo las vi correr. Me voltee hacia la niña, quien me veía con una gran sonrisa. Se levanto y limpio el polvo de su ropa.

-"Gracias… por ayudarme…"-

-"No fue nada, datte bayo"- dije rascándome la nuca –"Ni siquiera hice algo"-

-"Has sido muy bueno conmigo. Ah, mi nombre es Sakura"-

Algo me decía que ese nombre me quedaría grabado a fuego en la mente. Sus ojos verdes me veían con detenimiento, como si me estuviera analizando.

-"Yo soy Naruto… te vi el otro día con Hinata-chan"-

-"Yo no veo porque eres peligroso. Me pareces una buena persona"- dice viéndome con interés.

-"¿Eh?..."-

-"¡Ah, Hinata-chan! Ella es muy linda y tierna conmigo, e Ino-chan siempre nos enseña muchas cosas"-

-"Si… Hinata-chan es muy buena, además de agradable"-

-"Naruto…"- parecía recordar algo –"¿Tu eres a quien Hyuuga-sama le prohibió ver?"-

-"Hai…"- baje la cabeza, triste –"Y yo no quiero que tenga problemas"-

-"Eso es muy lindo de tu parte. Por eso te ves simpático. Eres agradable. Si quieres, tu y yo podemos ser amigos también"-

-"¿Lo crees? Hinata-chan pensaba lo mismo"- reaccione a su ultima frase –"¡Claro, eso seria genial, datte bayo!"-

-"Ella es amable con todo el mundo, y veo que escoge bien a sus amigos. Te menciona todo el tiempo, y siempre se pone triste al saber que no puede estar contigo"-

Sus palabras lograron animarme. No me conocía, pero decía que era alguien especial. Y no importaba que me hubieran dicho monstruo una vez mas, no le importo. Hinata-chan no sabe esa parte de mi… no sabe que me ignoran por decirme…

-"Espero verte de nuevo, tengo que irme a clase"-

La veo correr, yo aun sigo sonriendo como un baka real. Pero ahora que sabía su nombre, y había hablado con ella, me sentía feliz sin explicación.

El mundo he de cambiar

Quiero ver que podrá llegar un nuevo amanecer

Pues a tu lado se, que mi futuro no es oscuro

Cambiare, pues hoy se que lo lograre

Junto a mi vas a estar

Abre tus alas ven

Un mundo donde reine el bien, hay que lograr

No que realmente me importara, pero también se me hacia tarde. Camino hacia la Academia, completamente feliz. Me sentía diferente, no sabia como explicarlo. Con solo pensar en sus ojos verdes un cosquilleo me atravesaba el cuerpo, era único. Sakura… era igual de bonita que la flor que lleva el mismo nombre, supongo que por eso se lo pusieron. Solo tengo su amistad por ahora, pero le demostrare que puedo ser algo más. Sin saber porque razón, me ha dado un nuevo objetivo en mi vida, o mas bien, la verdadera razón por la cual deseo ser Hokage. Por lo menos algo he aprendido del viejo. Me giro y la veo platicar con las otras niñas. Solo reafirma mi decisión.

-"Prometo que nunca dejare que nada te pase. No volverán a molestarte mientras yo este aquí, datte bayo. Es una promesa de por vida"-

A/N: Eeeeeeeeeto… se que debería estar terminando los fics de Inuyasha pendientes, pero para ser franca, estoy corta de inspiración en ellos, pero en cuanto me vengan ideas, las plasmo y actualizo de inmediato. A lo que iba, ya tiene mucho tiempo que había dejado de escribir, y en esta ocasión, regreso con un fic de Naruto, el primero pero no el ultimo, hay muchos trabajos que tengo pendientes… (y sigues sin acabar ninguno, mejor retírate) ejem, como iba diciendo, ya que pienso regresar a la escritura, si todo me sale bien, tendré aproximadamente un mes libre, cosa que aprovechare para subir nuevas historias y terminar las que aun siguen pendientes.

Bueno, este es mi primer trabajo sobre el buen kitsune y espero que sea de su agrado. Juro que ahora si voy a cambiar (no sabia que te gustaba tan espantosa canción) eso no te incumbe, ah si, y no olviden dejar sus reviews, según los comentarios, la actualizare con mas rapidez (eres una tramposa, la historia ya esta casi terminada) ya que solo continuare si a la mayoría parece gustarle.

Ja ne!